Por qué quiere el Papa que Ucrania enseñe la ‘bandera blanca’

“El más fuerte es el que ve la situación, piensa en la gente y tiene el coraje de la bandera blanca y negocia”, dijo el papa Francisco, según la emisora suiza rsi en una entrevista publicada el 9 de marzo. “Cuando ves que estás derrotado, que las cosas no van bien, tienes que tener el valor de negociar”.

Los comentarios de Francisco causaron conmoción en todo el mundo y se interpretaron como un llamado a Ucrania para que se rindiera. Un portavoz del Vaticano aclaró más tarde que el Papa no había pedido a Ucrania que dejara de luchar, sino que buscara la negociación. Pero incluso eso dejó perplejos a muchos.

Hace unos meses, Ucrania se encontraba en una mejor posición para negociar. Recientemente ha sufrido muchos retrocesos, debilitando su posición. ¿Por qué el Papa no pidió a Rusia que se rindiera hace unos meses? ¿Por qué se dirige ahora a Ucrania?

El 10 de marzo, el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, escribió en las redes sociales: “Nuestra bandera es amarilla y azul. Esta es la bandera por la que vivimos, morimos y prevalecemos. Nunca levantaremos ninguna otra bandera”.

Rusia se alegró de los comentarios del Papa.

“Es bastante comprensible que [el Papa] se pronunciara a favor de las negociaciones”, declaró a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, el 11 de marzo. “Desgraciadamente, tanto las declaraciones del Papa como las reiteradas declaraciones de las otras partes, incluyendo las nuestras, han recibido recientemente rechazos absolutamente duros”.

Indiferente ante las críticas, Francisco dijo el 13 de marzo en la plaza de San Pedro: “Muchos jóvenes, muchos jóvenes van a morir [en la guerra]. Oremos al Señor para que nos dé la gracia de superar esta locura de la guerra, que es siempre una derrota”.

La historia demuestra que apaciguar a Rusia no conduce a la paz, sino a más y mayores guerras. Los comentarios del papa Francisco tienen que verse en un contexto diferente. En “¿De qué lado está el Papa?”, el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, escribió:

En 2013, Rusia se preparó para invadir Ucrania por primera vez. Muchos esperaban que el papa Francisco se manifestara en contra de Vladimir Putin y de la guerra, ya que habla en voz alta sobre las causas que le apasionan, y los católicos ucranianos son mayoritariamente proeuropeos. En cambio, los medios de comunicación se quedaron perplejos ante su silencio.

En 2015, a medida que la tensión sobre Ucrania empeoraba, Putin viajó al Vaticano y se reunió con el Papa. ¿Llegaron estos dos a algún tipo de acuerdo?

Justo antes de la invasión de Ucrania, esta cooperación continuó y el Sr. Flurry escribió: “Rusia tiene la mayor población de cristianos ortodoxos orientales y, según algunos recuentos, es la segunda denominación cristiana más grande. ¿Ha prometido Putin algún tipo de restauración entre la Iglesia ortodoxa rusa y Roma a cambio de que el Papa apoye su guerra en Ucrania?”.

La Biblia profetiza que Rusia ampliará su territorio (Ezequiel 38) y que la Iglesia católica recuperará el control sobre sus iglesias hijas (Isaías 47). Pronto veremos cumplidas estas profecías.

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