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El Armagedón nuclear está 'a las puertas' (octava parte)
Continuación de El Armagedón nuclear está 'a las puertas' (septima parte)
Tiempo para huir
Cuando podamos ver la abominación desoladora levantarse en el lugar santo y rodear a Jerusalén (en el área de Jerusalén) ésa es la señal para huir. “Entonces los que estén en Judea, huyan a los montes. El que esté en la azotea, no descienda para tomar algo de su casa; y el que esté en el campo, no vuelva atrás para tomar su capa. Mas ¡ay de las que estén encintas, y de las que críen en aquellos días! Orad, pues, que vuestra huida no sea en invierno ni en día de reposo” (Mateo 24:16-20).
Los discípulos del primer siglo al principio pensaron que Cristo regresaría mientras ellos estaban vivos. Eso hizo su pregunta acerca de la señal aún más urgente. Su nación iba a ser destruida en unos pocos años. Ellos conocían estas profecías que Cristo estaba mencionando; profecías que aparecen muchas veces en el Antiguo Testamento.
Muchos de los discípulos de Cristo tuvieron que huir a Pella en el año 70 d.C., así que estas Escrituras sobre huir aplicaban a ellos, como también a nosotros hoy. Su huida fue sólo un tipo de lo que los muy elegidos de Dios deben hacer en este tiempo del fin para ser protegidos de la Gran Tribulación que ocurre justo antes del Día del Señor y la Segunda Venida.
Cuando los muy elegidos de Dios vean la abominación que hace desolación, ¡ellos deben correr por sus vidas a un lugar donde Dios los protege! Dios revelará dónde está ese lugar cuando el tiempo llegue (Apocalipsis 12:14). ¡Ésta es la única manera de escapar al peor tiempo de sufrimiento que este planeta cansado de la guerra alguna vez haya experimentado!
Potencia nuclear
“[P]orque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá. Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo [con vida]; mas por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados” (Mateo 24:21-22). Note que la abominación está atada a una guerra nuclear tan devastadora que ninguna carne sobreviviría si Cristo no interviene y la detiene.
¿Diría usted que estamos próximos a ese tiempo? Agencias de inteligencia y expertos de defensa dicen que Corea del Norte podría tener ahora el poder de destruir las principales ciudades en Estados Unidos. Y el mundo entero sabe que Irán podría llegar a ser una potencia nuclear extremadamente pronto. ¡Eso significa que dos hombres locos podrían estar listos para atacar a EE UU con armas nucleares!
Es un disparate infantil pensar que alguien, excepto Cristo, pueda detener esta locura nuclear.
¡Con razón Dios instruye a Su pueblo que huya!
Así que toda esta demencia nuclear también es una parte de la señal de la Segunda Venida, ¡y la señal del fin de la era cuando Cristo salvará a la humanidad de exterminarse a sí misma totalmente!
El daño nuclear real no es infligido por estos dos hombres locos—sino principalmente por la abominación desoladora. ¡Hay también otros líderes con mentes inestables y malvadas que tienen poder nuclear!
Esta abominación va a ser la principal fuerza que ponga en peligro la vida de toda persona sobre la Tierra. Pero será demasiado tarde para hacer algo cuando de hecho usted vea la abominación, a menos que ya se haya preparado espiritualmente. Dios quiere que entendamos lo que Daniel y otros profetas enseñaron sobre los eventos que conducen a la abominación, ¡que hace desolación con sus bombas nucleares! Luego, paso a paso, podemos trazar todas las profecías y eventos que apuntan a esa señal hasta que Cristo regrese.
Aunque no sabemos el día o la hora, sabemos cuándo está a las puertas (versículos 36, 33). Dios dice que debemos observar los eventos (versículo 42). Los eventos nos dan el marco de tiempo; los eventos fechan estas profecías. Dios dice que aquéllos que leen esto entiendan, o estarán en problemas porque tendremos que “huir a los montes” (versículo 16). Sea serio en su obediencia a Dios. Dios dice que usted debe tener suficiente fe para cuando vea todo esto, ¡usted corra por su vida!
¿Por qué no están los cristianos de este mundo más preocupados sobre esto hoy? Éstas son las palabras de Cristo. ¡Un verdadero cristiano es uno que sigue a Cristo!
“Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie [quedaría vivo]; más por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados” (versículo 22). La buena noticia es que Dios acortará el periodo de tiempo y nos preservará la vida. Pero si Él no interviniera, nadie quedaría vivo en este planeta. Él permitirá que esto siga un largo camino para que así las personas aprendan que no se pueden gobernar a sí mismos. Los hombres no saben el camino de la paz. Dios si lo sabe; y si usted guarda Su ley de amor, esto le traerá gran gozo y paz a su vida.
Después de la Segunda Guerra Mundial, Winston Churchill escribió: “La humanidad nunca ha estado en esta posición antes. Sin haberse mejorado considerablemente en virtud, ni del gozo de la dirección más sabia, por primera vez ella tiene en sus manos los instrumentos con los que indefectiblemente puede lograr su propia exterminación”. Ahora podemos exterminar a toda la vida humana. ¡Ése es el gran y máximo logro del hombre!
Si ése es nuestro máximo final, ¿no hay algo terriblemente malo con el hombre? No obstante, ¡él aún no se vuelve a Dios!
Esta profecía es obviamente acerca de la guerra nuclear, pero la gente dice, Y qué. ¿Tendrán que experimentarlo antes que ellos digan más que “y qué”? Si no le hacemos caso a alguien como Churchill, ciertamente deberíamos hacerle caso a Cristo. Ninguna de Sus palabras fallará. ▪
Continúa en El Armagedón nuclear está 'a las puertas' (novena parte)