Kim declara ‘hostil’ a Corea del Sur y aproxima el espectro de la guerra
El líder supremo de Corea del Norte, Kim Jong-un, anunció el 16 de enero un giro radical en las relaciones de su nación con Corea del Sur, al designarla como enemigo número 1. Los analistas creen que este giro hace mucho más probable una guerra en la península coreana.
Hemos formulado una nueva postura sobre las relaciones Norte-Sur y la política de reunificación y hemos desmantelado todas las organizaciones que establecimos como organismos de solidaridad para la reunificación pacífica. (…) Puede decirse que se trata de un proceso indispensable que debe tener lugar sin falta.
—Kim Jong-un
Revisión constitucional: Kim dijo que pretende modificar la constitución de Corea del Norte para designar a Corea del Sur como su “enemigo principal e invariable”.
El histórico discurso se produjo días después de que las fuerzas de Kim dispararan unos 200 proyectiles de artillería en aguas cercanas a Corea del Sur, lo que provocó que Corea del Sur respondiera con cientos de disparos de artillería. Después, Corea del Norte realizó tres días de ejercicios de artillería con fuego real sin precedentes.
Conflicto inminente: la revista The Diplomat calificó el repentino giro de Kim de “gran acontecimiento” porque significa que “la península coreana ha pasado de un estado de armisticio a otro en el que el conflicto se avecina en cualquier momento”.
Lo que está en juego en tal conflicto difícilmente podría ser mayor.
-
Corea del Sur es un aliado de Estados Unidos que acoge a 28.500 soldados estadounidenses.
-
Corea del Norte es una potencia nuclear y se cree que en los últimos meses ha recibido una mayor ayuda de Rusia con misiles diseñados para lanzar ojivas nucleares a objetivos.
‘Triple espiral’: con Estados Unidos ya implicado en parte en los conflictos de Ucrania y Oriente Medio, según la revista The Diplomat, “la escalada de tensiones en la península coreana ha empujado a Estados Unidos y a sus aliados a una triple espiral de crisis”.
En su folleto El Armagedón nuclear está ‘a las puertas’, el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, analiza el liderazgo y la beligerancia de Corea del Norte y escribe: “Hombres locos podrían estar preparados para atacar a Estados Unidos con armas nucleares! Es un disparate infantil pensar que alguien, excepto Cristo, pueda detener esta locura nuclear”.
