La Trompeta
Un líder alemán fuerte es inminente (primera parte)
Alemania es uno de los principales exportadores de armamento militar en todo el mundo, y el tercer más grande exportador de bienes. Su economía domina la Unión Europea. Pero Alemania no tiene un líder fuerte. Muchos críticos han expresado este punto de vista muy a menudo recientemente.
Sin embargo, hay muchas señales en las noticias mundiales de que un líder fuerte está a punto de levantarse en la escena mundial. También, una profecía en Daniel 8 habla de un fiero y poderoso rey que se va a levantar en la escena mundial en Europa, y que impactará al mundo. ¡Ésta es una de las profecías más sorprendentes en la Biblia!
¡Un líder alemán fuerte es inminente! Cuando él llegue al poder, este mundo quedará sorprendido como nunca se ha sorprendido antes.
Aunque si usted mira la visión completa, esto está atado al retorno de Jesucristo a la Tierra. Esto podría ser difícil de creer para algunas personas, ¡pero claramente está profetizado en la Biblia! Esto de hecho es mencionado en cerca de cien profecías bíblicas.
Un nuevo Chamberlain
El 6 de febrero de 2015, los líderes de Alemania y Francia viajaron a Moscú. Ellos habían sido invitados por el presidente ruso Vladímir Putin para discutir la crisis de Ucrania. Los líderes de estas naciones fraguaron algún tipo de acuerdo. Los críticos lo llamaron un terrible acuerdo. Dijeron que éste era tan malo, que ellos compararon a la canciller alemana Angela Merkel con Neville Chamberlain.
Precediendo la Segunda Guerra Mundial en 1938, Neville Chamberlain fue a Múnich para informarle a Adolfo Hitler que Gran Bretaña y Francia había presionado a Checoslovaquia a renunciar a los Sudetes, parte de su país, a la Alemania nazi. Un tratado de paz fue firmado para ese efecto. Winston Churchill lo llamó la “rendición de Múnich” y dijo que éste era un acto deshonroso y vergonzoso. Él les advirtió a los británicos que esto conduciría a la guerra y no a la paz.
La Sra. Merkel no cree que se les deberían dar armas letales a los ucranianos. Ella piensa que eso podría causar que la guerra se expanda aún más. Pero sin ayuda, los ucranianos pueden ofrecer poca o ninguna resistencia a los rusos. Por esto los críticos comenzaron a atacar a la canciller Merkel por el acuerdo que ella hizo con Rusia. Ellos dicen que ella está apaciguando a los rusos, así como Chamberlain apaciguó a Hitler y los alemanes, llevando así a la Segunda Guerra Mundial.
Los europeos orientales molestos expresaron su descontento en Twitter. El ex primer ministro de Polonia Donald Tusk tuiteó que, “Una vez más, los apaciguamientos animan al agresor a actos más grandes de violencia. Es tiempo para intensificar nuestra política basada en hechos fríos y no ilusiones”. El ministro de Asuntos Exteriores de Lituania, Linas Linkevicius, tuiteó: “En 1938 se suponía que ‘Los Sudetes’ apaciguarían al agresor. Nosotros sabemos los resultados. ¿Por qué estos pensamientos surgen en el tiempo de la #Conferencia de Múnich de 2015?”.
En la Conferencia de Seguridad en Múnich pocos días después de que el acuerdo con Rusia se hubiera realizado, el senador estadounidense John McCain hizo la comparación aún más explícita, diciendo: “la historia nos muestra que los dictadores siempre tomarán más si usted se los permite”, dijo él. “Ellos no serán disuadidos de su comportamiento brutal cuando usted viaje a visitarlos a Moscú; así como ciertos líderes viajaron alguna vez a esta ciudad”. Ésta fue una comparación atrevida del tratado sobre Ucrania y aquél hecho con Hitler en 1938.
Cuando Chamberlain regresó de Múnich después de entregar un gran pedazo de Checoslovaquia, él levantó un pedazo de papel y lo ondeó en su derredor, diciendo, “¡Paz en nuestros tiempos!”. El pueblo británico estaba casi histérico de júbilo ante la idea de que ellos tendrían paz.
Y en menos de un año, ellos estaban en guerra. ¡Ese tratado no trajo la paz! ▪
Continúa en Un líder alemán fuerte es inminente (segunda parte)