¿Qué está haciendo Cristo hoy?
Transcripción de La Llave de David
El apóstol Pablo escribió catorce libros del Nuevo Testamento, y creo que el de Hebreos es sin duda su obra maestra. Ese libro dice explícitamente lo que el Cristo vivo está haciendo, ¡ahora mismo en este mismo minuto! Pero, ¿cuántas personas creerían eso realmente? Sin embargo eso es lo que dice y lo habla una y otra vez, y es muy profético, muy profético. Este libro es principalmente para el tiempo del fin, el tiempo en que usted y yo vivimos hoy. Pablo pensó que era para su tiempo, pero sólo por corto tiempo, y luego supo que era para este tiempo final, y que lo que él estaba experimentando en ese momento era sólo un tipo de este tiempo final.
Y note lo que dice en Hebreos 10 verso 25: “No dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca”. Pero ¿qué día? Bueno, obviamente está hablando de la Segunda Venida de Jesucristo, y ahí es donde estamos hoy, justo antes de la Segunda Venida de Jesucristo a la Tierra.
El verso 37 dice, y aquí Pablo apunta explícitamente a la Segunda Venida: “Porque aún un poquito, y el que ha de venir [Jesucristo] vendrá, y no tardará”. Así que pueden ver que esto es principalmente para este tiempo final. Y Pablo escribió este libro alrededor del año 66 d.C. El pueblo de Dios huyó a Pella en el 69 d.C., para que Dios los protegiera del holocausto del 70 d.C., y va a hacer lo mismo por Su pueblo en este tiempo final, porque eso es sólo un tipo de lo que sucede en este tiempo final. Varias Escrituras lo indican en la Biblia.
Sin embargo, el tema de Hebreos es lo que Jesucristo, nuestro gran Sumo Sacerdote está haciendo, ¡ahora mismo en este mismo minuto! ¿Qué está haciendo? Está enfocado AHÍ, y ahí es donde me gustaría enfocarme hoy.
Hebreos es realmente el único libro que Pablo escribió específicamente para los judíos conversos de Judea. Ahora bien, vivían una época muy dura. El emperador Nerón decapitó a Pablo en el 68 d.C., como dos años después que escribiera este libro; le cortaron la cabeza, y eso fue en el período de Pentecostés. Y Josefo dice que “la gente de Judea oyó una voz: ‘Vámonos de aquí. Marchémonos de aquí”, y aparentemente, ese fue el momento en que el pueblo de Dios fue a Pella. Dios los protegió.
Pero solo piensen en lo que ocurrió en el año 70 d.C. Pueden ver por qué Pablo pensó que ESE iba a ser el tiempo cuando Jesucristo regresaría. Pero Josefo dice que muchos murieron de hambre. Hubo canibalismo humano, y 600.000 personas fueron masacradas, y muchos miles más fueron vendidos como esclavos. Pues eso es un tipo de lo que viene sobre nosotros en este tiempo final. Por eso ese libro es tan importante para nosotros y esa profecía tan esencial para nuestra comprensión.
Fíjense en Habacuc 2, versos 3 y 4. Pablo usa esta escritura porque se relaciona con su mensaje. El versículo 3 dice: “Aunque la visión tardará aún por un tiempo, mas se apresura hacia el fin, y no mentirá”. Así que Pablo, como ven, repito, estaba escribiendo sobre el tiempo del fin, aunque no lo entendiera del todo en ese momento, pero poco después sí.
Luego versos 3 y 4 dicen “… aunque (la visión) tardare, espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará. (4) He aquí que aquel cuya alma no es recta, se enorgullece; mas el justo por su fe vivirá”. ¿Cuánta fe tenemos usted y yo en estos versículos? Y Pablo señala aquí, que tenemos que vivir por nuestra fe. Eso es lo que hacen los “justos”, la gente justa, la gente recta.
Luego pasa a hablar en Habacuc 1, versos 6 al 11, sobre el Sacro Imperio Romano que va a entrar en escena y va a causar muchos problemas.
Pero fíjense en lo que dice en Hebreos 6 y verso 5. Quiero centrarme primero en esta parte. Este es un verso interesante aquí en el verso 5. Es Dios hablando a Su pueblo en este tiempo final (un pequeño rebaño) y el verso 4, lo leeré primero: “Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo”, (5) "y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero”, o el mundo venidero. Los poderes de ese siglo.
Ahora, esto es algo que usted y yo necesitamos entender porque Dios está hablando a Sus primicias, aquellos que son llamados antes del Retorno de Cristo y que están haciendo la Obra de Dios. Pero aquí están los elegidos de Dios. Ellos “gustaron (…) los poderes del siglo venidero”. ¿Qué significa eso? Bueno, se les ha dado la visión y ven los poderes del mundo venidero, y donde Dios va a empoderar a estos primeros frutos que están haciendo la Obra de Dios hoy, y podrán compartir el trono de David con Jesucristo mismo, y ¡regirán el mundo! Regirán el mundo entero y después de eso, ¡el universo entero para siempre! Esto es algo difícil de comprender en muchos sentidos. Pero ciertamente debe sacudir nuestras mentes cuando pensamos en eso, y en lo que Dios nos está dando la oportunidad de hacer. ¡Vamos a SER la propia Esposa de Jesucristo, sentada en Su trono con él y gobernando el mundo! Por eso Pablo está explicando todo esto explícitamente aquí, en este momento.
Luego, en los versos 4 al 6 dice que también hemos sido protegidos a través del Espíritu Santo; sólo voy a parafrasearlo, no hay necesidad de leerles exactamente lo que dice en estos versos.
Pero aquí, repito, los poderes del mundo. vemos los poderes del mundo y los poderes que Dios tendrá, que Jesucristo tendrá cuando venga a la Tierra, y dará poder a aquellos que compartan ese trono de David con Él. La recompensa es simplemente impresionante, lo que Dios va a dar a su pueblo para hacer, SI ellos hacen lo que Él dice. Y voy a entrar en eso un poco más adelante.
Todo esto está explicado en mi folleto sobre Hebreos, así que si menciono algo aquí que usted no entiende, pues ciertamente puede verlo y entenderlo solicitando nuestro folleto sobre Hebreos.
Pero aquí en Hebreos 5 el apóstol Pablo está justo en medio de su discusión sobre Melquisedec, una lección muy importante que estaba tratando de enseñar a esta gente. Y éste Melquisedec es el mismo Jesucristo en el Antiguo Testamento, pero ahí todavía no era el Hijo de Dios. No había nacido de la virgen María, y aún no se había convertido en el Hijo de Dios. Pero es el mismo Cristo en el Antiguo Testamento que en el Nuevo Testamento, el mismo Jesucristo, excepto que no se había convertido en el Hijo de Dios.
Hebreos 7 [:4] dice: “Considerad, pues, cuán grande era éste” (Éste, con mayúscula al referirse a Jesucristo), pero, “grande era éste, a quien aún Abraham el patriarca dio diezmos del botín”. O sea, le diezmó a Melquisedec, y uno no diezma a nadie más que a Dios. Se asegura de dárselo a Dios, y aquí estaba el Dios Melquisedec y Abraham le diezmó a Él.
Abraham es realmente responsable de toda la riqueza que Estados Unidos y Gran Bretaña han tenido en este tiempo final, pero poca gente lo entiende.
Jesucristo dijo en Mateo 16 verso 18: ¡Edificaré Mi Iglesia! Bueno, ¿dónde está? “… Edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella”. ¡No morirá!
Ahora, ¿cómo va a construir esa Iglesia? Bueno, ¡Hebreos nos dice cómo Él construye la Iglesia! Y Él lo está haciendo ahora mismo, y lo ha estado haciendo durante casi 2.000 años a la Iglesia como grupo, que comenzó con Jesucristo. Y un gran número de personas están siendo llamadas a la Iglesia de Dios, aunque aún así es un pequeño rebaño.
Pero aquí esto ha estado sucediendo durante casi 2.000 años, y Jesucristo está trabajando con el pueblo de Dios y tratando de hacerles ver algo que algunos de ellos —y muchos de ellos aquí— no vieron. ¡Simplemente no lo vieron! Y Jesucristo, en este mismo minuto, es la Cabeza de esta Iglesia, o la verdadera Iglesia de Dios, dondequiera que esté, y Él está dirigiendo todo lo que hacen. Ahora, ¡esa es simplemente una Escritura abrumadoramente maravillosa cuando uno piensa en lo que Dios nos está diciendo aquí!
[Hebreos 5:11]: “Acerca de esto tenemos mucho que decir, y difícil de explicar, por cuanto os habéis hecho tardos para oír”. Él quiere enseñarles sobre este Sumo Sacerdote Jesucristo y lo que está haciendo hoy, y lo que está haciendo con las primicias. ¡Y dijo que estos oyendo eran demasiado tardos para siquiera entenderlo! Esa es una declaración muy aleccionadora; una Escritura que debemos entender.
Vean lo que dice en el verso 12: “Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido” espiritualmente; es lo que significa, esa clase de alimento. Y aquí tenemos a personas que, según Pablo, ¡ya deberían ser maestros! Él los estaba entrenando para ser maestros en el Mundo de Mañana, el que vamos a ayudar a Cristo a gobernar si hacemos nuestra parte, si aprendemos a enseñar, y aprendemos a enseñarles la justicia de Dios. ¡Eso no se consigue en este mundo hoy! ¡Pero viene en el Mundo de Mañana y viene rápido! Y Dios está alistando a Su pueblo para educar a este mundo y gobernar este mundo y el universo entero, si usted puede creerlo. Está ahí en la Biblia muchas, muchas veces; más de cien profecías se lo dicen; y necesitamos entenderlo muy bien.
El Sr. Armstrong escribió que “Dios no puede comenzar el Reino de Dios hasta que primero capacite a los maestros. [Dios] nos ha llamado a usted y a mí para convertirnos en esos maestros. Por eso somos las primicias. Somos llamados a convertirnos en maestros y gobernantes”, dice aquí también. ¡Y gobernantes!
Hemos sido llamados fuera de temporada. Estamos en esa pequeña primera cosecha, la de primavera. La gran cosecha de otoño está por venir. Sólo hay un pequeño rebaño hoy en este tiempo final, ciertamente.
Ahora, esto es algo que el Sr. Armstrong encontró en su propia Iglesia, y esto es realmente una profecía de lo que ÉL dijo porque es para el tiempo del fin, y le dijo a su Iglesia: “Les digo, hermanos, ustedes no lo entienden”. Les dijo eso en Pentecostés de 1985 y murió seis meses después; de hecho ese fue su último sermón. Ahora, él vio eso, y dijo: “En un tiempo cuando ustedes deberían estar aquí para ser gobernantes y maestros”, y dice: “Por eso somos llamados fuera de temporada. No somos llamados sólo para entrar en el Reino de Dios o para ser salvos. Somos llamados a prepararnos para sentarnos en el trono de David con Cristo para siempre, ¡y gobernar el mundo y el universo! Y enseñar a toda la familia de Dios”. Qué visión tan, ¡tan impresionante es la que Dios nos ha dado! ¡Y se trata de gobernar!
Verán, el mensaje del Sr. Armstrong era exactamente lo que se lee aquí en Hebreos 5 acerca de la gente “[tarda] para oír” y que no podía ni siquiera entender el mensaje de Melquisedec y entender ese gran misterio. Es un gran misterio en este mundo, y necesitamos entenderlo. No tengo tiempo para explicarlo todo ahora en este mensaje, pero todo está explicado en mi libro sobre Hebreos.
Actualmente el 95% del propio pueblo de Dios han apostatado, ha caído y no entendieron a Melquisedec, ni entendieron que Jesucristo se convirtió en el Hijo de Dios y que es nuestro Sumo Sacerdote ahora, y nos está entrenando para ser reyes y sacerdotes. ¡Los reyes y sacerdotes deben ser educados! Y así, eso es lo que Dios está hablando aquí. ¡Él está haciendo eso ahora mismo! Lo está haciendo hoy, en este minuto, ¡en este mismo momento en que les estoy hablando! Y está preparando a los gobernantes mientras este mundo se derrumba.
¡Miren a su alrededor lo que está sucediendo en este mundo! ¿Están esos gobernantes que usted ve allá afuera en el mundo, están calificados para gobernar para Dios? Es realmente lamentable cuando vemos a muchos de los gobernantes en este mundo hoy. ¡Eso es lo que Dios nos está diciendo! Miren, hay una necesidad fundamental de líderes en este mundo, gobernantes que han sido educados por Dios para enseñar a la gente cómo tener paz y alegría y felicidad, y eso es lo que está a punto de suceder, y quiero decir en sólo unos pocos, muy pocos años va a suceder.
Necesitamos entender acerca de Melquisedec que era, que era el propio Jesucristo en el Antiguo Testamento. Son el mismo. Es el mismo Ser, excepto que Cristo aún no se había convertido en el Hijo de Dios. Pero ciertamente era un Dios, el Portavoz de la Familia Dios antes de venir a la Tierra. De Dios el Padre, el Verbo era el Portavoz de la Divinidad.
En Colosenses 2 verso 19, puede leer eso. Pero dice, que el pueblo de Dios en este tiempo final ¡va a perder su Cabeza! Jesucristo es la Cabeza de la Iglesia, ¡no un hombre! Uno diezma a Cristo, ¡no diezma a un hombre! Se asegura de que va a Cristo, y eso requiere algunas pruebas. Tenemos que conocer nuestra Biblia. Se nos tiene que enseñar lo que está en la Biblia. Tenemos una Iglesia del tiempo del fin que ha perdido su Cabeza, y estos son los primeros frutos que deberían estar aprendiendo a ser maestros y gobernantes del mundo, y le han dado la espalda a Dios. ¡Esa es una verdad dolorosa de entender!
Ahora, cuando Pablo habla sobre Melquisedec, él se detiene en su mensaje y cambia a otro mensaje por ese momento y creo que luego vuelve a hablar de ello. Pero tuvo que detenerse y decirle a esa gente lo que estaba espiritualmente mal con ellos. Ahora bien, hay que ser muy fuerte espiritualmente para aceptar algo así, pero Pablo les dijo la verdad. Pero principalmente es para este tiempo final para el 95% del pueblo de Dios, y eso es una profecía en la Biblia que ya se ha cumplido. Y usted necesita entenderlo, y este libro se lo explicará.
De nuevo, el verso 5 de Hebreos 6 dice: “Y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero”, los poderes del mundo venidero.
Y luego, en el versículo 18 del capítulo 6 dice que Él quiere poner ante nosotros una esperanza, una gran esperanza. ¿Tiene usted esperanza en su vida? ¿Tiene usted esperanza en este mundo? Bueno, Dios quiere darnos esperanza, ¡y hay todo tipo de esperanza! ¡Hay abundancia de esperanza si tan sólo creemos en Dios!
¡Jesucristo está a punto de regresar a la Tierra y traerle alegría y felicidad para siempre! ¡Y al universo entero! ¡Eso es lo que viene!
El verso 19 dice: “[Esperanza] la cual tenemos como segura y firme ancla del alma”, como un ancla que sujeta un barco para evitar que se vaya a la deriva. ¡Esa esperanza es nuestra ancla! Tenemos que tener la esperanza o nos alejaremos de Dios. ¡abandonaremos a Dios! Pero si tenemos esa esperanza, ¡haremos todo lo que Dios quiera que hagamos para convertirnos en un Hijo de Dios por toda la eternidad! ¡Un Hijo de Dios!
Pueden seguir leyendo Hebreos y verán que ¡Cristo intercede por su pueblo una y otra vez! ¿Sabe usted lo real que es Cristo? ¿Lo sé yo? ¿Sabemos de verdad lo real que es este Cristo vivo que tenemos como Sumo Sacerdote haciendo todo lo que puede, para ayudarnos a entrar en el Reino de Dios? Él está ahí para nosotros, ayudándonos en todos los sentidos, y ayudando a Dios el Padre a entender exactamente lo que es estar en esta Tierra, y tener que luchar contra el pecado y todo tipo de problemas en este mundo.
Bueno, déjenme continuar y avanzar rápido aquí.
Realmente, si usted no entiende a Melquisedec en el libro de Hebreos, no puede entender completamente a nuestro Sumo Sacerdote, Jesucristo. Es vital que entendamos estas cosas. Por eso Pablo estaba tan molesto de que ni siquiera entendieran la historia de su Sumo Sacerdote, la biografía de Él. No la sabían porque eran muy tardos para oír. Un tiempo terrible, muy terrible para Pablo.
En Hebreos 5:9, Jesucristo es el “… autor” y consumador de nuestra salvación. Vean, esto es sólo el desarrollo de lo que Pablo estaba hablando y dándonos entendimiento sobre Melquisedec.
Pero Él hace intercesión por nosotros porque Su esposa se ha preparado (Apocalipsis 19 verso 7). Tenemos que estar listos para la Segunda Venida de Cristo, ¡y esa gente no estaba lista! ¡Y la mayoría del pueblo de Dios hoy no está listo! Y el 50% de ellos va a ir a la Gran Tribulación y el 50% de ellos va a morir para siempre. Es un final horrible para el 50% de esos tibios que se alejaron de Dios en este tiempo final. Y muchos de ellos se alejaron de Pablo cuando les estaba enseñando, lo cual era sólo un tipo de lo que estamos haciendo.
Y luego en Hebreos 8, versos 1 y 2 habla de: “… tenemos tal sumo sacerdote, el cual se sentó a la diestra del trono de la Majestad en los cielos”. ¡Qué Majestad en los cielos! ¡ahora mismo todo esto está sucediendo! ¿Cómo puede explicar todo eso? ¿Lo entiende? Eso es lo que Dios quiere que hagamos, que entendamos todo esto.
Sólo quiero leerles un poco de esto otra vez porque es un grupo de Escrituras tan poderoso. En Hebreos 5: 10. Dice: “Y fue declarado por Dios sumo sacerdote según el orden de Melquisedec. (11) Acerca de esto tenemos mucho que decir, y difícil de explicar, por cuanto os habéis hecho tardos para oír”. ¡No pueden entenderlo! Ni siquiera puedo enseñarles sobre Melquisedec y el Sumo Sacerdote, Jesucristo, que está ahora mismo haciendo todo lo que puede para traer al pueblo de Dios a la Familia de Dios para regir con Jesucristo y traer este mundo a Dios, y enseñarles.
Quiere que tengamos “alimento sólido”. “(14) Pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez", son maduros, espiritualmente. Tenemos que madurar espiritualmente.
Luego Hebreos 6:5 dice: “gustaron”, gustaron, “de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero”, vean, hoy se nos da el Espíritu Santo de Dios, y tenemos poder para vencer y un poder para conquistar a Satanás, el diablo, y vencer al diablo, y vencer como Cristo venció. El venció a Satanás y nosotros tenemos que hacer lo mismo.