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Los medios de comunicación alemanes dominan al Gobierno
Cuando la ministra alemana de Defensa, Christine Lambrecht, presentó su renuncia el 16 de enero, hizo una declaración bastante reveladora: "La atención que los medios de comunicación han prestado a mi persona durante meses difícilmente ha permitido informar y debatir de forma objetiva sobre los soldados, la Bundeswehr [las fuerzas armadas de Alemania] y las decisiones de política de seguridad en interés de los ciudadanos de Alemania". Lambrecht decidió presentar su renuncia debido a la presión de los medios de comunicación. Aunque el canciller Olaf Scholz expresó su continuo apoyo hacia ella, el clamor popular del que hicieron eco los medios de comunicación exigía un cambio que ella no podía ignorar.
En diciembre, Scholz calificó a Lambrecht de "ministra de Defensa de primera clase". A principios de enero, cuando cobraban fuerza las peticiones para que renunciara, el portavoz adjunto del Gobierno, Wolfgang Büchner, subrayó que la posición de Scholz "no ha cambiado". A la pregunta de si Lambrecht seguiría gozando de la confianza del canciller, Büchner respondió: "Sí, por supuesto". Y añadió: "El Canciller trabaja bien y en confianza con todos sus colegas de gabinete, y eso también aplica a la ministra mencionada".
Tras anunciar su renuncia, la portavoz Christiane Hoffmann declaró a la prensa en Berlín: "La canciller respeta la decisión de la Sra. Lambrecht y le agradece su buen trabajo en estos tiempos difíciles y desafiantes".
A pesar de la confianza del canciller, ella se sintió obligada a renunciar debido a la presión externa. Los ciudadanos se han manifestado y volverán a hacerlo hasta que se produzca el cambio deseado.
Cuando el canciller Scholz anunció en febrero una Alemania fuertemente militarizada, su discurso fue recibido con una gran ovación en el Bundestag. Más de la mitad de los alemanes estaban de acuerdo con la transformación militar y otro 27% dijo que no iba lo suficientemente lejos. (Lea: "¡Alemania responde a Rusia con un anuncio explosivo!").
Pero en los meses sucesivos, el gobierno alemán estuvo muy lejos de cumplir sus promesas. Lambrecht estaba a cargo del proyecto más popular de remilitarización. Pero su falta de entusiasmo para llevarlo la ha convertido en una de las ministras menos populares del gabinete de Scholz. De hecho, el barómetro de tendencias de rtl/ntv muestra que las dos instituciones que más confianza perdieron en el año 2022 fueron la cancillería y el gobierno, con una drástica caída de 24 y 22 puntos porcentuales respectivamente.
Lambrecht cedió a esa presión, pero Scholz sigue manteniéndose firme. Sin embargo, los recientes acontecimientos demuestran lo rápido que pueden cambiar las cosas. Los alemanes exigen un liderazgo más fuerte y piden un ejército fuerte. Ellos y los medios de comunicación no descansarán hasta que esta transformación se realice.
Una profecía del tiempo del fin en Daniel 11:21 muestra que vendrá un líder que prometerá cumplir donde el gobierno actual ha fracasado. Este hombre será acogido con entusiasmo por una población cada vez más frustrada. Pero la Biblia revela que no sólo remilitarizará Alemania, como desea el pueblo, sino que llevará a la nación a la guerra (Daniel 8:23-25).
Por eso en la Trompeta seguimos muy de cerca estos acontecimientos. Aunque un ministro débil pueda ser sustituido por otro, esta tendencia muestra que el reclamo del pueblo para que hayan cambios está siendo escuchado y finalmente producirá frutos.
Para entender la multitud de profecías que hay detrás de esta tendencia lea: Un líder alemán fuerte es inminente.