Nuestra relación especial con Israel
Transcripción de La Llave de David
Brad Macdonald:
En este programa vamos a oír el discurso del Sr. Gerald Flurry de la inauguración del Instituto Armstrong de Arqueología Bíblica el 4 de septiembre. Pero primero, quisiéramos contarles un poco sobre nuestro nuevo Instituto.
El Instituto Armstrong de Arqueología Bíblica es una organización educativa y científica con sede en Jerusalén, Israel. La misión del Instituto es exhibir la arqueología bíblica de Israel. Como saben, Israel (especialmente Jerusalén) es la tierra de la Biblia, el hogar de figuras épicas como David y Salomón, y los grandes sacerdotes y profetas, y el propio Mesías. En todo Israel, décadas de excavaciones arqueológicas han descubierto muchos sitios y artefactos bíblicos, mucho más de lo que la mayoría de la gente probablemente sabe. Estos descubrimientos asombrosos apoyan el relato bíblico, ¡y le dan vida a la Biblia! En nuestro sitio web, armstronginstitute.org, publicamos artículos y mapas, fotos e ilustraciones sobre la arqueología bíblica en la historia. También pueden inscribirse para recibir reportes por correo electrónico, o escuchar nuestro podcast semanal sobre arqueología. También publicamos [en inglés] esta revista impresa de 32 páginas a todo color nombrada: Let the Stones Speak. También damos excursiones a la antigua Jerusalén. Así que, si usted planea ir a Israel y quiere ver las antiguas casas de David y Salomón, inscríbanse en el sitio web para una visita.
Por último, el Instituto también patrocina excavaciones arqueológicas en Jerusalén. Durante muchos años, excavando junto a la Dra. Eilat Mazar le ayudamos a descubrir algunos hallazgos asombrosos. Hoy excavamos con algunos de los colegas de la Dra. Mazar de la Universidad Hebrea.
Creemos que nuestro nuevo Instituto, situado a pocos cientos de metros de las residencias del presidente y el primer ministro de Israel, va a ayudarnos a ampliar nuestro trabajo arqueológico en Jerusalén. Muchos de nuestros amigos en Israel se unieron a nosotros para la inauguración del Instituto. Incluyendo a la familia de la Dra. Mazar, así como funcionarios y arqueólogos de la Universidad Hebrea, entre ellos el Profesor Yosef Garfinkel y el Profesor Uzi Leibner. También nos acompañó la periodista Melanie Phillips, así como funcionarios de la Ciudad de David y de la Autoridad de Antigüedades de Israel.
El Instituto Armstrong de Arqueología Bíblica lleva el nombre de Herbert W. Armstrong, un educador humanitario y ministro del siglo xx. El Sr. Armstrong viajó por todo el mundo, visitando a muchos líderes mundiales como embajador no oficial de la paz mundial. Pero Jerusalén fue siempre el mayor cariño del Sr. Armstrong, y él hizo un trabajo poderoso en Israel. Cuando Herbert Armstrong murió en 1986, Gerald Flurry recogió su manto, y hoy el Sr. Flurry continúa el trabajo y el legado del Sr. Armstrong en Jerusalén, un legado que esperamos que siga creciendo mediante los esfuerzos del Instituto Armstrong de Arqueología Bíblica.
Gerald Flurry:
Este es ciertamente un día muy especial. Y estamos felices de tenerlos a todos con nosotros.
Quería tomar un ángulo un poco diferente al de los otros oradores para contarles un poco de nuestra historia con el Sr. Armstrong y también con los líderes israelíes. En esa década, él conoció a todos los líderes de Israel, hasta donde puedo recordar. Y él, por supuesto, fue el fundador del Ambassador College.
Todo comenzó con el Dr. Benjamin Mazar poniendo en marcha esta excavación, la más importante jamás realizada en Jerusalén, y eso es algo muy impresionante. Y entonces, en diciembre de 1968, la Universidad Hebrea, la Autoridad de Antigüedades y el Sr. Armstrong hicieron un acuerdo de financiamiento de 50-50 e iniciaron esta magnífica excavación, que todavía asombra a mucha gente. El Dr. Mazar había sido presidente de la Universidad Hebrea por ocho años. A medida que nos adentramos en esto, descubrimos que hay bastante controversia en la arqueología, al igual que en otras profesiones.
Pero quiero mostrarles algo que creo que es realmente inusual, y es la relación con los líderes israelíes y Herbert W. Armstrong. Creo que es una historia que he estudiado más profundamente y, es una historia que realmente creo que vale la pena recordar, y tiene lecciones tremendas para nosotros. Por supuesto, todos tenemos diferentes ideas al respecto. Pero aun así, en este sentido, es nuestra historia, desde cualquier punto de vista. Por lo tanto, quiero hablar sobre la relación entre los líderes israelíes y el Sr. Armstrong.
Sólo voy a presentar rápidamente algunas imágenes. Aquí es donde comenzó todo y pueden ver al Dr. Mazar y al Sr. Armstrong conversando.
En la segunda está el Dr. Mazar en una cena de honor por parte del embajador japonés en Israel (en 1974). Los dos hombres mantuvieron una estrecha amistad durante muchos años.
Y en la tercera; esta es con el alcalde Teddy Kollek, tomados del brazo, una costumbre judía entre amigos cercanos.
Y después, la Primera Ministra Golda Meir; el Sr. Armstrong le regaló un hermoso cristal de Steuben allí en la oficina del Knesset. Y él tenía esto que decir sobre ella. Yo quería mencionar esto. Dijo: “Sin disculparme con nadie, tengo que atribuirle a esta mujer tan común y a la vez tan poco común, humanamente, la cualidad de la grandeza que muy pocos poseen”. Y luego dijo: “Enfáticamente, no es adulación. Yo nunca adulo”. Y eso es lo que sentía por aquella gran líder.
El siguiente es el primer ministro Yitzhak Rabin. Más adelante hablaré un poco más de él.
Y este último es Menachem Begin abrazando al Sr. Armstrong. Y él (en esa ocasión) había regresado de una reunión en Tel Aviv que él detuvo (la reunión) cuando se enteró de que el Sr. Armstrong estaba en la ciudad, y subió a recibirlo, y le dio un gran abrazo de oso. Y entonces el Sr. Armstrong dijo: “Bueno, no deberías haber dejado tu reunión sólo para verme a mí”. Y él dijo: “Sr. Armstrong, me habría levantado a las dos de la mañana para reunirme con usted”.
Así que, aquí tenemos una historia interesante para mí, y más estudié este tema en particular, y traté de aclararlo tanto como pude en mi mente. El Sr. Armstrong visitó Jerusalén 50 veces en cuatro años, para darles una idea de cuánto amaba a Jerusalén.
Y creo que también todos los líderes israelíes con los que trabajó amaban Jerusalén y por eso creo que tenían una armonía inusual. Al indagar, empecé a tratar de estudiar las pláticas entre ellos principalmente. Eso no salía al público, al menos no en ese momento. Y creo que encontrarán sorprendente lo que se decían y de lo que hablaban.
Esto me parece muy interesante, y espero que el resto de ustedes también. Es algo que creo que mucha gente debería saber y creo que no hay casi nadie que realmente lo entienda y que realmente haya reunido estos temas.
Cuando el Sr. Armstrong estaba aquí, él se refería a la Biblia. Nunca se refirió a otra Biblia, sino a la Biblia hebrea. Estas discusiones comenzaron, digamos, sólo entre estos líderes, pero luego en 1974, alguien las publicó, y ese fue el Dr. Mazar. Él quería que la gente supiera de qué estaban hablando, y en qué creían. Y ellos compartían una cierta fe que, creo, puede ser muy útil, especialmente en una época como esta.
Pero esto es lo que dijo el Sr. Armstrong. Dijo: “El Ambassador College acaba de recibir el gran honor y la responsabilidad de formar parte de esta planificación arqueológica aquí en Israel”. Y dice: “No sólo ES un gran honor, es un gran honor para nosotros formar parte de esto”, y ES, en nuestra opinión, un proyecto arqueológico espectacular en el que hemos estado involucrados. El Sr. Armstrong continuó hablando de esta responsabilidad, y creo que en un sentido, este gran honor y responsabilidad, —especialmente la responsabilidad— tiene mucho que ver con esta Institución hoy. Creo que gran parte de ello es este Instituto, porque sentimos que tenemos la responsabilidad de tratar de sustentar la arqueología bíblica, y realmente, en algunos aspectos, no es tan exitoso como debería serlo, según lo vemos.
Así que hoy quiero darles algunas citas, unas pocas, de estos hombres, como dije, y era principalmente sólo entre ellos en ese entonces, y vean lo que ustedes opinan sobre lo que dijeron. Ahora, no estoy tratando de predicarles. Sólo estoy tratando de contarles algo de historia. Esta es nuestra historia, y también la de muchos otros por aquí hoy.
El Sr. Teddy Kollek le presentó al Sr. Armstrong una escultura de plata y oro de David derrotando a Goliat. Y le dijo al Sr. Armstrong: “Toda tu vida has combatido falsedades gigantescas”. Y le dijo: “Y te consideras descendiente de David, y con mucha razón. Entonces aquí, en la ciudad de David, nos gustaría obsequiarte esta escultura simbólica”. Y esto es lo que respondió el Sr. Armstrong: “¡Jerusalén estaba destinada a convertirse en la ciudad más grandiosa del mundo! Y de hecho, ¡de todo el universo! Esta ciudad va a ser algún día la capital del universo porque esta ciudad va a existir para siempre”.
Repito, sólo estoy dando a conocer lo que estaban hablando. Esto no era público en ese momento, para nada. ¡Pero es una declaración fuerte! Y lo que me sorprende al hablar de esto es que ellos estaban muy de acuerdo, o al menos no había reacciones negativas a lo que el Sr. Armstrong decía.
Estos hombres tenían realmente una armonía fascinante, pienso, porque no es usual tomar y juntar a un grupo así, y que estén tan, digamos, mutuamente en sincronía, creo que puedo decirlo, como lo estaban ellos.
Aquí está el primer ministro Perez, que dijo, hablando del rey de Jordania: “Bueno, él realmente quiere la paz, pero tiene problemas internos”, y estaban hablando de eso. Y el Sr. Armstrong le dijo (esto era al primer ministro Pérez), el Sr. Armstrong le respondió: “Aunque se avecinan más problemas, la paz mundial acabará llegando, pero no vendrá fácilmente”.
El Sr. Armstrong estaba haciendo estos comentarios a los principales líderes de Israel. Y luego veremos conforme avanzamos, que ellos realmente se estimaban y tenían cierta fe en lo que hablaban.
En noviembre de 1974 en un banquete allá en Tel Aviv, se hizo un homenaje al Sr. Armstrong. Por fin, se hacía público, pero ¿por qué se publicó? Y eso también es fascinante. El Dr. Mazar, quería que esto se hiciera público y allí había funcionarios, parlamentarios, embajadores, diplomáticos y periodistas nacionales. Ellos escucharon del Dr. Mazar, y esto es lo que les dijo. Esto es lo que ÉL dijo y de ninguna manera fue impulsado por el Sr. Armstrong a hacerlo.
Esto es lo que dijo el Dr. Mazar e incluso utilizó una escritura, simplemente parafraseándola, pero SOBRE TODO él tiene una fe firme, como creo que estos líderes la tenían, en la profecía de Isaías, al parafrasear Isaías 2, versos 2 y 3, y esto es lo que dice, lo voy a parafrasear:
“Y sucederá que en los últimos días, la montaña de la casa del Señor será establecida en la cima de las montañas
y será exaltada sobre las colinas”.
Y luego continúa diciendo:
“Todas las naciones acudirán a ella”. ¡todas las naciones! Eso está en la Biblia que creo que la mayoría de ustedes tiene. Y piensen en esto, lo que está diciendo.
Esto es de lo que el Sr. Armstrong habló, y lo está parafraseando y, de alguna manera, quiere hacerlo público. Ahora ustedes tendrán que analizar sus propios argumentos al respecto. Pero continúa diciendo: “Muchos subirán y dirán, subamos al monte del Eterno”. y él “nos enseñará, el Dios de Jacob, y nos enseñará Sus caminos. Y caminaremos por sus sendas, porque de Sión saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra del Eterno”.
El Sr. Armstrong, y estos hombres estaban pensando más allá, digamos, de sólo arqueología bíblica, pero estaban creyendo en ciertas profecías, y esta no es una profecía única en la Biblia. Encontrarán probablemente unas 20 veces esa misma profecía de diversas maneras.
Pero aquí dice que todas estas naciones vienen a ser instruidas en Jerusalén y eso va a traer la paz a este mundo. Ahora, eso está en Isaías. Y creo que todos ustedes probablemente están familiarizados con eso.
Y él dijo: “El Sr. Armstrong tiene una cierta fe”, pero ellos también. Ellos también la tenían. Pero creo que pueden imaginar, digamos, que si algunos creen en Isaías 2, versos 2 y 3, van a estar motivados a tener cierta esperanza en su vida.
Y lo saco a relucir, porque esta es nuestra historia. Y estos hombres, creo, tuvieron una esperanza especial en sus vidas, porque el Dr. Mazar estaba tratando de hacer llegar esto a todos, y no estoy diciendo que nadie deba creer nada. Sólo digo que esto ES una parte de la Biblia que mucha gente cree y se alegran de oír algo así, yo creo.
Pero la parte clave de esto pensé, es, pues, tener aquí al Sr. Armstrong tomando toda esta arqueología y conectándola con Isaías 2, versos 2 y 3. Obviamente, él estaba interesado en algo más que la arqueología bíblica, pero no llevó esto al público por sí mismo. El Dr. Mazar lo hizo. ¿Por qué lo hizo? Bueno, tal vez usted y yo tengamos que responder a eso individualmente. Pero él sí lo hizo público y pensó por su cuenta, y ciertamente junto con algunos de esos otros líderes (bastantes de ellos, creo); ellos querían que este mensaje llegara al pueblo de Israel. Al fin y al cabo, es tomado de la Biblia, la Biblia hebrea.
Pero él continúa diciendo, en esta declaración pública: “El Sr. Armstrong ama y admira a Jerusalén, y cree de todo corazón en el futuro de Israel, y en la ciudad santa. Y para él, Jerusalén, la Jerusalén unificada, no es sólo la metrópolis de Israel y el centro espiritual de las religiones monoteístas, sino también el símbolo de un gran pasado y de la esperanza”, la esperanza, “de un futuro mejor para la humanidad”.
Eso me conmovió porque ustedes ven los problemas del mundo que yo veo. Todos los vemos. Pero no se ve, en mi opinión, mucha esperanza; ¿y qué vamos a hacer sin esperanza? No creo que vayamos a hacer quizá las cosas positivas que deberíamos. En algún lugar necesitamos encontrar esperanza y creo que la mayoría de estos hombres, estos líderes de Israel en ese tiempo, creían lo que el Sr. Armstrong estaba diciendo y reaccionaban a ello de forma muy positiva; y la mayoría de las veces. Pero, repito, no conozco todos los detalles de esto, pero para mí, ellos veían a Jerusalén como una ciudad de esperanza.
Esto es algo que me pareció interesante, porque es una parte de la historia y algunas cosas ni yo mismo las entendía, pero todo está ahí y si lo ponen todo junto, bueno, siento que si la gente no tuviera eso, digamos, si no conocieran toda la historia, podrían empezar a pensar… cuando sólo tienen una pequeña parte de la información podrían tender a malinterpretarla. Así que creo que puede ser ciertamente útil para ciertas personas, y creo que es bueno que todos pensemos en ello. Pero ustedes tendrán que decidirlo por sí mismos, por supuesto.
Esto es de Herbert W. Armstrong. Yo quería que tuvieran SU punto de vista al respecto, y de cuán inusual era que tuvieran tanta armonía en esto. ¿Cómo pudo ocurrir que estuvieran tan unidos y creyeran en muchas verdades similares? (como nosotros lo vemos). El Sr. Armstrong dijo esto: “El favor y buena estima que nos brindaron, la calidez de su actitud hacia nosotros fue inspiradora, asombrosa y muy inusual”. Yo creo que sí, es un ejemplo inusual. Creo que se está volviendo más inusual. Pero ellos sabían algo sobre la paz mundial.
Y voy a concluir hablando brevemente sobre lo que el Sr. Armstrong hizo. Él fue llamado el “embajador de la paz mundial” por estas personas.
Y le llamaban así porque se reunió con más de 30 líderes del mundo y a ninguno de ellos él solicitó para visitarlos. Pero eran líderes que querían conocer, hablar con alguien que creían que entendía algo sobre la paz mundial: cómo tenerla y cómo nunca la tendremos hasta que bueno, no importa cuánto lo rechacemos, según la Biblia hebrea tendremos paz. Vamos a tener paz mundial y no creo que eso sea algo malo.
Esto es lo que dice este folleto, obtuve esto del boletín del 4 de febrero de 1975. Decía: “Este folleto es para presentar de manera ilustrada, las actividades del Sr. Armstrong en todo el mundo durante los últimos siete años, como embajador de la paz mundial, un término que personas como el príncipe Micasa de Japón, el embajador Ron de Israel, el ministro Kohl de Israel, el Dr. Singh de la Corte Internacional, y otros han utilizado públicamente para describir el trabajo de Herbert W. Armstrong”.
Ahora bien, esa obra comenzó casi exactamente en la época de este gran proyecto arqueológico del que estamos hablando. Y los israelíes, incluso eso, creen que realmente fue un mensaje real proveniente de este “embajador no oficial de la paz mundial”, y ese nombre se lo dieron otras personas, no él mismo: Margaret Thatcher, sólo por nombrar algunos, Yung Jao Ping, Anwar Sadat, Hosni Mubarak y muchos, muchos otros.
El Sr. Armstrong iba a estas personas. Estos líderes de verdad vieron desesperadamente que necesitamos la paz mundial. Es decir, podemos ver a nuestro alrededor. Yo veo este mundo y veo la necesidad de paz mundial. seguro que alguien va a hablarlo y, bueno, tal vez hablen de Isaías 2, versos 2 y 3. Esa es una declaración fuerte y hay profecías fuertes como esa. Y esto es lo que estos hombres dijeron al final, dirigiéndose al Sr. Armstrong. Esto es de Yitzhak Rabin. Él dijo: “Pero por supuesto, se mucho de usted”. Está hablando del Sr. Armstrong. “Sé que todos apreciamos profundamente su interés en Israel”. Él tenía un gran interés en Israel; y una vez dijo abiertamente, que sus próximos 1,000 años él va a vivir aquí en Jerusalén.
Bueno, ese es el tipo de fe que tenía, y estos hombres lo elogian por eso, y creo que tenían ideas similares. Pero él dijo: “Durante la reunión de 45 minutos, los dos líderes hablaron de la amistad del Sr. Armstrong con los jefes de Estado árabes y de la paz entre las naciones”. Y el primer ministro Rabin agradeció al Sr. Armstrong por acercar a otras naciones a Israel, especialmente a las naciones árabes. Y ustedes recuerdan la historia de Anwar Sadat, y todo eso. Pero él dijo: “Tú acercaste a esas personas a nosotros”. Se trata del Primer Ministro diciendo eso. Este es uno de sus líderes, no es alguien que no sabe de lo que está hablando.
Después de decir estas palabras, el Sr. Armstrong dijo esto: “Él apreció mucho mis esfuerzos hacia la paz mundial”. Y creo que esa es ciertamente una causa noble y creo que esos líderes israelíes se esforzaron mucho por la paz.
Y él le preguntó a la Sra. Meir, “¿qué es lo que más necesitan?”. Y ella dijo: “Lo que más necesitamos es la paz”. ¿Qué podemos hacer si no tenemos paz? ¡Vamos a destruir las cosas y a destrozarnos los unos a los otros! De alguna manera, tenemos que aprender a tener paz y a tener esperanza; y la Biblia hebrea está llena de declaraciones sobre eso, como creo que la mayoría de ustedes lo saben.
Pero de todos modos, para concluir, sin importar nuestras opiniones sobre la arqueología, creo que estos líderes pueden enseñarnos algunas lecciones. Creo que debemos estar conscientes de ello. Al fin y al cabo, esto es una parte de mi historia, y yo quería asegurarme de entenderla lo mejor posible; y hoy aquí he tratado de transmitirles eso. Y creo que, después de todo, la gente puede hacer esto a un lado o lo que quieran hacer, pero aun así, es una parte de nuestra historia y creo que vale la pena hablar de ello de vez en cuando.