Los terremotos japoneses causan 57 muertos
Un terremoto de magnitud 7,6 sacudió Ishikawa, Japón, el lunes, matando al menos a 57 personas e hiriendo a docenas más. Desde entonces, las réplicas han seguido sacudiendo la nación insular. El martes, las autoridades advirtieron de la posibilidad de que se produjeran más seísmos.
#Japan #Earthquake: Local media write that mass evacuation is underway on some areas of the west coast of Japan due to the threat of a tsunami.
— Indo-Pacific News - Geo-Politics & Defense News (@IndoPac_Info) January 1, 2024
Waves over 1.2 meters high have already reached some areas.
Hope everyone is safe there. Hope nuclear power plants are also safe. pic.twitter.com/PlQD804wWv
Informes actuales de daños:
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Decenas de miles de viviendas destruidas
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Un incendio en la ciudad de Wajima, Ishikawa
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33.000 hogares sin electricidad
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Casi 200 temblores secundarios han ralentizado los esfuerzos por restablecer la electricidad y otras infraestructuras básicas.
Después del terremoto, Japón emitió su alerta de tsunami de más alto nivel pero la retiró después de que no se produjera nada. El ejército japonés desplegó 10.000 efectivos para ayudar en las labores de rescate y socorro.
#Japan #Earthquake: Major damage reported in the coastal town of Uchinada in Ishikawa, Japan after 7.4 magnitude earthquake. Via Insider Paper.pic.twitter.com/gSjcgvTiHk
— Indo-Pacific News - Geo-Politics & Defense News (@IndoPac_Info) January 1, 2024
¿Por qué ocurrió esto? Cuando ocurren tragedias como ésta, muchos se preguntan por qué Dios permitiría tales desastres. Algunos citan estas calamidades como razón para creer que Dios no existe.
Pero la Biblia revela por qué Dios permite los desastres naturales. Jesucristo mismo profetizó que habría “pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares. Y todo esto será principio de dolores” (Mateo 24:7-8).
Su Biblia revela por qué la profecía de Jesús se cumplirá. Y muestra la gran esperanza que hay en las tragedias que vemos hoy.
Más información: lea “Aumento de los desastres ‘naturales’ y climáticos”.