La visión católica de Guttenberg para Alemania

Un signo distintivo de cada ciudad alemana es una iglesia, pero la asistencia a la iglesia está disminuyendo drásticamente. Cientos de miles de miembros abandonan cada año tanto la Iglesia protestante como la católica en Alemania. Pero un hombre se ha alzado como defensor de las Iglesias, recordando a Alemania siglos de historia europea: el ex ministro de Defensa alemán Karl-Theodor zu Guttenberg.

Hay indicios de que el barón, cuya familia tiene una larga historia con la fe católica, podría ayudar a anunciar un renacimiento religioso.

Guttenberg —que recientemente se ha convertido en presentador de podcasts, autor y director de documentales— cree que la religión es un aspecto importante de la sociedad, especialmente a medida que crecen las divisiones y se intensifican las crisis. En un podcast del 4 de diciembre con el copresentador Gregor Gysi, dijo: “Dada la división de nuestra sociedad actual, sería bueno extender algunos pensamientos navideños al resto del año”.

En una entrevista concedida a Nürnberger Nachrichten el año pasado, declaró:

Estamos viendo cifras impresionantes de personas que abandonan [la Iglesia] y los números aumentan y aumentan. Me preocupa mucho el poder unificador y social que podrían ejercer las Iglesias. Pero eso queda eclipsado por los escándalos. (…) Creo que es esencial una Iglesia reformista y estable.

Guttenberg ha abordado repetidamente este tema después de su documental del año pasado que detalla las crisis de las Iglesias protestante y católica, Um Gottes willen? Die Macht der Kirche in Deutschland (¿Por amor de Dios? El poder de las Iglesias en Alemania). En una entrevista con n-tv, Guttenberg explicó:

Creo que la gente siempre necesita la religión. Ninguna esterilla de yoga puede sustituir eso. Es un bonito extra, pero la gente sigue teniendo tantas preguntas sin respuesta en la vida, sobre todo cuando se trata de la muerte. Probablemente no saldremos adelante sin la religión.

Aunque señaló que creer le ayuda casi a diario, añadió:

Pero confieso que no voy a la Iglesia todos los domingos, y ni siquiera me remuerde la conciencia por ello. (…) A medito menudo, incluso sin rosario; así me siento mejor. La gente anhela la espiritualidad, y me alegra que quieran venir y reflexionar sobre sí mismos. Ya sea en un banco de la Iglesia o en una esterilla de yoga, que a mi parecer es mucho más cómodo.

En conversación con la emisora católica domradio.de el 7 de diciembre de 2023, volvió a enfatizar que nada puede sustituir el poder de las Iglesias en la sociedad:

No hace falta que le diga lo que supondría para la cohesión social de nuestra sociedad que suprimiéramos por completo las iglesias. Lo que eso significaría para todo el ámbito de la atención médica, los cuidados de enfermería, para lo que crean las autoridades escolares, para los jardines de infancia, etcétera. Por supuesto, todo esto es indispensable, importante a mi juicio. Sin embargo, la Iglesia también debe darse cuenta, y obviamente lo hace (aunque con mucha controversia interna), de que es necesario reorientar ciertas cosas. Esto es imperativo, porque si nos fijamos en el número de personas que se marchan, es algo más que una llamada de atención. Es un clamor que de alguna manera no parece haber llegado aún a oídos de algunos.

Los siglos de logros de la Iglesia católica en Europa no se parecen a los de ninguna otra religión del mundo. Guttenberg conoce esta historia y busca revivir la imagen de la Iglesia en Alemania. “Guttenberg está haciendo de su abogado, apoyando a la Iglesia como nadie”, escribió el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, en “Vigile de cerca a este hombre”.

¿Cuál es exactamente la visión de Guttenberg para la Iglesia católica y Alemania?

Adoración dominical

Guttenberg fue entrevistado por la revista Grandios, que tiene el objetivo declarado de “anclar los valores cristianos en la sociedad”. Tobias Liminski, de una renombrada familia católica alemana, entrevistó a Guttenberg sobre su fe personal y lo que la religión ofrece a la sociedad. Liminski señaló: “Usted publica sus artículos en domingo, el Día del Señor, como decimos los cristianos”.

Guttenberg: [Sí, pero] ¡los escribo los sábados!

Tobias Liminski: ¿Es una coincidencia que se [publiquen] en domingo, el día en que Dios dijo que todo era bueno?

Guttenberg: No quiero elevarme a ese nivel… Pero no, no es una coincidencia. Siempre ha sido importante para mí ver este domingo como un día necesario para la reflexión tranquila, no sólo para que el domingo uno se deje llevar por los problemas del resto de la semana. Como sabe, tengo una formación cristiana. El domingo desempeñó un cierto papel para mí. No se puede esperar que la gente haga eso hoy en día. No se puede esperar eso en una sociedad en la que casi todos se sienten parte de esta imagen dominical. A pesar de ello, puede haber un día a la semana, que cada uno decida por sí mismo, en el que pueda aprovechar ofertas que no se corresponden con las leyes de la vida cotidiana.

Por eso quería escribirlas para el domingo. Ahora tenía la oportunidad de escribirlas el miércoles y publicarlas el domingo. Pero se ha arraigado tanto que en realidad siempre es sábado. (…)

El domingo es algo en lo que tradicionalmente nos volvíamos a reunir en el ámbito humano. Ya fuera ir a la Iglesia, socializar, las actividades del club o incluso jugar fútbol un domingo por la tarde, todo eso se está marchitando hoy en día. Ahora sólo es vagamente reconocible como lo que una vez fue.

Tal vez esa mentalidad secularista resulte más atractiva en la sociedad actual mientras se sigue pidiendo a la gente que descanse en un día que la Iglesia católica impuso durante siglos para distinguirse del Sábado bíblico. Pero la historia de esta Iglesia y la profecía bíblica advierten que el culto dominical no seguirá siendo voluntario. (Solicite un ejemplar gratuito de ¿Quién o qué es la bestia profética?, de Herbert W. Armstrong).

Planes de reforma

Aunque el número de miembros de la Iglesia católica en todo el mundo ha crecido hasta los 1.400 millones, muchos en la Iglesia critican al papa Francisco. La crisis es especialmente dura en Alemania, donde cientos de miles de miembros se están marchando y muchos obispos se rebelan contra el liderazgo del Papa.

En mayo, un informe de la Conferencia Episcopal Alemana señalaba que la Iglesia necesita “un proceso de reforma y renovación para cumplir su misión”. Los católicos alemanes exigen un papel más importante de la mujer en la Iglesia y cambios en la doctrina eclesiástica sobre el sexo. Tales reformas podrían contribuir a la unidad con la Iglesia protestante.

Tales exigencias han culminado en el llamado proceso sinodal, que es tedioso y aporta pocos cambios.

En vísperas del estreno de su documental el año pasado, Guttenberg realizó un podcast con el experto en el Vaticano Andreas Englisch, que ha escrito sobre la Iglesia católica durante más de tres décadas. Englisch dijo a Guttenberg que los obispos alemanes no pueden reformar la Iglesia católica sin la bendición del Papa. Desde entonces, Guttenberg se ha hecho eco de ese sentimiento, señalando que “la cola no puede menear al perro”. Estas son “palabras que al Vaticano ciertamente le encanta oír”, comentó el Sr. Flurry.

Para su documental, Guttenberg entrevistó a una mujer católica devota que quiere ser sacerdote, a un transexual que estudia teología y a una víctima de abusos sexuales. Defiende con firmeza la eliminación del impuesto eclesiástico que el Estado alemán deduce de las nóminas de los ciudadanos. Katholische.de concluyó que el documental ofrece “un alegato diferenciado, en el mejor sentido de la palabra, y fácil de consumir, a favor de una reforma de la Iglesia de pies a cabeza”.

Historia familiar personal

El Sacro Imperio Romano ha marcado la historia familiar de Guttenberg. El primer registro de su noble familia es del año 1148 d. C. La familia católica recibió inicialmente el nombre del castillo de Plassenburg. Desde 1331, la familia lleva el nombre del castillo de Guttenberg, donde creció Guttenberg. Tras unirse brevemente a los protestantes en el siglo XVI, la familia regresó al catolicismo en el transcurso del siglo XVII, asumiendo “altos cargos eclesiásticos y seculares en las abadías de Bamberg y Würzburg”, según el Léxico Histórico de Baviera. A lo largo de los siglos, la familia se mantuvo cercana a ambas iglesias y aún ejerce el patronazgo sobre la parroquia protestante de Guttenberg.

El emperador del Sacro Imperio Romano Leopoldo i (1640-1705) elevó a la dinastía Guttenberg al rango de Reichsfreiherr, que se traduce como “Barón del Imperio”. Karl-Theodor zu Guttenberg es descendiente del emperador del Sacro Imperio Romano Leopoldo ii (1747-1792) de la dinastía de los Habsburgo. Después de 1806, cuando el Sacro Imperio Romano de la Nación Alemana se disolvió oficialmente, Reichsfreiherr pasó a ser Freiherr, título que Guttenberg sigue ostentando.

El poder de la Iglesia

Cuando se le preguntó: “La Iglesia es vista de forma tan crítica, pero sigue teniendo un enorme poder. ¿Cómo se explica eso?”, Guttenberg respondió:

Aparte del hecho de que la Iglesia es uno de los mayores empleadores del mundo y de que dispone de una increíble cantidad de dinero (que a veces se distribuye de forma increíblemente injusta), es el factor de marca lo que me interesa especialmente. Y sí, me preocupa la Iglesia, pero no me alarma en absoluto.

Muchos países imponen la separación entre Iglesia y Estado, en parte debido a males como las Cruzadas y la Inquisición. Sin embargo, algunos creen que debe utilizarse el poder de una Iglesia y un Estado unificados. La Biblia revela que un hombre en los últimos tiempos restaurará estas relaciones e indica que se levantará con la ayuda de la Iglesia católica. En 2005, el Sr. Flurry explicó:

Creo sinceramente que el Vaticano ayudará a que ese líder político entre en escena, y será entonces cuando veamos realmente los fuegos artificiales. Sabemos por estas profecías que el Vaticano se volverá muy poderoso e instigará algunos cambios radicales.

La Iglesia católica ha superado muchas crisis y ha cambiado en los últimos 2.000 años más que cualquier otra institución de la Tierra. Por tanto, no debería sorprendernos que la Biblia contenga muchas profecías detalladas sobre la Iglesia católica. El libro del Apocalipsis habla de una unión Iglesia-Estado que, según la profecía, se levantará una vez más. A medida que continúen las crisis, esperamos que la Iglesia católica se implique más. El Sr. Flurry escribió en 2021:

Este Sacro Imperio Romano de nuestros días es una vez más una alianza Iglesia-Estado, ¡en realidad un imperio guiado por un poder religioso! No sólo debemos estar atentos al ascenso de un hombre fuerte que guíe el imperio, sino también al aumento de la influencia de la Iglesia católica sobre él.

Defensores como Guttenberg podrían ayudar a la Iglesia católica a recuperar poder e influencia en Europa. Solicite un ejemplar gratuito de Alemania y el Sacro Imperio Romano en profecía para una explicación detallada.