¿Qué música escuchan sus hijos?

Cuando usted presiona Play , ¿qué escucha? ¿Y sus hijos?

“Siempre disfruto compartir mi lista de reproducción musical de fin de año con todos ustedes, y este año hemos escuchado muchas canciones estupendas. Estas son algunas de mis favoritas. ¿Hay alguna canción o artista que debería escuchar?”. Este fue un tuit del expresidente de Estados Unidos Barack Obama a finales de 2022, acompañado de una lista de 26 canciones.

La lista de canciones ofrece una instantánea exacta de la música popular actual, muchas de ellas ocupan los primeros puestos de las listas de éxitos o son celebradas por la crítica y los premios de la industria. ¿Las ha escuchado? Esta lista de canciones revela la preferencia de Obama por el rap, el hip-hop, el dance y el pop, cuyas letras, en casi todos los casos, contienen lenguaje soez, están repletas de jerga y son en gran medida ininteligibles, cuando no es que son pura algarabía. Las partes que se pueden entender glorifican el orgullo, la lujuria, el materialismo extravagante, la sexualidad perversa, el consumo de drogas, el odio racial, la violencia, la blasfemia contra Dios y el demonismo. En los videos musicales de estas canciones abundan las fiestas, las drogas, la violencia con armas de fuego, las imágenes sexuales descaradas y la influencia demoníaca.

Aquí tenemos a un hombre de 61 años, nada menos que un expresidente, escuchando y promocionando música interpretada y consumida principalmente por adolescentes y veinteañeros. ¿Por qué? Es bastante extraño. Pero está muy calculado, su objetivo es atraer a los jóvenes y reforzar la desdichada dirección de la cultura juvenil.

¿Está usted realmente consciente de la realidad de que se está librando una guerra por influir en nuestras mentes, especialmente en las de nuestros hijos?

La canción de los necios

“Mejor es la reprensión del sabio que la canción de los necios” (Eclesiastés 7:5). “La canción de los necios” son “las canciones extravagantes, bulliciosas e inmorales que se oyen en las juergas desenfrenadas de los hombres necios”, explica el Lange’s Commentary. Este versículo contrasta el camino que conduce a la vida, escuchando la reprensión de los sabios, con el camino que conduce a la autodestrucción de la mente y el cuerpo, la canción de los necios. ¿A cuál escucha usted?

Esa lista de reproducción de 26 canciones está llena de “la canción de los necios”. Esta canción llena las ondas, se puede oír en el coche, en la tienda, en el restaurante, en el partido y en sus dispositivos.

La canción de los necios proporciona un placer fugaz. Como la comida chatarra y otras lujurias y pecados, su atractivo es instantáneo y fácil. Usted puede ceder fácilmente a su “gancho”, su ritmo dulce, su melodía pegadiza, su voz cautivadora, su letra ingeniosa. Está hecha para atrapar su mente y quedarse ahí. Pero, al igual que la comida chatarra, no sólo no le alimenta, sino que esparce venenos y toxinas.

La mente natural quiere comida chatarra, entretenimiento basura, información basura: la opción atractiva, placentera, estimulante y fácil. No quiere reprimendas, correcciones ni orientación. Especialmente cuando somos jóvenes, queremos música que adormezca la mente y nos haga sentir bien.

Muchos subestimamos lo poderosa que puede llegar a ser la influencia de la música, sobre todo en una mente joven.

El poder del aire

Efesios 2:2 describe a Satanás el diablo como el “príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia”. ¿Hasta qué punto ejerce su influencia maligna en los billones de reproducciones de miles de millones de canciones en millones de listas de reproducción, que fluyen incesantemente por los cables de Internet y las ondas de radio directamente a los auriculares de millones de personas, jóvenes y mayores, durante gran parte de su vida cuando están despiertos?

El diablo no solamente es poderoso, sino que también puede ser muy atractivo. Se presenta como “ángel de luz” (2 Corintios 11:14). Los seres humanos confían en sí mismos para distinguir el bien del mal, pero este “ángel de luz” engaña fácilmente al mundo entero (Apocalipsis 12:9). La única escapatoria es hacer caso a la “reprensión del sabio” y la guía de Uno aún más poderoso que este ser.

Satanás sobresale en el envoltorio que seduce. Ezequiel 28 revela que cuando Dios creó al ángel Lucero, lo dotó de habilidades musicales superiores. Era un músico angelical que servía a Dios con su habilidad. Pero entonces eligió exaltar su voluntad, su idea del bien y del mal por encima de Dios. Su mente se pervirtió. Ejerció su actitud egoísta y obstinada sobre otros ángeles, influyendo y cambiando sus mentes también. ¡Los condujo a la rebelión y a la guerra contra su propio Creador! Se convirtió en el adversario, y Dios cambió su nombre de Lucero a Satanás.

Satanás sigue siendo hábil con la música. Su habilidad no consiste en crear música edificante y hermosa, sino música que, por atractiva y poderosa que sea, es obstinada, rebelde en espíritu y malvada.

Discernir el bien y el mal

La influencia de Satanás se presenta cada vez más en la sociedad actual como descaradamente oscura y demoníaca. Pero también puede ser extraordinariamente engañosa y sutil. Muchas personas pueden reconocer cierta música o artistas como corruptos, pero pasan por alto otras poderosas influencias malignas que fluyen desde sus propios dispositivos directamente a sus mentes y a las mentes de sus hijos.

Usted debe tener “los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal” (Hebreos 5:14). ¿Puede usted distinguirlos, según la definición de Dios?

A los primeros seres humanos se les presentó la misma elección fundamental que debemos hacer usted y yo (vea Génesis 3:1-6). La primera elección fue aceptar la definición de Dios del bien y del mal en lugar de la suya propia. Dios les señaló dos árboles. Uno era el árbol de la vida. ¿Era el otro un árbol retorcido, podrido, feo, repulsivo, con frutos tóxicos, llamado árbol de la muerte? No: la Biblia registra que el árbol del conocimiento del bien y del mal parecía “bueno para comer (…) agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría”. La única distinción entre los dos era que Dios dijo que uno llevaría a la salud, el crecimiento y la vida y el otro llevaría a la destrucción, la tristeza y la muerte. ¿Confiarían ellos en Dios?

No. Adán y Eva confiaron en sus propios sentidos y sus propias mentes para tomar la decisión de poner su voluntad por encima de la de Dios y definir el bien y el mal por sí mismos.

Desde los primeros humanos hasta hoy, hemos construido una sociedad y un mundo sobre la base de decidir el bien y el mal por nosotros mismos. Nuestros primeros padres eligieron pensar de la misma manera que Satanás. Todo se ha derivado de su elección, y de la nuestra. Esto claramente es verdad para nuestra música.

Cuando usted presiona Play, ¿qué elección está haciendo? Cuando su hijo o hija presiona Play, ¿a qué influencia se está abriendo?

Abrirse a lo que suena bien y se siente bien es abrirse a un potente poder espiritual cuya influencia domina el mundo. Sí, será atractivo. Sí, incluso mezclará algo bueno.

¡Usted debe ejercitar sus sentidos! Ayude a sus hijos a ejercitar los suyos. Los jóvenes tienen menos discernimiento que los mayores sobre el bien y el mal y sobre lo peligrosas que pueden ser algunas influencias. Si usted es padre, debe intervenir para ayudarles a desarrollar el discernimiento, para entrenar su juicio y que puedan tomar decisiones correctas cuando papá y mamá estén ausentes.

Y usted mismo debe dar el ejemplo de no escuchar lo que le parezca bien, sino lo que le guíe su Creador y Su Palabra.

Acosándolo a usted, y a sus hijos

Otro líder destacado compartió sus canciones favoritas del año: el ex ministro de Defensa alemán Karl-Theodor zu Guttenberg. Al igual que Barack Obama, es un hombre al que el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, nos ha dicho que observemos. En la profecía se advierte que las elecciones humanas bajo la influencia de Satanás van a conducir a una autodestrucción humana masiva, y dice que observemos a ciertos hombres a quienes Satanás está influenciando e influenciará para causar destrucción espiritual, mental y física a una escala enorme.

¿Cómo piensan estos hombres? ¿Qué música promueven?

Guttenberg elogió 12 álbumes como sus principales opciones para 2022. La mayoría de sus favoritos eran de música pop; muchos eran los mismos que los de la lista de Obama.

Nuevamente surgió el tema del demonismo y del odio a Estados Unidos. Uno de los álbumes favoritos de Guttenberg se llama Lucifer on the Sofa (Lucifer en el sofá). El vocalista, guitarrista y principal compositor de la banda dijo lo siguiente sobre la canción del título del álbum: “El Lucifer en el sofá soy yo. Es lo peor de mí que puede salir en momentos de angustia, estrés o ansiedad. Todo el mundo puede convertirse en la persona que no quiere ser. Y yo me enfrentaba a esa persona en la canción. En realidad, son dos caras de la misma persona”.

Otro de sus favoritos es el de un joven de 24 años, Hayden Silas Anhedönia nacido en una familia bautista del sur. Hayden se declaró homosexual a los 12 años, abandonó la Iglesia a los 16, se convirtió en transexual a los 20 y ahora se hace llamar Ethel Cain. El aclamado álbum Preacher's Daughter (Hija del predicador) mezcla temas de fe destrozada, disfunción familiar, demonios y muerte. Un artículo afirmaba: “Si usted es alguien crítico con Estados Unidos, la religión, su identidad y las personas que parecen moldearle hasta convertirlo en la persona que es hoy, le recomiendo encarecidamente Preacher's Daughter”. En la frente de esta artista hay tatuajes de caracteres hebreos que deletrean los nombres del arcángel Gabriel y de Ashmedai, rey de los demonios.

¡Barack Obama y Karl-Theodor zu Guttenberg le recomiendan que escuche!

Este álbum es un buen ejemplo de por qué usted debe ejercitar el discernimiento. Parte de esta música suena inocua; si oyera a mis hijos escucharla, no lo pensaría dos veces. Pero se trata de un varón que se cree mujer con el nombre de un demonio tatuado en su rostro cantando: “Dios te ama, pero no lo suficiente como para salvarte; así que, nena, buena suerte cuidándote tu misma”. “Jesús siempre puede rechazar a su padre, / pero no puede escapar de la sangre de su madre. / Gritará y tratará de lavarla de sus dedos, / pero nunca escapará de lo que está hecho”. Este álbum cuenta una historia espeluznante que termina con la hija del predicador asesinada por su novio y almacenada en un congelador para ser devorada. La gira se llama “Freezer Bride” (La novia del congelador).

¡Discierna el mal cuando lo oiga!

Mucha música es malvada, pero Satanás no suele presentarse bajo una luz obviamente malvada.

Los Grammy son considerados los premios más prestigiosos de la industria musical en todo el mundo. La ceremonia de entrega de febrero incluyó la actuación de dos hombres, uno que se autodenomina “de género fluido” y vestido como Satanás, y otro transexual, que actuó como una desnudista femenina, con personas que parecían demonios bailando provocativamente mientras enormes luces rojas parpadeaban y destellaban. Fue una muestra flagrante y repugnante de pura maldad. Mucha gente se enfadó, pero una persona replicó diciendo que esta actuación fue compensada cerrando el espectáculo “con una canción de rap de 8 minutos sobre Dios”. En realidad, no era una canción sobre Dios. Esa canción viola repetidamente el mandamiento de Dios de no tomar Su nombre en vano, exulta en vanidad y adoración propia, y está cargada de palabras soeces.

La gente come del árbol del bien y del mal, pensando que es bueno para comer, ¡pero Dios dice que es el árbol de la muerte!

Tan sólo hay que ver el resto de los premios Grammy. Los artistas se ponen zancadillas unos a otros para promover causas lgbtq+. Están promoviendo el consumo de drogas, el racismo y otros pecados. Estos artistas son los que la gente está escuchando en todas partes en este momento. Algunas cosas suenan desagradables, pero otras suenan bien si uno confía en su propio discernimiento.

Sí, discierna las canciones que suenan horribles, pero también discierna esas canciones pop alegres, esas canciones hip-hop, esas canciones country, que están promoviendo el mensaje del diablo. Y ayude a su hijo a hacer lo mismo. Use su autoridad y su amor por su hijo para ayudarle a ejercitar sus sentidos y construir su carácter.

Cómo discernir

¿Cómo puede usted saber qué música debe escuchar? Tenemos un artículo en theTrumpet.com de Ryan Malone, director de actividades musicales del Herbert W. Armstrong College, titulado “Are You Listening to the Right Music? (¿Está escuchando la música correcta?; disponible sólo en inglés)”. En él se analizan tres tipos de música: bellas artes, folclórica y popular. En las tres se puede encontrar música de calidad. La música equivocada también se puede encontrar en los tres; aunque mucha música de bellas artes es maravillosa, alguna está corrompida por la vanidad intelectual o un espíritu equivocado. Usted debe ejercitar sus sentidos y discernir lo bueno de lo malo.

Como se señala en este artículo, Satanás tiende a explotar al máximo la música popular: está diseñada para entretener y atraer a una amplia audiencia. El príncipe de la potestad del aire se destaca en la difusión, carga y transmisión de su mensaje a lo largo y ancho, y tiene más herramientas que nunca para hacer llegar su mensaje a las mentes humanas. Los jóvenes son uno de sus objetivos más vulnerables.

Para lograr sus propósitos, el diablo no necesita que se convierta en un fan acérrimo de la banda más retorcida. Todo lo que él necesita es que usted trate esto a la ligera. Eso es todo. Vuelva a pensar que sus listas de reproducción y las de sus hijos no importan demasiado. Simplemente deje que las canciones de sus altavoces y auriculares sean lo que le apetezca escuchar en ese momento. Solamente trátelo a la ligera. Entonces él podrá ir tras de usted fácilmente.

Dios nos advierte que es peligroso ignorar las maquinaciones de Satanás (2 Corintios 2:11). Usted debe ejercitar sus sentidos con la ayuda de Dios para discernir el bien y el mal.

A continuación, se exponen tres aspectos de la música que escucha su familia que debería evaluar:

1. Las voces:

¿Qué dice la letra? Si el intérprete dice lenguaje obsceno, elimine esa canción. Si habla sandeces, elimínela. Rechace las canciones que hablen de comportamientos riesgosos, relaciones disfuncionales, consumo de drogas, emociones depresivas, desafío a la autoridad y otras formas de rebeldía. Si usted piensa: Eso significa la mayoría de las canciones populares que hay, tiene razón. Evalúe las canciones según la definición de Dios de lo que está bien y lo que está mal, y verá una prueba dinámica de que sí, Satanás es el dios de este mundo y el príncipe de la potestad del aire.

Mucha gente ha dicho: Me gusta la canción, no escucho la letra. Pero estas palabras son poderosas y se alojan en su mente más fácilmente de lo que cree. No cometa el error de pensar que las partes malas no le afectan. ¡Eso es justo lo que Satanás quiere que piense! Preste atención. Evalúe. Discierna. Está a punto de permitir que este mensaje entre en su mente o en la mente de su hijo. Dé el paso de encontrar las letras y leerlas.

2. La actitud:

¿Cuál es el espíritu de la canción? Gran parte de la música actual es amarga y furiosa, o sugestiva y sensual. Nuestras emociones y estado de ánimo se ven afectados por el ambiente y la atmósfera que crea la música a través de su tempo, ritmo y estilo. Estudios demuestran que la música tiene incluso efectos físicos reales sobre los sistemas nervioso, circulatorio e inmunitario. Puede crear el mismo hábito que la comida, las drogas, el juego o el sexo. Muchos jóvenes son adictos: necesitan la música encendida todo el tiempo. Y a su disposición están los dispositivos y servicios que les permiten trasmitir música sin límites a sus mentes. ¿En qué medida contribuye esto a los problemas mentales que tienen muchos de nuestros jóvenes? Usted tiene que ser honesto sobre lo que la música le hace.

Dios quiere levantarle, ayudarle, edificarle, fortalecerle. Quiere que llene su mente de cosas verdaderas, honestas, justas, puras, hermosas, de buena reputación. “Sí hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad” (Filipenses 4:8). Él quiere que tenga una actitud, un espíritu y una vida que mejoren y maduren. ¿Le ayuda a ello la música que escucha? No tiene por qué ser siempre alegre: David tocaba música triste a veces (p. ej., Salmo 49:4), y usted también podría hacerlo. Pero con el espíritu y la actitud adecuados.

3. El contexto:

“El proceso de discernimiento va más allá del sonido de la música”, escribió el Sr. Malone. “¿De qué viene rodeado este sonido? ¿Cuáles son los ideales del artista o del grupo? ¿Qué promueven? ¿Qué normas de vestimenta transmiten? ¿Qué representan los gráficos del álbum? (…) ¿Se muestra el estilo de vida personal del artista? La personalidad de los músicos populares en nuestra sociedad es mucho más notable y persuasiva, ¡y está diseñada para serlo! Esto es especialmente cierto en el caso de las mentes jóvenes que intentan identificarse con un cierto estilo o grupo de compañeros”.

Tomemos como ejemplo a la artista Beyoncé, la persona más premiada en la historia de los Grammy y cuyas canciones son algunas de las más populares. En el Super Bowl de 2016, utilizó su espectáculo del medio tiempo para glorificar al partido marxista de las Panteras Negras. Este año, dedicó su álbum más reciente a “leyendas negras lbgtq+ que influyeron en su trabajo”. ¿No son estas cosas relevantes a la hora de decidir si escuchar o no su música? Lea “Are You Listening to the Right Music?” para conocer más aspectos a tener en cuenta.

He aquí algunas medidas adicionales que puede tomar para ganar la guerra por su mente y la de sus hijos:

Tenga cuidado con los servicios de emisión continua.

Apple Music, Pandora, Spotify y otros servicios tienen enormes bibliotecas musicales. Una vez que usted empieza a escuchar, automáticamente empiezan a recomendarle o elegir canciones basándose no sólo en lo que ha estado escuchando, sino también en la categoría general, lo que es popular y cualquier otro criterio que los ejecutivos de la música decidan. Si usted no discierne activamente cada canción, se encontrará inevitablemente escuchando letras, ritmos y actitudes perversas de intérpretes que promueven ideas y estilos de vida equivocados.

Retire los auriculares.

A los jóvenes especialmente les encanta escuchar música con auriculares. Esto les permite subir el volumen, sumergirse en el sonido, desconectarse de todo y de todos los que les rodean y evitar que los demás sepan qué hay en la lista de reproducción. Los auriculares o audífonos no son intrínsecamente malos, pero hay que entender que, sobre todo en el caso de los niños, su uso implica más peligros que el de los altavoces.

Controle las listas de reproducción de sus hijos.

Usted debe hacerlo. Necesita saber qué escuchan sus hijos. Puede que no les guste enseñarle su música. Algunos incluso tienen listas de reproducción secretas que esconden activamente. Su ignorancia de las influencias en la mente de su hijo da a Satanás una apertura al pensamiento de ellos. Y recuerde, con los servicios de emisión continua [o streaming], hay mucho más disponible para ellos que lo que está en sus listas de reproducción. Esta es otra razón para prohibir los auriculares y una de varias razones convincentes para prohibir los teléfonos inteligentes. Si quiere que su hijo tenga teléfono y música, hay varias opciones sin teléfonos inteligentes que reproducen sólo la música que usted le cargue.

Cree un gusto por la música de calidad.

Le sorprenderá lo que se abre ante usted si empieza a entrenar su gusto musical y el de su familia. “Are You Listening to the Right Music?” recomienda escuchar música clásica y afirma: “Cuando observe cosas que le gustan, pregúntese por qué le gustan. Cuando no le guste algo, reserve su juicio durante un rato y determine, ¿me disgusta porque es inapropiado o porque simplemente es ajeno a mis gustos en este momento? (…) Compre bandas sonoras de películas en las que destaque la orquesta sinfónica. Esta música suele ser más accesible para el oído inexperto que ciertas piezas clásicas. Este género musical ayuda a condicionar el oído a un sonido más sinfónico y, por tanto, hace que la transición a la música ‘clásica’ sea mucho más suave”.

¡La música es uno de los principales talentos de Satanás y una de sus principales herramientas! Él la utiliza poderosamente. Pero usada correctamente, la música es también una fuerza para un gran bien. Use la buena música para invitar la presencia de Dios a su vida.