Los líderes valientes de Dios

Transcripción de La Llave de David

Gran Bretaña llegó a la peor crisis de su historia, en la Segunda Guerra Mundial; se redujo, realmente, a dos hombres que estaban a punto de liderar a Gran Bretaña en ese esfuerzo de guerra y liderar a su país. El primer ministro en ese momento era Neville Chamberlain, y había sido presionado a dimitir; el pueblo quería su salida. Pero él y el rey tenían mucho que decir sobre quién iba a ser el próximo líder, y eligieron al Lord Halifax para ser el líder de Gran Bretaña en ese tiempo. Y el Parlamento simplemente no quiso aceptar eso, y dijeron que sólo aceptarían a Winston Churchill. Entonces así de cerca , estuvimos de perder la Segunda Guerra Mundial, porque en ese tiempo Churchill era el único que se interponía en el camino de Hitler, nadie más. Y esto es lo que Hitler dijo en ese momento: “La guerra ha terminado. Voy a llegar a un entendimiento con Inglaterra”. Y luego: “El 28 de mayo”, esto es de William Manchester, “el primer día de la evacuación de Dunkerque, Halifax hablando en nombre de los líderes conservadores, había dicho a Churchill que una paz negociada, era la única alternativa de Inglaterra”. En otras palabras: Lo único que podemos hacer es rendirnos y tratar de obtener el mejor acuerdo posible. Pero era rendirse, de todos modos.

Pero esto es lo que Churchill dijo: “Seguiremos adelante y lucharemos aquí o en cualquier otro lugar, y si al final la larga historia tiene que terminar, más vale que termine, no por una rendición sino sólo cuando estemos rodando sin sentido por el suelo”. Ahora bien, Adolfo Hitler era el gran temor en ese entonces, pero había un hombre en Gran Bretaña que no temía a Hitler, y que tenía un liderazgo valiente. Así que necesitamos siempre tener valentía fuerte. Algunos historiadores les dirán que él, salvó a la civilización occidental.

Pero repito, verán, Gran Bretaña estuvo muy cerca de perder la Segunda Guerra Mundial, y ¿quién sabe lo que le habría pasado a Estados Unidos y Rusia? No estaban preparados para la guerra en ese momento, al igual que Gran Bretaña no lo estaba, francamente. Tenían un ejército enclenque porque sus líderes, no habían tratado de mantenerse al día, con los armamentos de Alemania, y sus guerras.

Así que hay algunos comentaristas de noticias hoy en día que dirían: Bueno, hemos llegado a la crisis del cierre (como lo llama la traducción de Moffat), y creen que nos enfrentamos a una explosión inminente en el mundo. Ahora bien, se habla bastante de eso porque sí vemos muchos problemas en este mundo. Y, ¿cuál es, el problema?

El profeta Isaías profetizó de algo bastante similar a esto en su libro, y dijo que el problema con la gente de hoy (en su profecía) es que quieren cosas suaves e incluso engaños, en lugar de la verdad; no podían enfrentar la verdad. Pero es sólo la verdad la que nos hará libres y resolverá nuestros problemas. Por naturaleza esto es un problema espiritual, no una guerra carnal que sería algo totalmente diferente.

Pero hoy quiero hablarles de los Líderes valientes de Dios.

Isaiah Berlin dijo que Churchill era “el ser humano más notable de nuestro tiempo”. Pero hoy, ni siquiera Winston Churchill podría salvarnos. Es un problema más grande que eso, y el hombre no puede resolverlo.

Note Hechos 3 verso 20: “Y él envíe a Jesucristo, que os fue antes anunciado (21) a quien de cierto es necesario que el cielo reciba hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, de que habló Dios por boca de sus santos profetas que han sido desde tiempo antiguo”. Esto está hablando de la Segunda Venida de Jesucristo.

Y todos los profetas han hablado acerca de este problema en el tiempo final, y Jesucristo teniendo que resolver el problema, viniendo a salvarnos de sí mismos (Mateo 24, versos 21 y 22). Él personalmente nos dijo eso cuando estuvo en la Tierra. No podemos resolver estos problemas. Pero hay una solución, hay una tremenda esperanza, física y espiritualmente.

El verso 24 dice: “Y todos los profetas desde Samuel en adelante, cuantos han hablado, también han anunciado estos días”. ¡Todos esos profetas han profetizado de estos meros días! La pregunta aquí es, ¿vamos a hacer caso de la advertencia de Dios y de todas esas profecías, de esos profetas en el Antiguo y el Nuevo Testamento, o sea, en la Biblia Hebrea y el Nuevo Testamento? Estas son profecías que se pueden comprobar.

Si miran a la mayoría de los estudiosos de la Biblia, cuando miran a los profetas anteriores dicen, bueno, eso es sólo historia. Pero hay que recordar que estas profecías fueron escritas por profetas, ¡y los profetas profetizan! De eso se trata, y hay dualidad en esas profecías A lo largo de la Biblia. Y hay dualidad que quiero mostrarles hoy, también.

Pero les diré esto, es mortalmente peligroso cuando la gente razona de esa manera, cuando todos deberíamos ver que estas profecías —los profetas anteriores de los que estoy hablando ahora— ¡son principalmente para este tiempo final! ¡no sólo es historia pasada y ya! En realidad, se ha convertido en profecía para nosotros hoy.

El libro de Josué es uno de los profetas anteriores, y es dual. Lo que Josué vivió antiguamente fue sólo un tipo de lo que nos está pasando hoy, y lo que nos va a pasar. Hoy está dirigido a Israel espiritual, antiguamente estaba dirigido al Israel de cuando no tenían el Espíritu Santo de Dios. Era una situación totalmente diferente.

Pero Dios está alistando a Su pueblo hoy (Israel espiritual), ¡que se prepare para ayudar a Jesucristo a gobernar la Tierra en el trono de David para siempre! ¡Dios está preparando a Su pueblo para hacer eso!

Pero creo que aquí hay una verdad estremecedora, y es asombrosa cuando se entiende, y de lo que Josué se trata. Él estaba a punto de entrar en la Tierra Prometida, pero eso es sólo un tipo del Reino de Dios. Nosotros hoy, siendo Israel espiritual, estamos a punto de entrar en la Tierra Prometida del Reino de Dios, o sea, vida eterna para siempre; y es inminente. Ese maravilloso Mundo de Mañana está muy, muy cerca de estar aquí en la Tierra.

Así que los muy elegidos se están preparando para gobernar. Necesitamos gobernantes en este mundo; seguro que todos podemos ver eso. Los gobernantes que tenemos no están calificados para gobernar este mundo (lejos de eso) y son muy destructivos en casi todo lo que hacen.

Pero de nuevo, creo que Josué tiene una de las introducciones más importantes en toda la Biblia, cuando nos damos cuenta de lo que está diciendo. Josué dijo: Bueno, esta es una entrada a la Tierra Prometida. Físicamente en su tiempo de Israel (aunque sin duda tenía el Espíritu Santo de Dios, pero la gente no lo tenía) y sin duda el coraje es esencial para los líderes si alguna vez van a ser muy exitosos.

Winston Churchill dijo que él creía que la valentía era la fuerza más grande que se podría tener porque sin ésta, todas las otras virtudes serían ineficaces. Tenemos que tener fuerza y valentía para ganar la batalla que Dios nos ha dado a todos a pelear, ya sea que tengamos el Espíritu Santo de Dios o sin él.

Josué comienza así: “Aconteció después de la muerte de Moisés siervo de [el Eterno], que [el Eterno] habló a Josué hijo de Nun, servidor de Moisés, diciendo (2) Mi siervo Moisés ha muerto; ahora, pues, levántate y pasa este Jordán, tú y todo este pueblo, a la tierra que yo les doy a los hijos de Israel”.

Entonces el verso 5 dice: “Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo”. Dios les está diciendo a ellos: “No te dejaré, ni te desampararé” Entonces, ¿qué les está diciendo que hagan? ¿Qué deben hacer para entrar en la Tierra Prometida, en ese tiempo? ¿Y qué necesitamos hacer nosotros en este tiempo final para cumplir esta profecía?

El verso 6 dice: “Esfuérzate y sé valiente”, aquí va una. Luego habla de dividir la tierra.

Y luego el verso 7 dice: “Solamente esfuérzate y sé muy valiente”, muy valiente; van dos. Él está hablando de ser muy valiente. Y dice que hacer esto es “… para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas”. Prosperarás y tendrás éxito. Y Dios nos está hablando física y espiritualmente. ¡Hay dualidad! Es sólo un tipo de lo que Dios está haciendo hoy en Su Iglesia; el Israel espiritual.

Bueno, Él les dijo que tuvieran este Pentateuco en su boca (que se llamaba la Ley) y Él dijo en el verso 9: “Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque [el Eterno] tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas”. No tenían el Espíritu Santo, el pueblo no lo tenía, pero Josué estaba dejando claro que Dios estaba detrás de ellos y que no podían perder si atendían a lo que Él decía.

Ahora, ellos fallaron al final, pero ¿qué tal hoy espiritualmente? Él dice: ¡No tengan miedo! ¡No tengan miedo! Así que si vamos a tener valor, vamos a tener que vencer nuestros miedos, y ciertamente podemos hacerlo, especialmente con la ayuda de Dios. Ese es el único tipo de valor que realmente nos llevará a través de todo; es el propio valor de Dios.

Y Él dice que nos dará poder con ese valor y ¡nada se interpondrá en nuestro camino! ¡Esa es una profecía fenomenal para nosotros hoy! Y no me importa lo que la gente diga al respecto, acerca de que eso es sólo historia. ¡Es tan fácil probar que es mucho más que eso! Es profecía para este tiempo final, principalmente; y oh, cómo necesitamos entender eso hoy.

Estos grandes hombres de Dios realmente tuvieron esa clase de valentía y confiaron en Dios.

Así que necesitamos valentía desesperadamente, y la manera de construirla es enfrentar nuestros miedos y superarlos, y sí podemos hacerlo. ¡Sin duda con Dios podemos hacerlo de una manera duradera! ¡Una valentía que durará para siempre!

Así que Josué estaba a punto de entrar a la Tierra Prometida y estaba reuniendo a todos, a los líderes y a todos y diciéndoles: Bueno, miren, tenemos que tener valentía para poder hacer esto, y él era un líder con un coraje fuerte. El líder de Dios siempre tiene ese coraje fuerte, y vamos a gobernar para siempre por hacer eso si somos leales a Dios. Pero Él dice que Su esposa se ha preparado.

Ahora noten Isaías 3 verso 1: “Porque he aquí que el Señor [Eterno] de los ejércitos quita de Jerusalén y de Judá al sustentador y al fuerte, todo sustento de pan y todo socorro de agua; (2) el valiente”, aquí hay algo que Él ha quitado de Israel, y eso (sin duda) incluye a Estados Unidos y Gran Bretaña y el Estado judío; esas son las naciones a quienes Dios está apuntando principalmente esta profecía. Ellos son las naciones de la primogenitura y la nación del cetro, y ellos deberían estar haciendo cosas excepcionales para Dios. Pero, bueno, Él ha quitado al “valiente, el hombre de guerra, el juez y el profeta, el adivino y el anciano; (3) el capitán de cincuenta”, y así sucesivamente.

Verso 4: “Y les pondré jóvenes por príncipes, y muchachos serán sus señores. (5) Y el pueblo se hará violencia unos a otros, cada cual contra su vecino; el joven se levantará contra el anciano, y el villano contra el noble”. Ven, esto sólo nos lleva a un estado de anarquia si no tenemos eso. Eso es lo que enfrentamos tan a menudo hoy en día. Hay muy pocos hoy que todavía tienen coraje, pero es limitado si no tienen el poder de Dios y el Espíritu de Dios.

Pero aquí hay algo que es muy monumental que tenemos que aprender. Tenemos que tener coraje o todas nuestras otras virtudes probablemente no serán efectivas en absoluto. Eso es a lo que nos enfrentamos, y se puede probar cada pedacito de esto.

Tocqueville, el historiador francés, dijo que en tiempos democráticos, los historiadores no se daban cuenta ni tenían en cuenta el hecho de que los grandes hombres aparecen y la historia no funciona como lo haría normalmente si simplemente dejamos que las cosas fluyan y no tenemos un liderazgo real allí. Tenemos que tener un liderazgo real, un liderazgo fuerte, un hombre que domine los acontecimientos; con el poder que tiene. Ese es el gran defecto de la democracia, y lo vemos hoy en día de muchas formas.

Aquí esta lo que la Reina Victoria dijo cuando Gran Bretaña se estaba convirtiendo en el imperio más grande que haya existido en la Tierra. Ella dijo a los líderes: “Si vamos a mantener nuestra posición como una potencia de primer orden, con nuestro Imperio Indio y colonias grandes, debemos estar preparados para ataques y guerras y de una manera u otra, continuamente”. Si vamos a ser un gran imperio, vamos a tener esas guerras continuamente.

Y si somos la Iglesia de Dios alcanzando al mundo, vamos a tener guerras de algún tipo continuamente. Si somos espirituales Dios se asegura de que tengamos guerras para construir Su carácter dentro de nosotros. Tenemos pruebas y dificultades, pero también recompensas que lo pasman a uno, ¡son tan grandes!

Así que hemos tenido al pueblo de Dios alejándose en este tiempo final. El 95% de ellos se han alejado de Dios.

Voy a parafrasear algunas escrituras de Jeremías. Jeremías 30 verso 24, dice: “… en el fin de los días entenderéis esto”. Todas estas cosas se van a cumplir, dice Jeremías 30:24. Y “entenderéis esto” significa entenderlo completamente; vamos a entenderlo hoy. ¿Entiende usted, y entiendo yo estas profecías en este tiempo del fin?

Si regresamos al principio de Jeremías 30, Dios le dijo que escribiera este mensaje suyo en un libro; ¡es dual! Él fue a Judá antiguamente, pero Dios dijo: Quiero que lo escribas en un libro porque va a ser, ¡para todo Israel! Pueden ver eso en nuestro folleto sobre Jeremías.

Y el verso 9 sigue hablando de que David va a ser resucitado para gobernar sobre Israel; ese es el regreso inminente de Jesucristo, y lo que va a suceder. Resurrecciones asombrosas, que Dios nos ha profetizado.

Pero continuó diciendo que hay una voz de peligro. Si lo pasamos por alto. Habrá problemas.

Pero Él dijo, en el verso 8, ¡no tengan miedo! ¡Venzan el miedo!

Luego Él sigue hablando de que tenemos que construir y plantar, y luego habla de la olla hirviente en el verso 13, los problemas reales que van a venir.

Pero esto es lo que nos dice a todos: “Tú, pues, ciñe tus lomos, levántate, y háblales todo cuanto te mande; no temas delante de ellos, para que no te haga yo quebrantar delante de ellos”. Esto es Jeremías 1:17. Él dice: ¡Ahora, no seas confundido por ellos y no tengas miedo de ellos!

El 18 dice: “Porque he aquí que yo te he puesto en este día como ciudad fortificada, como columna de hierro”, ¿Creen eso? ¿Puede usted creerle a Dios? “yo te he puesto”, Él ya se lo ha dado a usted, al pueblo de Dios. Es una promesa de Dios, y serás un “muro de bronce contra toda esta tierra, contra los reyes” y demás, y “los príncipes”, y toda esa gente. ¡Ese es el tipo de poder que Dios dice que nos dará! Y Él dice: “Pelearan contra ti”, pero tú prevalecerás contra ellos. Verso 19, eso es lo que dice. Y Él va a “librarte”, porque Él dice: “Yo estoy contigo”.

Pero vean, no podemos simplemente pedir cosas suaves; ¡tenemos que enfrentar los hechos! ¡Tenemos que enfrentar la verdad! O nunca jamás podremos obtener ayuda de Dios.

Voy a leerles Ezequiel 33 verso 11. Aquí está la solución, vean: “Diles: Vivo yo, dice [el Eterno] el Señor, que no quiero la muerte del impío, sino que se vuelva el impío de su camino, y que viva. Volveos, volveos de vuestros malos caminos; ¿por qué moriréis, oh casa de Israel?”. Dios no quiere que tengamos ese tipo de problema; Él quiere que nos volvamos, nos volvamos, nos volvamos —lo usó tres veces— vuélvanse a Dios y aléjense de sus malos caminos. Vean, eso se aplica a nosotros para empezar a convertirnos, pero tiene que ser un modo de vida para todos nosotros. Tenemos que alejarnos de esas malas obras o de los pecados de este mundo, ¡y es un modo de vida! Dios dice que necesitamos desesperadamente prestar atención a esto en este tiempo final.

Y entonces Él dice en el verso 33: “Pero cuando ello viniere”, ellos escuchan pero no lo hacen, y Él dice: “Pero cuando ello viniere (y viene ya), sabrán que hubo profeta entre ellos”. Verso 33. Va a haber un mensaje de Dios.

Hubo un profeta, el tipo de Elías del tiempo del fin (Mateo 17, versos 10 y 11). Pueden leer sobre eso en Él tenía razón, nuestro folleto sobre Herbert W. Armstrong, y también, Cómo ser un vencedor, y Alemania y el Sacro Imperio Romano.

Pero tenemos que estar preparados para la guerra. Douglas MacArthur dijo: Mira, si tomas generales y líderes así en el tiempo de paz, muy a menudo cuando los pones en la guerra, ellos fallan, no tienen el coraje fuerte que un líder debe tener. Simplemente no lo tienen. Y lo que buscamos son personas que, en esa batalla, ¡ganen batallas! Eso es lo que estamos buscando.

Así que Dios, cuando saca a Su pueblo, los pone en guerra, una guerra espiritual, para que ganen batallas, ¡y así es como construimos el carácter de valentía en nosotros haciendo justamente eso!