Londres ha caído

Algunas de las peores protestas antisemitas del mundo occidental han tenido lugar en Londres, y han sido violentas. Una turba invadió un café y exigió que los clientes judíos se marcharan, amenazando con un cuchillo a todos los que se oponían. También tomaron las principales estaciones de tren gritando, “¡Muerte a todos los judíos!”, y un conductor del tren londinense dirigió a sus pasajeros en un cántico de “Palestina libre”.

La policía local ha abordado el problema diciéndole a los judíos británicos que no usen kipás ni estrellas de David.

Pero la policía y los propios ciudadanos han sido antisemitas. El Consejo de Westminster permitió a los manifestantes pro-Hamás montar un escenario junto al Cenotafio, el monumento más importante de Gran Bretaña a sus caídos en guerra. Es difícil imaginar un lugar más sagrado aparte de la Abadía de Westminster. Simpatizantes de Hamás hicieron un llamado a un genocidio judío al lado de un monumento que conmemora a los que murieron deteniendo uno.

En otra protesta, un manifestante ondeó la bandera de Al Qaeda mientras alababa al Estado Islámico y pedía a Alá que maldijera a los judíos. La policía actuó rápidamente, publicando en X que “las banderas de esta foto no son las de ISIS. (…) Tenemos agentes especializados con conocimientos sobre banderas trabajando en esta operación…”. Sólo es la bandera de Al Qaeda, no la del Estado Islámico: no hay nada que ver aquí.

Otro manifestante pidió la “yihad de los ejércitos de los países musulmanes”. La Policía Metropolitana respondió con un tuit en el que decía que “la yihad tiene muchos significados”, como si la “yihad por los ejércitos de los países musulmanes” pudiera significar simplemente una lucha personal contra la inmoralidad.

¿No hay nada que haga a la policía británica intervenir? Un hombre cruzó la línea al llevar una bandera inglesa. La policía londinense le dijo que la guardara y que sería detenido si volvía a repetir sus acciones “casi racistas”.

Mientras tanto, han arrancado afiches de rehenes judíos y han prohibido que una camioneta de la televisión muestre imágenes de víctimas judías mientras circula por Londres. Se puede llamar públicamente a asesinar judíos, pero no se pueden mostrar imágenes de sus cadáveres. Esto es una doble moral escandalosa.

¿Hay simpatizantes de Hamás en la policía? Sabemos que los hay entre sus asesores. Mohammed Kozbar elogió al fundador de Hamás como “el maestro de los mártires de la resistencia”. Kozbar es subdirector general del Consejo Musulmán de Gran Bretaña, una organización con la que el gobierno cortó lazos en 2009 cuando hizo un llamado a atacar a la Marina Real. También forma parte de un panel que asesora a la policía y a la fiscalía de Londres sobre delitos de odio.

Este verano, Kamel Kozbar, partidario de Hamás en el Líbano, fue invitado a asesorar a la policía sobre la comunidad musulmana de Londres.

Cuando la ministra del Interior, Suella Braverman, calificó las protestas como “marchas de odio” y dijo que la policía “tenía favoritos cuando se trataba de manifestantes”, fue despedida. El apoyar a Hamás no acabará con su carrera, pero el defender a Israel sí lo hará.