La Trompeta
Edición especial: ¡Él tenía razón! (tercera parte)
Continuación de Edición especial: ¡Él tenía razón! (segunda parte)
Aunque Trompeta cubre muchos eventos mundiales, asuntos sociales, económicos y religiosos en sus ediciones mensuales, hay un mensaje central con un evento clave en desarrollo a nivel mundial, que Trompeta ha seguido continuamente desde su comienzo. Esto es, simplemente, el mismo evento que encabezó la primera edición de La Pura Verdad en febrero de 1934. De hecho, esta es una historia noticiosa que comenzó a desarrollarse en el año 31 a.C. con el ascenso del Imperio Romano.
En una alegoría asociando las siete colinas de Roma con siete gobiernos sucesivos, o resurgimientos del Imperio Romano, el libro de Apocalipsis dice: “Y son siete reyes. Cinco de ellos han caído; uno es, y el otro aún no ha venido; y cuando venga, es necesario que dure breve tiempo” (Apocalipsis 17:10).
A principios de la década de 1930, cuando nació La Pura Verdad, la mayoría permanecía ciega al significado de las palabras de esta profecía. Sin embargo, cuando Herbert Armstrong comenzó a publicar esta extraordinaria revista de noticias, el significado se había vuelto sorprendentemente claro para él.
El Sr. Armstrong sabía que el libro bíblico de Apocalipsis fue dado por su Autor no para esconderlo, sino más bien “para manifestar … cosas que deben suceder pronto” (Apocalipsis 1:1). Así fue como este hombre excepcional, quien en sus últimos años se reunió con reyes, príncipes, primer ministros, presidentes y líderes de naciones de todo el mundo, llegó a ver que los cinco “reyes” caídos mencionados en Apocalipsis 17:10 mostraban que cinco resurrecciones del Imperio Romano bajo la tutela del papado romano ya habían ocurrido para ese tiempo. Estas “resurrecciones” del Imperio Romano estuvieron bajo los liderazgos sucesivos de Justiniano, hecho emperador en el año 554 d.C.; Carlomagno (Carlos el Grande para los alemanes), coronado en el año 800 d.C., Otto el Grande en el año 962 d.C.; Carlos V (comenzando la dinastía de los Habsburgo) en 1530, y Napoleón quien se coronó a sí mismo como emperador en 1804.
Pero la predicción de Apocalipsis 17:10 se refería a una resurrección del Imperio Romano existente al mismo tiempo que la misteriosa visión del libro de Apocalipsis sería comprendida por primera vez: “y uno es …". Así fue que Herbert Armstrong llegó a ver que el dictador Benito Mussolini era ese uno que es, en aquel tiempo, en la década de 1930, antes y durante el desarrollo de la Segunda Guerra Mundial. En uno de sus artículos finales que apareció después de su muerte en la revista La Pura Verdad, él reflexionó lo siguiente: “En 1929 Mussolini arregló un Concordato con el papado. Luego, alrededor de 1935, Mussolini, habiendo unido Etiopía, Eritrea y la Somalia italiana a Italia, proclamó que éste era el restablecimiento del Imperio Romano. Yo mismo anuncié por radio la noticia de esta novena restauración en aquel entonces” (La Pura Verdad, marzo de 1986).
El Sr. Armstrong también se refirió a Mussolini — o el eje Hitler-Mussolini como el “uno” que “es”, en el tiempo de la profecía (La Pura Verdad, octubre de 1962).
Esta débil sexta resurrección, en la secuencia de las siete resurrecciones del Imperio Romano, dentro del contexto de la visión del Apóstol Juan, dejaba una resurrección final por venir: "… y el otro aún no ha venido”.
Ahora, mantenga en mente que el Sr. Armstrong llegó a este entendimiento antes de que comenzaran las hostilidades entre los poderes del Eje y los Aliados Occidentales en 1939.
A continuación cito de una carta que el Sr. Armstrong escribió a los lectores de la revista La Pura Verdad el 24 de julio de 1983: “La primerísima edición de la revista La Pura Verdad apareció en febrero de 1934 — justo hace 50 años faltando alrededor de seis meses. El artículo, que comenzaba en la portada, advirtió sobre la repentina aparición de un ‘Sacro Imperio Romano’ resucitado en Europa — una unión de diez naciones en Europa bajo un gobierno, con una fuerza militar unida. Durante 50 años he estado clamando al mundo las profecías bíblicas acerca de estos próximos ‘Estados Unidos de Europa’ — ¡un nuevo súper poder unido, tal vez más poderoso que la Unión Soviética o Estados Unidos!”
Una y otra vez, Herbert Armstrong y muchos de los escritores que le servían para la revista La Pura Verdad señalaban los eventos informativos que estaban conduciendo al inevitable ascenso de una federación europea fascista, bajo la influencia espiritual del Vaticano, la cual rivalizaría y aun abatiría a Estados Unidos y Gran Bretaña comercial y económicamente, y por último, militarmente. Antes de la Segunda Guerra Mundial, el Sr. Armstrong predijo esto. Durante el ardor de la Batalla de Gran Bretaña, él continuó prediciéndolo. Cuando Alemania cayó derrotada, aplastada en el polvo bajo la embestida del Imperio Británico y las fuerzas de Estados Unidos, aún así proclamó la futura resurrección de Alemania para dominar a una Unión Europea que sería la resurrección final del Sacro Imperio Romano.
Lea los siguientes extractos, tomados textualmente de la revista La Pura Verdad durante sus 52 años bajo el liderazgo de su fundador, Herbert W. Armstrong. Lea — y maravíllese. ¡Maravíllese — y entienda! Esta es profecía viviente — una profecía inquebrantable e inmutable de eventos inevitables ¡que ahora están llegando a un repentino clímax, delante de sus propios ojos!
De entre las cenizas
Menos de diez años después de la Segunda Guerra Mundial, el Sr. Armstrong pudo reforzar sus declaraciones hechas antes de la guerra acerca de un resurgimiento de Alemania para guiar a una Europa unida. “En febrero de 1945 (solo unos pocos meses antes del final de la guerra) el presidente Roosevelt y el primer ministro Churchill anunciaron la política conjunta americano-británica sobre Alemania. Esta fue la solemne política y advertencia para el futuro. Escuche.
“Cita: ‘Es nuestro propósito inflexible destruir el militarismo alemán y el nazismo para asegurar que Alemania nunca más sea capaz de perturbar la paz del mundo. Estamos decididos a desarmar y disolver todas las fuerzas armadas alemanas; terminar para siempre con el Alto Mando alemán que repetidamente ha ideado el resurgimiento del militarismo alemán … ’. Y ahora, unos nueve años después, he aquí el espectáculo de Washington y Londres haciendo todo esfuerzo diplomático posible , respaldado con dólares americanos, para hacer dos cosas: Crear unos Estados Unidos de Europa, y rearmar a Alemania” (La Pura Verdad, noviembre/diciembre de 1954).
Con Europa casi reconstruida (a través de la masiva ayuda del Plan Marshall de Estados Unidos) pero aún desunida, el Sr. Armstrong predijo en la misma edición de La Pura Verdad que, “Alemania inevitablemente emergería como el líder de una Europa unida. Esto requerirá alguna fuerza espiritual unificadora que inspire esta confianza (para remover estos temores) ¡y que esta fuerza espiritual de unión debería surgir del interior de Europa!”
“Toda Europa está realmente lista (sólo esperando al líder que inspire la confianza) un Hitler internacional europeo; y ya está en camino. Ese hombre está por ahí en algún lugar” (Ibíd.).
Estas citas tomadas de la revista La Pura Verdad de 1954 contienen la esencia de una de las más poderosas profecías en la Biblia — una profecía en la que el Sr. Armstrong tuvo suprema confianza de su inevitable cumplimiento.
Cuando el bloqueo de Berlín fue montado por los rusos en un intento por matar de hambre a la población de esta ciudad y obstaculizar sus negocios, La Pura Verdad continuó declarando que Alemania reviviría para guiar al poder a una Europa unida. El Sr. Armstrong continuó advirtiendo sobre la creciente amenaza en el lado occidental de la Cortina de Hierro: “¡Es este Mercado Común Europeo el que está ganando rápidamente la guerra comercial del mundo! Se está realizando de una forma en la que Estados Unidos no se da cuenta. Estados Unidos parece estar dormido ante este peligro” (Ibíd., julio de 1961).
Cuando Kruschev declaró, en 1961, que Rusia tenía el derecho de apoderarse de Berlín Occidental, La Pura Verdad continuó con el mismo poderoso mensaje. “Estados Unidos (y Gran Bretaña) enfrentan una situación irreconciliable. Ellos deben luchar por Berlín o ser intimidados y finalmente conquistados por el sistema soviético … Sin embargo, si ellos luchan por Berlín enfrentan la extinción económica definitiva a manos de la ya poderosa ‘Tercera Fuerza Mundial’: Euromart … ¡los próximos Estados Unidos de Europa!” (Octubre de 1961). ▪
Continúa en Edición especial: ¡Él tenía razón! (cuarta parte)