Una guerra racial está profetizada

La inmigración es una de las mayores preocupaciones de los estadounidenses en estas próximas elecciones. Sin embargo, la mayoría de la gente no ve el peligro real.

¿Por qué los políticos no protegen las fronteras de Estados Unidos? Muchos conservadores creen que los demócratas están importando votantes. Eso es cierto. Pero el plan va más allá.

También existe un plan para sembrar división, confusión, violencia y terrorismo. Esencialmente, ¡esta gente está trayendo soldados rasos para la guerra racial y la guerra civil!

“¡No se equivoque! ¡No es un asunto ligero para dejarlo pasar casualmente! La guerra racial se acerca”, escribió el difunto Herbert W. Armstrong en La Pura Verdad, de octubre de 1963, basado en las profecías de la Biblia. “Las tensiones raciales, las pasiones y el odio están siendo deliberadamente agitados mediante una planificación organizada. ¡Explotará en una violencia masiva que sorprenderá a la imaginación! Será azotada en un crescendo acelerado hasta que la sangre humana corra como los ríos”.

Estados Unidos vio cómo esa profecía se cumplía hasta cierto punto en la década de 1960. Pero por muy mala que fuera la violencia racial en aquella época, se profetiza que será mucho peor en el futuro. Lo animo a que lea el capítulo 5 de mi folleto Great Again, (Grande otra vez, disponible en inglés). “Hacia dónde se dirigen los disturbios raciales de Estados Unidos”, para conocer estas profecías.

Las tensiones aumentan. Las fronteras abiertas han agravado enormemente este peligro.

Hay un hombre que ha avivado las tensiones raciales y es responsable de las fronteras abiertas de EE UU: el ex presidente Barack Obama.

Como escribí en mi libro Estados Unidos bajo ataque:

El presidente Obama hizo repetidos comentarios públicos sobre temas racialmente cargados, comentarios que aumentaron la desconfianza de la gente en la policía y socavaron la fe en el sistema judicial. Él dijo cosas que eran probadamente falsas pero que le hicieron bien a los radicales racistas. En un momento dado, Obama dijo que el racismo forma parte del adn de Estados Unidos. Eso significa que la nación es irremediablemente racista. ¡Una acusación tan infundada es satánica hasta la médula! Satanás utiliza la raza como arma para dividir a la gente. Dios no considera a ninguna raza superior o inferior a otra; ¡Él hizo todas las razas y tiene un potencial trascendente reservado para todas las personas!

En el EE UU posterior a Obama, los medios dominantes y los demócratas radicales acusan continuamente a los republicanos y al estadounidense común de ser racistas. En casi todos los casos, mienten y saben que mienten. Los radicales fomentanel racismo contra los blancos, enseñando a los estudiantes blancos —incluso a los niños de primaria— a pensar que son inferiores a los negros, los hispanos y cualquier persona de color. Con frecuencia escuchamos comentarios racistas en la televisión y la radio. Un comentarista negro de nbc dijo: “¡Este no es país para jóvenes negros!”. Comentarios tan feos y racistas están llenando el país de odio y división que conducirán a la violencia y a la guerra racial. Estos comentaristas, o bien ignoran lo que hacen, o bien desean una guerra racial. Ciertamente, algunos extremistas lo hacen. La profecía bíblica nos dice que conseguirán una.

En 2021, el Sr. Obama dijo que, mientras fue presidente, se sintió reprimido a la hora de hablar en favor de las víctimas negras. Es una afirmación sorprendente teniendo en cuenta la frecuencia con la que se insertó en temas raciales en nombre de las “víctimas negras”. ¡Lo hizo en cada oportunidad que tuvo!

Este problema está explotando ahora, y se está agravando por la migración masiva. Y hay pruebas de que ésta es precisamente la intención.

A menos que nuestra nación se arrepienta pronto, ¡nuestras ciudades van a arder en llamas! Dios profetizó esto como una maldición para castigar a nuestra nación (Isaías 1:7).

Pocos ven al Sr. Obama detrás de este ataque. Incluso son menos los que ven la dimensión espiritual, pero las pruebas son abrumadoras. Puede leer más sobre ello en este artículo, “Disturbios raciales: tres décadas de advertencia profética”.