(HENGHAMEH FAHIMI/AFP/GETTY IMAGES)
Irán y Europa se dirigen a un choque de civilizaciones
E n años recientes, la República Islámica de Irán se ha transformado de paria a aliada. Desde que el acuerdo nuclear, encabezado por Estados Unidos bajo la administración Obama, fue implementado a comienzos de 2016, Irán ha disfrutado de la remoción de las sanciones económicas y ha llevado a cabo negocios con otras naciones abiertamente, en algunos casos, por primera vez desde la Revolución Islámica de 1979.
Sin embargo, esta nueva legitimidad internacional no ha cambiado algunas realidades fundamentales acerca de Irán. Irán todavía es una teocracia, gobernada por un clérigo radical que, al igual que el 85 por ciento de los iraníes, cree en el Chiismo Duodecimano, una ideología que abraza la muerte. Irán sigue siendo el Estado patrocinador del terrorismo número uno del mundo, y continúa su marcha para convertirse en una potencia nuclear.
Irán continúa siendo una importante fuerza de provocación y desestabilización en el mundo.
La Trompeta ha pronosticado por años que Irán no será detenido antes que inicie una guerra grave, una guerra que, de hecho, escalará hasta la próxima guerra mundial.
También hemos pronosticado que el principal adversario de Irán en esa guerra no será el Estado judío de Israel, al cual los líderes iraníes llaman “el pequeño Satán”, o incluso EE UU, “el gran Satán”.
Será una un imperio europeo unido encabezado por Alemania.
Éstos son atrevidos y dramáticos pronósticos que la Trompeta ha enfatizado consistentemente por más de un cuarto de siglo. Pero los eventos actuales se están alineando para hacer que este escenario suceda.
Los actores
La Trompeta y antes La Pura Verdad han estado observando por décadas el surgimiento de dos nuevos bloques de poder que se enfrentarán entre sí. Uno estará en el norte y el otro en el sur.
Ya en 1955, cuando el comunismo estaba extendiendo sus tentáculos en Oriente Medio, el difunto jefe editor de La Pura Verdad, Herbert W. Armstrong, identificó al bloque de poder del norte: “[L]a ciudad de Jerusalén será finalmente capturada por un resurgimiento del poder del fascismo en Europa—¡no por una invasión comunista de Palestina!” (La Pura Verdad, nov.-dic. de 1955). De esta manera, mientras el resto del mundo estaba viendo los peligros de un comunismo propagado, el Sr. Armstrong sabía que la verdadera área para observar estaba en otro lugar. Él continuó, “Será una unión fascista de Iglesia y Estado restablecida—unos Estados Unidos de Europa—que intentarán establecer el palacio y la capital ahí…”.
Por décadas, el Sr. Armstrong advirtió que la intervención de Europa en Oriente Medio sería la arena en la cual revelaría primero su verdadera naturaleza—consistente con su historia—como un brutal poder imperialista.
Incluso desde antes del fin de la Segunda Guerra Mundial hasta su muerte en 1986, el Sr. Armstrong profetizó constantemente que Alemania reuniría, reconstruiría y reformaría un imperio que dominaría Europa. El proyecto de unificación europea ha sido largo, oneroso y difícil; ha estado lleno de disputas e ineficiencias. No obstante, ha progresado tal como el Sr. Armstrong dijo que lo haría. Las fuerzas económicas y militares combinadas de las naciones europeas le dan a este imperio emergente un tremendo poder potencial. Con la cantidad y severidad de amenazas surgiendo en el mundo y dentro de Europa, va a encontrar un camino para vencer sus diferencias y se va a unir, al menos por un corto tiempo.
El Sr. Armstrong también predijo que este bloque de poder del norte lanzaría un ataque sólo después de haber sido provocado por el bloque del sur.
Por décadas, el Sr. Armstrong advirtió que la intervención de Europa en Oriente Medio sería la arena en la cual revelaría primero su verdadera naturaleza—consistente con su historia—como un brutal poder imperialista.
El poder del norte, dijo él, sería un próximo imperio europeo liderado por Alemania. ¿Pero quién era este poder del sur?
En el artículo de portada de la edición de sept.-oct. de 1990 de la Trompeta, el jefe editor, Gerald Flurry, preguntó: “El rey del sur—¿está ahora en la escena mundial?”. El Sr. Flurry identificó a este “rey” como un bloque de poder de Oriente Medio, posiblemente liderado por el presidente iraquí Saddam Husein, que chocaría violentamente con “el rey del norte”, probablemente por el tema del petróleo. Él escribió:
No tiene que ser Saddam Hussein—aunque muy bien podría serlo. Incluso si no es Saddam Hussein, el rey del sur se levantará en esa parte del mundo—¡muy pronto!
El petróleo y el dinero le dan al rey del sur el poder para “empujar”. El rey del norte (la comunidad económica europea) ¡ha impresionado al mundo con su meteórico asenso al poder! ¿Estamos viendo ahora al rey del sur surgir de una forma similar?
Después de que terminó la primera Guerra del Golfo con Hussein aún en el poder, el Sr. Flurry nuevamente se enfocó en el bloque de poder de Oriente Medio con su artículo “Un rey del sur islámico” en la Trompeta de julio de 1992. Escribiendo acerca de la gran población islámica, el control del petróleo y una posible adquisición de armas nucleares de parte de la antigua Unión Soviética, el Sr. Flurry escribió: “El rey del sur podría gobernar Irak o Irán, o ambos países. Pero se ve más como que Irán podría producir este rey”.
Luego, en 1993, escribió: “Estos versículos apuntan a un rey del sur que está aún en el futuro. Y yo creo que todas las indicaciones apuntan al islam radical, encabezado por Irán como este rey”. En ese tiempo, Irán difícilmente era considerado una amenaza seria fuera de su vecindario inmediato. Pero esta es la nación que el Sr. Flurry dijo que de seguro se convertiría en un poder regional dominante en Oriente Medio, y un bloque de poder en el sur que inevitablemente chocaría con el bloque de poder europeo en el norte liderado por Alemania. Y él ha repetido ese pronóstico docenas de veces por año desde 1993 hasta ahora.
La fuente del pronóstico
¿Por qué el Sr. Flurry pudo prever que el islam radical liderado por Irán dominaría Oriente Medio? ¿Cuáles eran sus fuentes? ¿Por qué fue él tan consistente y tan confiado en ese pronóstico? ¿Y por qué es importante?
El Sr. Flurry obtuvo este pronóstico de la Sagrada Biblia.
Daniel 11:40 dice esto:
“Pero al cabo del tiempo el rey del sur contenderá con él; y el rey del norte se levantará contra él como una tempestad, con carros y gente de a caballo, y muchas naves; y entrará por las tierras, e inundará, y pasará”.
Este es el versículo bíblico clave que describe la existencia de un bloque al norte y un bloque al sur y un enorme choque entre los dos. Daniel escribió este pronóstico en el siglo sexto a. C.—pero dijo que ocurriría en un tiempo muy en el futuro: “el tiempo del fin”. ¿Pero cuándo es el fin? Hay muchas pruebas tangibles de que es el tiempo en que estamos viviendo ahora, ¡y está inmediatamente delante de nosotros!
¿Realmente es posible que esta profecía de 2.500 años describa detalladamente al Irán del siglo xxi? Compare estas Escrituras con lo que realmente ha sucedido en el último par de décadas.
La profecía de Daniel muestra que el provocativo rey del sur va a empujar al rey del norte. El Léxico hebreo-caldeo de Gesenius dice que empujar significa “golpear—usado por animales con cuernos”, o “empujar con los cuernos”. Se “usa figurativamente de un vencedor que postra a las naciones ante él”. También significa “entrar en guerra con alguien”. “¡Empujar es una palabra violenta!”.
En 1998, el Sr. Flurry escribió lo siguiente en un artículo llamado “El rey del sur”:
“El escenario está puesto para que un grupo de naciones islámicas guiadas por Irán, como el profetizado rey del sur, empujará al rey del norte, la Unión Europea. Irán tiene una política exterior con mucho de “empuje”. (…) El objetivo de la principal estrategia de Irán es ser el poder dominante de Oriente Medio. Convertirse en el líder indiscutible del campo del islamismo radical es un paso en esa dirección.
Mirando en Oriente Medio, Irán claramente tiene una política exterior con el mayor empuje.
Irán tiene una larga historia de ser reconocido como el principal Estado patrocinador del terrorismo en el mundo por sucesivos gobiernos de EE UU, como también por las naciones europeas. Irán busca activamente desestabilizar naciones donde hay una significativa población chií. De hecho, cada nación que tiene una considerable presencia chií actualmente está implicada en conflicto.
En el Líbano, Irán tiene un puesto directo en la organización terrorista más grande y mejor equipada en el mundo: Hezbolá. Hezbolá admite fácilmente que su patrocinio y la toma de decisiones vienen de Teherán. Se ha vuelto tan grande y poderosa que domina incluso al gobierno libanés. Desde 2017, la organización tiene más de 150.000 cohetes y misiles a su disposición para ser usados en la próxima guerra contra Israel.
En Siria, el gobierno del dictador Bashar Assad está directamente apoyado por las tropas iraníes de la Fuerza Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica y otros partidarios respaldados por Irán. Irán gastó 100 mil millones de dólares entre 2012 y 2017 para mantener a Assad en el poder. Si no hubiera sido por el apoyo poderoso de Irán, Assad probablemente habría caído del poder hace años atrás, antes de que un estimado de medio millón de personas hubiera muerto.
En Irak, Irán está usando el vacío de poder creado por la retirada de las fuerzas de EE UU, como también la lucha contra el Estado Islámico para incrementar su presencia allí. A finales de 2016, Irán consolidó su control sobre Irak, cuando el parlamento de Bagdad votó a favor de aceptar las Unidades Populares de Movilización (pmu, por sus siglas en inglés) en su fuerza de seguridad nacional. Los 100.000 soldados del pmu sólo le rinden homenaje al gobierno de Bagdad; la mayor parte de la toma de decisiones venía de Irán.
Irán tiene una larga historia de ser reconocido como el principal Estado patrocinador del terrorismo en el mundo por sucesivos gobiernos de EE UU, como también por las naciones europeas.
En Yemen, los hutíes, una secta chií en el noroeste del país, continúan librando una guerra contra el gobierno. Después de que los hutíes capturaron la capital de Yemen a finales de 2014, Irán fue el único que aclamó la victoria. En ese tiempo, Mohammed Sadeq al-Hosseine, consejero del expresidente iraní Mohammad Jatamí, afirmó, “Nosotros en el eje de resistencia somos los nuevos sultanes del Mediterráneo y del Golfo. Nosotros en Teherán, Damasco, el suburbio al sur de Beirut [de Hezbolá], Bagdad y Sanaa daremos forma al mapa de la región. Nosotros somos los nuevos sultanes del Mar Rojo también”.
Además de estas naciones, Irán está buscando activamente desestabilizar Baréin y la parte oriental de Arabia Saudí donde, nuevamente, existen grandes poblaciones chiíes. También busca tender un puente en la división suní-chií al financiar al grupo palestino Hamas, el cual está comprometido con la destrucción de Israel.
El columnista Charles Krauthammer resumió estas ganancias en una entrevista con Fox News: “Ahora, es verdad que los hutíes están contra al Qaeda, pero el verdadero problema es que los hutíes son un cliente de Irán, apoyados por éste y en cierto sentido aconsejados. Y si usted lo vio en el mapa, los saudíes están mirando a los iraníes en el norte, los aliados iraníes—que en esencia es Irak, Siria y el Líbano por un lado y ahora Yemen—al sur y oeste bajo el dominio iraní, y tienen miedo a la muerte. Esa es la razón por la que esto es un doble ataque sobre nosotros. Es la pérdida de un aliado contra al Qaeda, y es una enorme ganancia geopolítica para Irán, extendiendo su influencia sobre los Estados árabes”. Claramente, son las acciones de empuje de Irán las que desestabilizan Oriente Medio.
Es más, la política exterior de empuje de Irán es testimonio de su activa búsqueda de armas nucleares. En el periodo previo a la implementación del tratado nuclear el 16 de enero de 2016 (lo que Gerald Flurry ha llamado el “peor error de la política exterior en la historia de EE UU), Irán fue directo en sus deseos de adquirir armas nucleares. El tan llamado presidente moderado Hasán Rohaní se jactó en 2002, mientras los líderes iraníes les aseguraban a los europeos que no desarrollarían un programa nuclear, que Irán podría instalar en su planta de Isfahan equipos para la conversión de óxido de uranio—una etapa clave en el proceso del combustible nuclear. “Desde el principio, los estadounidenses le dijeron a los europeos, ‘los iraníes están mintiendo y engañándolos y no les han dicho todo’. Los europeos acostumbraban responder,
‘Confiamos en ellos’”, dijo Rohaní. Junto con un sinfín de otras evidencias, este tipo de subversión muestra que Irán aún busca adquirir armas nucleares. Mientras el terrorismo como las armas nucleares forman parte de esa política exterior de empuje, la Trompeta también observa dos actos de empuje más específicos de Irán para desencadenar el choque de civilizaciones.
La estrategia del Mar Rojo de Irán
La Trompeta ha notado que el empuje de Irán probablemente vendrá en parte de que haya ganado el control del corredor del Mar Rojo, y así la habilidad de cortar el flujo de petróleo y otros valiosos productos básicos hacia Europa.
Esta estrategia salió a la luz primero en 2011, justo antes de la ola de la “Primavera Árabe” del islam radical expandiéndose por todo el norte de África, derribando gobiernos en Libia, Egipto y Yemen. En ese tiempo, en su artículo “Libia y Etiopía revelan la estrategia militar de Irán”, Gerald Flurry mostró cómo el interés de Irán de formar una alianza con, o incluso controlando a Libia y Etiopía (como también a Egipto y Túnez) derivaría en su deseo de tener poder sobre la crucial ruta comercial que une al Mediterráneo con el Mar Rojo.
Controlar el Canal de Suez no es suficiente. Egipto trató eso en 1956, cuando Gran Bretaña, Francia e Israel lo echaron en un ataque. Pero ¿qué sucede cuando se tiene a naciones islámicas radicales junto a esta ruta marítima comercial con real poder aéreo—incluyendo misiles?
Eso le daría a Irán un control virtual del comercio a través de esos mares. ¡El islam radical podría detener el flujo de petróleo esencial hacia EE UU y Europa!
Irán ya domina el Golfo Pérsico. Ahora está trabajando para apoderarse del Mar Rojo. Usted puede ver que es así por lo involucrado que está en Yemen, la fuerte influencia que ha ganado en Somalia y la antigua relación que ha tenido con Sudán. Esta profecía bíblica revela que obtendrá el control de Etiopía y de Egipto, el cual controla el Canal de Suez, la entrada al Mar Mediterráneo.
El Sr. Flurry ha señalado en reiteradas ocasiones a Daniel 11 para explicar esta tendencia. Él escribió en la Trompeta de julio de 2016 (versión en inglés):
“Extenderá su mano contra las tierras, y no escapará el país de Egipto” (versículo 42). Como hemos dicho por 20 años, esto indica que Egipto se unirá en una alianza con Irán. Pero fíjese quién más estará en esa alianza.
“Y se apoderará [el rey del norte] de los tesoros de oro y plata, y de todas las cosas preciosas de Egipto; y los de Libia y de Etiopía le seguirán”. “Le seguirán” significa que ellos unirán sus ejércitos o estarán bajo su autoridad. ¿Por qué Libia y Etiopía estarían subyugados así por el rey del norte? Porque ellos también estaban aliados con el rey del sur.
Conecte los puntos en el mapa, y usted puede ver que Irán busca controlar las más grandes rutas comerciales del mundo, lo que le dará influencia para empujar poderosamente contra Europa.
Sin embargo, la historia y la profecía indican que hay otra y más poderosa razón para el choque entre estos reyes: Ambos quieren Jerusalén.
El empuje sobre Jerusalén
Aun cuando la nación judía de Israel la controla en la actualidad, tanto musulmanes como católicos tienen planes para la Ciudad Santa.
El deseo de Irán por Jerusalén es manifiestamente obvio. En 1997, Irán llevó a cabo importantes maniobras militares con el nombre en código “Camino a Jerusalén” en el cual participaron al menos 150.000 soldados (algunos informes dicen que incluso fue medio millón). Numerosos misiles iraníes, especialmente los últimos modelos, tienen la inscripción “muerte a Israel”. Irán ha financiado a Hamas, la organización terrorista con sede en Gaza que ha jurado destruir a Israel y ha comenzado al menos tres guerras en búsqueda de ese objetivo.
Irán también controla a Hezbolá en el sur del Líbano. Desde 2017 Hezbolá tiene 150.000 misiles en stock listos para ser disparados hacia el sur. Irán también sostiene a la Conferencia Internacional en Apoyo de la intifada Palestina. En 2017, sostuvo la sexta conferencia, la que promueve explícitamente la intifada, destinada a terminar con la existencia misma de Israel. Los tres hombres más poderosos de Irán, el ayatolá, el vocero de la cámara y el presidente, todos dieron discursos haciendo un llamado a la destrucción de Israel.
Al apoyar a estas organizaciones terroristas, Irán está buscando establecerse en Jerusalén.
Sin embargo, ¡el rey del norte considerará los actos de Irán en Jerusalén como otra provocación! Como escribió Gerald Flurry en 2011,
“Creo que Jerusalén es más importante para Irán de lo que es el petróleo. El pueblo islámico ha luchado en las Cruzadas Católicas por cerca de 1.500 años por el control de Jerusalén. La profecía bíblica dice que está a punto de estallar una última cruzada”.
¡La conquista de Jerusalén por parte de Irán podría galvanizar súbitamente a todo el mundo islámico! Podría difundir la influencia musulmana radical a muchos países fuera de Oriente Medio…
El próximo Sacro Imperio Romano—una superpotencia con 10 reyes, dominada por el catolicismo y guiada por una Alemania más engañosa y agresiva que nunca—se da cuenta que el fervor árabe se podría extender como un reguero de pólvora. Muchos católicos consideran a Jerusalén su sitio religioso más importante.
Este pronóstico se nutre de varias profecías, incluyendo la afirmación de Daniel 11:42 que dice que este imperio “entrará a la tierra gloriosa”—refiriéndose al área que rodea a Jerusalén. En Daniel 12:11 el profeta se refiere a este mismo poder como “la abominación desoladora”, que Jesucristo Mismo dijo que hablaba de los ejércitos de esta potencia europea rodeando la Ciudad Santa (Marcos 13:14; Lucas 21:20).
El rey del norte simplemente no soportará una toma de posesión islámica de Jerusalén.
El ataque de torbellino [relámpago]
Daniel 11:40 revela que mientras los iraníes empujan su propia agenda—teniendo más y más confianza por la debilidad e inacción de otras naciones—¡serán sorprendidos por un ataque relámpago que los hará desaparecer!
Basada en esta profecía, la Trompeta ha predicho por 25 años que Irán y sus aliados islámicos radicales van a ser conquistados. ¡La Biblia incluso le dice cómo ocurrirá esto! Daniel 11:40 habla de una “tempestad”. Esta sola palabra expone cómo se desarrollará este choque con Irán. Revela en detalle lo que está a punto de pasar en Oriente Medio—y en África, el sudeste de Asia y Europa.
Daniel 11:40 describe cómo el rey del sur será invadido violentamente por el “rey del norte”. “Pero al cabo del tiempo”—nuevamente, el tiempo inmediatamente adelante—“el rey del sur contendrá con él: y el rey del norte se levantará contra él como una tempestad, con carros y gente de a caballo, y muchas naves; y entrará por las tierras, e inundará, y pasará”.
Esta profecía describe a Alemania y un resucitado e iterativo [que se repite] Sacro Imperio Romano del siglo xxi. Los alemanes son excelentes estrategas y guerreros. Ellos comprenden muy bien que nunca van a tener paz con Irán. Saben que tarde o temprano, sus dos religiones—sus dos civilizaciones—chocarán.
Esta Escritura describe un tiempo cuando el imperio católico de Alemania librará una guerra sin cuartel, arrojando todo lo que tiene al islam radical—¡y dominándolo como una inundación violenta!
¿Cómo podría Alemania hacer esto tan fácil, efectiva y rápidamente?
Tal ofensiva devastadora no podría ser convocada de la noche a la mañana. Piense en la palabra clave en Daniel 11:40. El versículo habla sobre un ataque del rey del norte, pero enfatiza en la estrategia de este ataque militar.
Si usted está en una tempestad [torbellino], todo gira alrededor suyo. ¡Le da vueltas! Mire el mapa y podrá ver la estrategia alemana: rodear a Irán y sus aliados.
Un cuidadoso estudio de la actividad militar de Alemania muestra que ya se posicionó para llevar a cabo justamente un ataque así en el futuro. Gerald Flurry ha escrito un folleto explicando esto y que usted puede leer en línea: La estrategia secreta de Alemania para destruir a Irán.
Los iraníes están tan enfocados en conquistar sus propios objetivos que no ven lo que Alemania está haciendo. ¡No reconocen cómo Alemania está haciendo planes para la guerra más grande por venir! Alemania ha esperado chocar con Irán, y ha estado trabajando en una estrategia por una década o más. Esa estrategia ya casi está completa. Alemania ha rodeado a Irán.
¡Daniel 11:40 está listo para ser cumplido en sus etapas iniciales! ¡Irán y sus aliados islámicos están atrapados dentro de una tempestad!
El fin profetizado
El gigantesco choque que la Trompeta está esperando, en cumplimiento de estas profecías bíblicas, todo comienza con este agresivo Irán.
Esta es la misma nación que está a punto de conseguir la bomba nuclear. Los líderes iraníes y muchas otras personas creen que el 12avo imán—su versión del Mesías—está a punto de regresar. Ellos creen que su regreso puede ser acelerado al crear violencia y caos. Varias naciones tienen armas nucleares—¡pero sólo Irán tiene líderes que albergan ese peligroso pensamiento religioso! ¿Qué va a pasar cuando consigan la capacidad nuclear? ¿Qué clase de caos provocarán si piensan que esto va hacer que su mesías vuelva? ¡En la esclavitud del fanatismo religioso, ni siquiera se preocupan de su propia destrucción!
La Biblia revela que finalmente, después de ser empujado demasiado lejos, el poder europeo liderado por Alemania le hará frente al rey del sur.
¿Pero quién va a hacerle frente a Irán? Si nadie va a hacerle frente hoy, cuándo aún no tiene bombas nucleares, ¿quién va a hacerle frente cuando realmente las tenga?
Sin embargo, el choque entre el rey del norte y el rey del sur tiene una maravillosa conclusión.
Siguiendo la profecía de Daniel 11 al capítulo 12, lo cual es parte de la misma visión, vemos que este choque llevará a la catastrófica guerra mundial—“un tiempo de angustia, cual nunca fue desde que hubo gente hasta entonces” (versículo 1). Muchas otras profecías hablan sobre este periodo. Jesucristo lo describió como la “gran tribulación” (Mateo 24:21). Esta es la dramática culminación de esta era del hombre. Una vez que haya terminado, Dios comenzará a intervenir en los asuntos mundiales de una manera poderosa.
Daniel 12:11 menciona un evento hacia el comienzo de esa “gran tribulación”, cuando “la abominación desoladora [sea establecida]”. Cristo se refirió a esta declaración de Daniel en Su famosa profecía del Monte de los Olivos (Mateo 24:15; Marcos 13:14). Él reveló que esta “abominación” en realidad es “Jerusalén rodeada de ejércitos”—¡ejércitos que están a punto de destruir la Ciudad Santa! (Lucas 21:20). Al poner todas estas profecías juntas muestra que éstos son los ejércitos europeos del rey del norte después de haber conquistado al rey del sur.
Y fíjese en la conclusión de Daniel 12:11: Desde el tiempo en que estos ejércitos son establecidos, “habrá mil doscientos noventa días”.
¡Piense al respecto! ¡Esta profecía revela que estamos llegando a un tiempo en que usted puede comenzar a contar los días hasta la Segunda Venida de Jesucristo!
Y todo comienza con un empuje. ▪
IRÁN IRÁ A LA GUERRA—PERO NO CON ESTADOS UNIDOS
La Trompeta ha observado a Irán por más de 25 años. Proyectó el agresivo ascenso de su política exterior impulsada por el terror. Hoy, el mundo ha comenzado a reconocer que Irán se está convirtiendo en lo que la Trompeta predijo en 1992: el “rey del sur”. Pero los analistas aún no se dan cuenta de lo que depara el futuro de Irán: Su agresiva política exterior explotará en guerra—¡no con EE UU, sino con una nueva superpotencia!
¿Por qué Irán ha surgido con tanto poder? ¿Por qué EE UU no lo enfrenta? ¿Y quién es esta nueva superpotencia? La Trompeta no tiene una visión especial de las respuestas, excepto por su única “fuente interna”. Esa fuente es la Sagrada Biblia. Descubra cómo la Biblia identifica a Irán y lo que predice para su futuro. Solicite el revelador folleto de Gerald Flurry, El rey del sur.