Texas a la cabeza de 20 Estados que están demandando al gobierno de Biden por el programa de migrantes
El fiscal general de Texas, Ken Paxton, encabeza la lista de 20 Estados que han demandado a la administración Biden por un programa federal que permite que hasta 30.000 migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela soliciten asilo a Estados Unidos cada mes. Joe Biden puso en marcha el programa el 5 de enero como parte de una serie de nuevas medidas de control fronterizo. Sin embargo, en un comunicado de prensa del 24 de enero, la oficina de Paxton argumentó que el programa “crea ilegalmente una vía de facto a la ciudadanía para cientos de miles de extranjeros”.
Otros 19 Estados, en su mayoría conservadores, se unieron a Texas en la demanda presentada ante el Tribunal del Distrito Sur de Texas. Los Estados son Alabama, Alaska, Arkansas, Florida, Idaho, Iowa, Kansas, Kentucky, Luisiana, Misisipi, Misuri, Montana, Nebraska, Ohio, Carolina del Sur, Tennessee, Utah, Virginia Occidental y Wyoming.
Fronteras abiertas: los funcionarios de la administración de Biden están confiados en que tienen la autoridad para implementar este programa, pero Paxton argumenta que la “agenda de fronteras abiertas de Biden ha creado una crisis humanitaria que está incrementando el crimen y la violencia en nuestras calles, abrumando a las comunidades locales y empeorando la crisis de opioides”.
Parece obvio que la administración Biden quiere más ilegales en EE UU ya que le ha entregado a dos organizaciones izquierdistas sin fines de lucro cientos de millones de dólares para ayudar a los inmigrantes ilegales a luchar contra la deportación. Documentos examinados por Fox News Digital muestran que el Centro Acacia para la Justicia y el Instituto Vera de Justicia han recibido casi 400 millones de dólares de la administración de Biden con el fin de mantener a los inmigrantes ilegales en el país.
Agenda oculta: muchos analistas piensan que los cambios demográficos provocados por la inmigración ilegal podrían convertir a Texas en un bastión demócrata para las elecciones presidenciales de 2024. Eso significaría que ningún republicano ganaría unas futuras elecciones presidenciales. Los demócratas podrían transformar a Estados Unidos en un Estado socialista simplemente suprimiendo las leyes de identificación de votantes que exigen que las personas demuestren que son ciudadanos antes de votar. En 2019, Trevor Loudon le dijo a Epoch Times lo siguiente:
Este es un asalto comunista orquestado contra Estados Unidos, para destruir las fronteras de Estados Unidos, para crear confusión en Estados Unidos, para abrumar políticamente al sistema. Ustedes pueden ver lo que 15, 16, 20, 25 millones de nuevos votantes demócratas le harán a este país. Perderán Texas; perderán Florida; perderán Georgia, Arizona y Carolina del Norte. Nunca habrá, jamás, otro presidente republicano o conservador en nuestras vidas. Tendrán un Estado unipartidista en Estados Unidos. Y ese es el plan. Por eso están haciendo esto.
La profecía dice: en Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía, Herbert W. Armstrong demostró que los pueblos anglosajones descienden de las tribus israelitas de Manasés y Efraín. Esto significa que las profecías sobre estas tribus se refieren a Estados Unidos y a la Mancomunidad Británica.
Una de esas profecías se encuentra en Oseas: “Efraín se ha mezclado con los demás pueblos; Efraín fue torta no volteada. Devoraron extraños su fuerza, y él no lo supo; y aun canas le han cubierto, y él no lo supo. Y la soberbia de Israel testificará contra él en su cara; y no se volvieron a [el Eterno] su Dios, ni lo buscaron con todo esto” (Oseas 7:8-10). Oseas se refiere a menudo a las diez tribus del norte de Israel, que se separaron de Judá, como Efraín, la tribu más prominente, y Samaria, la capital. Sin embargo, las profecías de Oseas se dirigieron conjuntamente a Efraín y Manasés cuando el rey Jeroboam ii gobernaba ambas tribus. Esta seria profecía se refiere a las políticas de inmigración negligentes y peligrosas de Estados Unidos y Gran Bretaña.
Obtenga más información: La catástrofe fronteriza de Joe Biden.