Votación sobre cese al fuego en Gaza causa caos en el Parlamento británico

La Cámara de los Comunes británica estalló en un caos el miércoles cuando la presidenta Lindsay Hoyle rompió el procedimiento parlamentario durante un debate sobre un cese al fuego en Gaza.

Debate: se suponía que la Cámara iba a votar una moción propuesta por el opositor Partido Nacional Escocés (snp, por sus siglas en inglés) que pedía:

• Un alto al fuego inmediato

• La liberación de todos los rehenes israelíes retenidos por Hamás

• Un “fin al castigo colectivo del pueblo palestino”.

En los días previos a la votación, el líder del Partido Laborista, Keir Starmer, que intenta posicionarse contra el antisemitismo, instó a su partido a no votar a favor de la moción. Pero muchos miembros del Partido Laborista temen amenazas de violencia contra ellos y sus familias si no apoyan algún tipo de cese el fuego en Gaza.

El Partido Laborista propuso una moción alternativa, pidiendo un “inmediato cese al fuego por motivos humanitarios” pero omitiendo el punto sobre el castigo al pueblo palestino.

Los conservadores en el gobierno también propusieron una moción alternativa que dice que se necesita una “pausa humanitaria inmediata” y “avanzar hacia un cese al fuego permanente y sostenible”.

Caos: cuando Hoyle rompió con el procedimiento parlamentario para permitir a los laboristas enmendar la moción antes de que el snp pudiera votarla, los legisladores del snp acusaron a los laboristas de secuestrar su moción. Docenas de conservadores y miembros del partido snp salieron en masa de la Cámara.

'CHAOS IN THE COMMONS' - as Scottish National Party (SNP) and Conservative parties enraged after hours of fierce debate, with walk-out of the two contesting parliamentary groups in video above following Speaker allowing Labour vote on "humanitarian ceasefire vote" in Gaza.… pic.twitter.com/N59P9jKReg

— Rahini (@rahini1207) February 22, 2024

Amenaza: según informes de prensa, el líder laborista Sir Keir Starmer visitó personalmente a Hoyle para pedirle que rompiera las reglas. Con cientos de manifestantes fuera del Parlamento, sus miembros del Parlamento temieron por su seguridad. Permitir la enmienda laborista y bloquear la del snp permitiría al Partido Laborista respaldar la moción y evitar ser atacado por la turba.

Este cambio de política y el caos resultante en el Parlamento muestran hasta qué punto el gobierno está luchando por apaciguar el influjo de personas con opiniones políticas diferentes en su sociedad.

Más información: lea “Londres ha caído”.