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Misil nuclear británico vuelve a fallar

Misil nuclear británico vuelve a fallar

Un misil Trident con capacidad nuclear falló y se estrelló en aguas cercanas al buque de la Armada Real que lo lanzó durante una prueba el mes pasado frente a la costa de la Florida.

Una fuente anónima dijo: “Salió del submarino, pero hizo plof, justo al lado de ellos”.

Un costoso plof: las pruebas, que se utilizan parcialmente para demostrar la capacidad militar, son escasas: cada una cuesta aproximadamente 21,5 millones de dólares. Un Trident también falló en 2016.

El Ministerio de Defensa del Reino Unido aseguró a la opinión pública que el fallo fue “específico al evento, y por lo tanto no hay implicaciones para la fiabilidad de los sistemas y arsenales de misiles Trident en general. La disuasión nuclear del Reino Unido sigue siendo segura y eficaz”.

Debilidad expuesta: fuese o no una anomalía, el fallo del lanzamiento le recuerda a Gran Bretaña, a sus aliados y a sus enemigos que Britania ya no “domina los mares”.

“Es una indicación de una falta de compromisos creíbles para mantener a la Armada en forma de primer nivel”, dijo el experto en asuntos internos Greg Swenson en una entrevista con wion. “Esto apunta a problemas mayores. (…) Los únicos ejércitos de nivel 1 en Occidente ahora mismo son [Estados Unidos] y Francia. Creo que el Reino Unido se parece más a Alemania e Italia”.

Implicaciones: el declive militar de Gran Bretaña también afecta a su aliado histórico, Estados Unidos, incluso cuando su propio ejército y su economía están bajo tensión. Durante los dos últimos siglos, las fuerzas británicas y estadounidenses han aportado una relativa estabilidad y paz a gran parte del mundo. Pero la Biblia profetizó lo que ocurriría con ese poder.

Para comprender estas profecías, solicite su ejemplar gratuito de Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía, de Herbert W. Armstrong.

ESTADOS UNIDOS Y GRAN BRETAÑA EN PROFECÍA

La gente del mundo occidental estaría sorprendida y boquiabierta, ¡si lo supieran! Los gobiernos de Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá, Australasia y África del Sur pondrían en marcha gigantescos programas de protección, ¡si lo supieran! ¡Ellos podrían saberlo! ¡Pero, no lo saben! ¿Por qué?