Por qué el libro de Santiago no tiene conclusión

Transcripción de La Llave de David

En el Nuevo Testamento, en Santiago, capítulo 5 verso 3, dice que estamos en “los días postreros”, y eso es lo que Santiago pensaba cuando escribía. Y si bajan hasta el verso 8 dice que “la venida del Señor” está cerca, muy cerca. Así que Santiago pensaba que estaba viviendo en los últimos días (justo antes del año 70 d. C.), pero no fue así. Pero ese día sobre del que escribía, es principalmente para el tiempo actual. Su día fue sólo un tipo de lo que Dios nos está dando hoy.

Y luego en el verso 9 dice que “el juez está delante de la puerta”, y ese juez es Jesucristo. Él está parado a la puerta, esperando para entrar, en este tiempo de eventos horribles.

Si siguen en el verso 9, habla de que la Iglesia de Dios está en una gran apostasía o alejándose de Dios; un tiempo horrible descrito por Santiago.

Y si vemos el capítulo 5, en cuatro casos usa el término “he aquí”, que significa percibir realmente, y podría leerse como “¡Mirad!” (con exclamación) “¡Ved!” (con exclamación) “¡He aquí!” (con exclamación). Dios está tratando de llamar nuestra atención porque es importante que todos nosotros lo entendamos.

Si miramos, el primer caso está en el verso 4, “He aquí”. Está hablando de fraude en la casa de Dios. Si vemos el segundo en el verso 7 dice “Mirad”, y está hablando de tiempos difíciles. Y luego de nuevo en el verso 9, es donde dice “el juez está delante de la puerta”. El Juez está delante de la puerta, listo para actuar en este tiempo final para salvar a la humanidad. Este es Jesucristo, y Él está preparado para entrar por usted. Él acorta esos días, a favor de los muy elegidos, en Su Iglesia.

Y si miran en Mateo 24 versos 21 y 22, dice allí en la traducción de Moffat que ninguna carne se salvaría con vida, si Jesucristo no estuviera delante de la puerta listo para entrar y asegurarse de que toda la humanidad no fuera destruida. Estos son los tiempos en los que estamos viviendo hoy, y se oye a la gente hablar de guerra nuclear y de un montón de bombas nucleares que otras naciones están tratando de conseguir y están consiguiendo. Así que aquí en este tiempo Jesucristo está a la puerta.

Pueden leer Mateo 24 verso 33 que dice esencialmente lo mismo, que está “a la puerta”. La venida de Jesucristo está a la puerta. ¡Miren; vean; he aquí! ¡Necesitamos percibir esto! Es muy, muy importante.

La semana pasada les hablé de la tercera epístola de Juan y de cómo no tenía una conclusión o un Amén, y quiero hablarles de otro libro en el que no hay conclusión. No hay Amén, que significa el final del libro. Simplemente no está ahí. ¿Y por qué no? ¿Por qué es tan importante que Dios no concluya este libro de Santiago? Es vital que entendamos eso porque tiene mucho que ver con la revelación de Dios. Quiero que vean y sólo piensen en lo que Jesucristo tenía en mente y tiene en mente hoy, y respecto a Santiago esto es algo en lo que Dios está pensando más que nada, en el libro de Santiago.

Démosle un vistazo a eso. Todos necesitamos entenderlo. Versos 19 y 20, de Santiago 5: “Hermanos, si alguno de entre vosotros se ha extraviado de la verdad, y alguno le hace volver, (20) sepa que el que haga volver al pecador del error de su camino, salvará de muerte un alma, y cubrirá [“cubrirá” es una buena traducción; cubrirá] multitud de pecados”. Cubrirá ¡multitud de pecados! Esto realmente le está hablando de una gran deserción del pueblo de Dios, una gran apostasía.

Y la “multitud de pecados”, quiero leerles lo que dice Lange’s al respecto. Dios está hablando de Su propia familia aquí, y Su mente está en este error crítico que la Iglesia está cometiendo. El Comentario de Lange dice: “La multitud se refiere a la plenitud de una masa entera. La multitud se refiere a la plenitud de una masa entera, o la totalidad tomada como una unidad”. Prácticamente, ¡toda la Iglesia de Dios ha caído! De eso está hablando Él, y Él está diciendo: Bueno, te amo y he demostrado ese amor por ti. Ahora quiero que hagas algo por Mí. Quiero que declares este mensaje porque es muy urgente. Y veremos a medida que avancemos aquí, que el 50% del pueblo de Dios que se apartó va a perder su vida eterna, y el otro 50% va a pasar por la Gran Tribulación (el peor tiempo de sufrimiento que jamás haya habido en la Tierra) si no se arrepienten.

Estamos viviendo en esos tiempos hoy, ¡y Dios quiere que veamos la buena noticia disponible para todos nosotros! Y cómo Él detendría todo esto si tan sólo atendiéramos a lo que Él dice.

¿Dónde está esa apostasía? ¿Cuánto entiende usted al respecto? ¿Cuánto entendemos lo que Dios dice sobre ella? Porque se trata de gente que perderá su salvación. El 50% de ese 95% de la Iglesia que se apartó ¡va a perder su vida eterna! Gente que es conocida y ciertamente conocida por los muy elegidos de Dios hoy que están tristes por lo que está pasando aquí. Estos son los últimos pensamientos en la mente de Dios, al final del libro de Santiago. Este Dios está preocupado por Su Iglesia y Su pueblo. Así que aquí está el 95% de ellos, se están alejando; no obstante, eso deja al 5% del pueblo de Dios que queda para entregar el mensaje de Dios al mundo.

Dice en 2ª de Pedro 3 verso 9 que ¡Él no quiere que nadie perezca! Incluso toda la gente que haya vivido jamás, Él dice: ¡No estoy dispuesto a que ninguno de ellos perezca! Esa es la clase de amor que Dios tiene por Su pueblo. Es un amor muy maravilloso que necesitamos en nuestra propia vida.

Estos converos, como ven, Santiago quería que la gente de su tiempo ayudara a traer de vuelta a los que estaban desertando. Fue solo un tipo de este tiempo final, pero es aun peor en este tiempo actual. Y Dios dice: Ahora, quiero que entiendas esto, que de lo que Santiago está hablando es sólo un tipo. ¡Y que esto es para el tiempo del fin, ahora mismo! Los días postreros (Santiago 5:3). Y hay dos o tres versos más que dicen esencialmente lo mismo.

¡Así que entregar este mensaje es crítico para Dios! Él quiere que Su pueblo (el último pensamiento de ese libro), Él quiere que ellos entiendan (ese 5%), que necesitan difundir este mensaje allá afuera, para traer a aquellos otros de regreso. Esto se refiere a casi toda la Iglesia de Dios; y está sucediendo ahora mismo. Ya estamos casi al final de todo lo ocurrido. Muchas cosas están sucediendo. No hay Amén, no hay conclusión.

¿Qué va a hacer el pequeño rebaño? ¿Qué vamos a hacer nosotros? ¿Qué va a hacer la gente de los muy elegidos? (si estamos en esa categoría). ¿Qué vamos a hacer? ¿Vamos a tener el amor que Dios tiene? Y Él está construyendo ese amor en todos nosotros, si Se lo permitimos, y Él quiere que extendamos la mano y mostremos que tenemos ese amor, haciendo todo lo que podamos para traer a esas personas de vuelta a Dios. Y creo que ayudamos a que regresen de una manera muy poderosa, al 50% de ellos, porque ¿Cómo podrían ellos saber siquiera cómo arrepentirse, si no tuvieran el mensaje de Dios ante a ellos? Donde, por supuesto, en este momento son tibios y no entienden mucho en absoluto. Eso es lo que dice la Biblia.

Dios nos ama. Él quiere que sepamos cuánto nos ama. Esta es Su propia familia y ¡no quiere que ninguno de ellos perezca! Incluso en una familia física, uno podría entender eso. Ningún padre amoroso va a desear perder a ninguno de sus hijos, en absoluto.

Pero Santiago habla en Santiago 2 que si uno tiene fe con obras, ¡su fe se hace viva! Si están haciendo algo, si están difundiendo el mensaje de Dios, si están haciendo Su Obra, ¡entonces su fe es una fe viva! ¡Y hace que Dios cobre vida! ¡Que Satanás cobre vida! ¡Que la Biblia cobre vida! Y eso es lo que todos necesitamos muchísimo.

Veamos Zacarías 3 verso 8. La misma profecía está aquí en el Antiguo Testamento. Zacarías 3:8 dice: “Escucha pues, ahora, Josué sumo sacerdote, tú y tus amigos que se sientan delante de ti, porque son varones simbólicos. He aquí, yo traigo a mi siervo el renuevo”. Cuando toda esta gente se está alejando, Josué y sus compañeros, no los compañeros de Jesucristo, sino sus compañeros. Ellos lo están siguiendo. ¡Están siguiendo a un hombre! Y somos malditos si seguimos a un hombre, ¡y eso incluye a cualquier hombre! Y podrían ser sus pastores (y no sus compañeros), y ellos pertenecen a Josué; ese es el problema. Pero los compañeros de Josué (si miran el hebreo), ¡son hombres que son una señal! Estos hombres que están apostatando, ¡estas personas desertando son una señal de que el Juez está a la puerta! ¡El Renuevo está a punto de llegar! ¡Ese es Jesucristo! – ¡El regreso de Cristo está muy cerca!

El Comentario Soncino dice: “Porque son hombres que son una señal”. Eso es exactamente lo que significa. ¿Lo ven? ¡Necesitamos estar muy conmovidos por eso!

Volvamos un poco al principio de esta historia. Santiago 1 verso 1 dice así: “Santiago, siervo de Dios y del Señor Jesucristo, a las doce tribus que están en la dispersión: Salud”, les dice. Y las “doce tribus” (si repasan el contexto) pueden ver que está hablando de Su propia Iglesia; está hablando de Israel espiritual, que está disperso por todas partes, debido a lo que le sucedió en este tiempo final a la propia Iglesia de Dios, ¡a la Iglesia espiritual! Y Dios está muy preocupado por eso de forma muy poderosa. Después de todo, esta es Su familia, ¡la que Él está creando!

El comentario de Lange dice: “Santiago 1:1 es indicativo de una reconstrucción de la Iglesia”. Algunos de los comentarios ven eso. Este es el Israel espiritual del que Dios está hablando, no el Israel físico, al menos principalmente. “Este comentarista puede ver que hay algo mal aquí, algo que necesita reconstruirse. Santiago fue parte de esa reconstrucción, y también lo son Dios y los muy elegidos de hoy”. Es una reconstrucción muy importante.

¿Qué le ocurrió a Santiago? Pues, fue martirizado en el año 62 d. C. Este es el hermano de Jesucristo, y la tradición dice que fue arrojado del templo y asesinado porque dio este mensaje, y esa es una historia muy triste sobre esa familia. Ahora bien, Santiago no se convirtió sino hasta después que su hermano había sido crucificado; estoy seguro que él no estaba orgulloso de eso. Pero una vez que se entregó a Dios, él fue un obrero poderoso para Dios. Pero aquí, dos hermanos de una familia fueron martirizados, y esa es una parte crítica de la historia.

Se ve que muchos del pueblo de Dios se estaban alejando. Pueden leer Gálatas 1 verso 6 y les dirá eso; que se estaban apartando en sólo unos pocos años después que recibieron esa verdad; un poco más de 20 años, en lo que recuerdo.

¿Pero qué vamos a poder hacer nosotros al respecto? Uno ve del tiempo de Santiago en esa era del primer siglo, que ellos entregaron el mensaje de Dios alrededor del mundo conocido en ese tiempo, y que no fue entregado de nuevo hasta este mero tiempo final; y hay un tipo de Elías en este tiempo final. Algún hombre llevó el mensaje alrededor del mundo en este tiempo final (Mateo 24 y verso 14; Mateo 17 versos 10 y 11). ¡Él predicó el Evangelio por todo el mundo y luego restauró todas las cosas! Ahora, tenemos que saber quién fue él si vamos a entender todas las cosas. ¿Quién fue ese? Ya se fue. Malaquías 4 versos 5 y 6 es sobre él uniendo a la familia, y especialmente a la familia en la Iglesia de Dios. Es una familia lo que nos preocupa.

Y luego, en Malaquías 3 versos 1 y 2, dice que es un mensajero de Dios. Es un mensajero que preparó el camino para Jesucristo en este tiempo final. Y ahora, ¡Cristo está a la puerta, listo para actuar! ¡Está así de cerca! Esa es la buena noticia en este mundo, se los aseguro.

Noten Santiago 4 verso 13; sólo parafrasearé algo de esto. Santiago está diciendo aquí en los versos 13 y 14, está diciendo: Bueno, ¿qué es tu vida? Es como un vapor que aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece. ¡Es como un vapor! ¡Es como la humedad en la niebla o el vapor de una olla! ¡Es sólo un vapor y luego desaparece! La vida simplemente pasa tan rápido, y necesitamos entender eso y realmente, trabajar con urgencia para hacer la Obra de Dios. ¡Y entonces sabemos que vamos a vivir eternamente y por siempre! ¡Esa es una visión muy maravillosa para tener en nuestra vida! Y por eso necesitamos actuar ahora; eso es bastante obvio. Pero si realmente sabemos mucho de esto, necesitamos tomar accion, ¡y hacerlo rápidamente!

Si van a Santiago 5 verso 5, dice que se trata del “día de matanza”. Se trata de un tiempo terrible en la Tierra sobre el que Dios nos está advirtiendo para que podamos evitarlo, si queremos. Pero ¿dónde están los indicios de que eso va a suceder? Debería suceder.

El verso 6 de Santiago 5, dice: “Habéis condenado y dado muerte al justo [uno justo], y él no os hace resistencia”. Ese “dado muerte” podría ser espiritual y físico, en realidad. Pero ciertamente sabemos que aquí el enfoque es espiritual.

Pero Dios está hablando de ese tipo de Elías, el del tiempo del fin que acabo de mencionarles. La Versión Estándar Revisada traduce este verso: “Has condenado, has matado al justo” singular, “él [ese justo] no hace resistencia”. La Biblia Anchor dice: “Has asesinado al justo”. Así que hay algunas afirmaciones bastante fuertes ahí. Pero este hombre hizo mucho trabajo para Dios, y debemos saberlo y entenderlo si alguna vez vamos a estar cerca de Dios y saber lo que Él está haciendo. Si conocemos a Dios, vamos a entender los grandes eventos como este. Esto es crucial para nuestra vida espiritual. ¿Cuánta gente entiende realmente de lo que Santiago está hablando?

Hace poco este Evangelio se volvió a predicar en todo el mundo (Mateo 24 verso 14). Y no había sido predicado al mundo desde la primera era de la Iglesia de Dios, en aquel primer siglo.

Pero miren, necesitamos ver esto, necesitamos entenderlo, necesitamos entender dónde está. Este es el hermano de Jesucristo, y ciertamente fue un hombre convertido y poderoso, una vez que se convirtió.

Santiago 5 verso 7 habla de recibir “la lluvia temprana y la tardía”. Bien, esa lluvia temprana era el tipo de Elías, pero él ya murió. Ya se fue. Y ahora hay otra Era que tiene que entregar este mensaje a este mundo; esa es la lluvia tardía, espiritualmente, en este tiempo final. Dos eras de la Iglesia de Dios, aquí en este tiempo final. Así que hoy los muy elegidos de Dios tienen ese trabajo.

Noten lo que dice en el verso 7 de Santiago 5: “Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia temprana y la tardía”. Esa es la revelación de Dios que se derrama sobre los líderes de Dios para tenerla en este tiempo final. Y habrá tiempos difíciles.

Noten el verso 10: “Hermanos míos, tomad como ejemplo de aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en nombre del Señor”. Esto realmente es a veces tiempos difíciles, de ponerse de pie y representar a Dios y decirle a la gente que el Juez, Jesucristo, ¡está de pie a la puerta! ¡Así de cerca está la Segunda Venida de Jesucristo! Ahora, ¿qué podría ser más emocionante que eso? ¿Qué podría ser más emocionante para nosotros que eso? Hay mucho que necesitamos entender aquí.

Déjenme leerles Santiago 5 verso 20 otra vez. Sólo quiero enfatizar esto, cierta parte, como lo hice antes porque es tan importante, y aquí es donde la mente de Dios está, cuando se trata del libro de Santiago. Aquí es donde el pensamiento de Dios está. Esta es Su familia y Él los ama, y Jesucristo murió por ellos, y Su sangre cubrió estos muchos pecados. Esto es lo más básico que se puede encontrar en la Biblia. Sin embargo, Santiago 5:20, dice lo siguiente: “(19) Hermanos, si alguno de vosotros se ha extraviado de la verdad, y alguno le hace volver, (20) sepa que el que haga volver al pecador del error de su camino, salvará de muerte un alma, y cubrirá multitud de pecados” [dice aquí] ¡Una multitud de pecados! ¡Casi toda la Iglesia de Dios en este tiempo final! ¡Esa es la mayor crisis en este tiempo final! Pueden ver por qué la mente de Dios está en ello. Miles de Su propia Familia están a punto de perder sus vidas eternas, y miles más están a punto de sufrir con el mundo si no despiertan, y si el mundo no despierta. ¿Están despertando? Bueno, creo que usted sabe que no, pero esto cubre una multitud de pecados, la propia sangre de Jesucristo ha hecho eso.

Así que Dios está diciendo: Mira, sabes que te amo. Ahora quiero que me ames también, ¡y que lleves este mensaje al mundo! ¡Es el mensaje más emocionante y maravilloso que jamás se pudiera escuchar! Jesucristo está ante la puerta, y Él está juzgando. Él va a juzgar a Su pueblo y eso es bastante malo aquí, en cierto modo.