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La casa del presidente surcoreano se convierte en una ‘fortaleza’ antes del segundo intento de arresto

La casa del presidente surcoreano se convierte en una ‘fortaleza’ antes del segundo intento de arresto

La casa del presidente surcoreano destituido Yoon Suk Yeol ha sido atrincherada con vehículos y alambre de púas mientras las autoridades se preparan para un segundo intento de detención, informó el Telegraph el 8 de enero.

La casa de Yoon “se está convirtiendo en una fortaleza”, dijo Youn Kun-young, legislador de la oposición.

Ley marcial: el presidente Yoon fue destituido el 14 de diciembre de 2024, tras imponer la ley marcial y verse obligado a retractarse pocas horas después, sumiendo a Corea del Sur en su peor crisis política en décadas. Yoon argumentó que invocó la ley para proteger a la nación contra los poderosos simpatizantes de Corea del Norte dentro del gobierno, pero el impopular presidente probablemente lo hizo en un movimiento desesperado para mantenerse en el poder.

Desde entonces, Yoon se ha negado a ser interrogado y se ha resistido a ser detenido.

Primer intento: Yoon evitó el primer intento de detención la semana pasada. Permaneció dentro de su casa y dijo a sus partidarios que “lucharía hasta el final” contra las “fuerzas antiestatales”. Cuando los investigadores intentaron entrar en su casa, unos 200 miembros del servicio de seguridad presidencial les impidieron llegar hasta él.

Segundo intento: se ha emitido una segunda orden de detención. En respuesta, cientos de manifestantes, tanto opositores como partidarios, se apresuraron a llegar a la casa atrincherada de Yoon, desafiando temperaturas bajo cero.

Los partidarios de Yoon dejaron flores en el exterior y adoptaron el lema de Trump “Make Korea great again” [Hacer a Corea grande otra vez] mientras ondeaban banderas estadounidenses.

Manifestantes rivales levantaron pancartas que decían: “Detengan, arresten al insurrecto Yoon Suk Yeol”.

Una democracia moribunda: muchos ven las recientes medidas del presidente como una amenaza para la democracia, mientras que otros apoyan firmemente al líder destituido a pesar de las órdenes de arresto. El actual malestar político no muestra signos de resolverse pronto.

Estos acontecimientos son un signo preocupante de una tendencia mundial más amplia: las democracias se desestabilizan y las tensiones geopolíticas aumentan rápidamente.

Aunque la democracia es mejor que otras formas de gobierno humano, el ejemplo de Corea del Sur demuestra que sigue siendo totalmente incapaz de gobernar a los hombres. Para conocer la única solución verdadera y duradera para gobernar a la humanidad, lea “La democracia está muriendo”.