Inundaciones repentinas en el noreste de EE UU
Los aguaceros torrenciales que cayeron en el noreste de Estados Unidos el 10 de julio desataron inundaciones repentinas que arrasaron carreteras, pusieron a 13 millones de estadounidenses bajo vigilancia por inundaciones y causaron la muerte de una persona. Nueva York y Vermont fueron los más afectados, pero también lo fueron Maine, Massachusetts, Nuevo Hampshire, Nueva Jersey y Pensilvania. Según AccuWeather Inc., las inundaciones generalizadas causarán probablemente entre 3.000 y 5.000 millones de dólares en daños directos por tormentas, además de otras pérdidas económicas.
Vermont officials are calling the flooding the worst since Hurricane Irene reached the US state as a tropical storm in 2011 https://t.co/q15BSNw7vn pic.twitter.com/eJaAoRqDyH
— Reuters (@Reuters) July 11, 2023
Clima extremo: La gobernadora de Nueva York, Kathleen Hochul, declaró el estado de emergencia y calificó las inundaciones de “fenómeno meteorológico de 1 en 1.000 años”. Sin embargo, mientras el noreste se inunda, el medio oeste sufre su peor sequía en una década. Las precipitaciones por debajo del promedio amenazan las cosechas de maíz y soja recién sembradas en el Medio Oeste, mientras que las lluvias arrasan las carreteras en el Noreste.
Maldiciones divinas: el profeta Amós predijo que Dios castigaría al Israel del tiempo del fin (Estados Unidos, Gran Bretaña y la nación judía de Oriente Medio) haciendo que lloviera sobre algunas ciudades y no sobre otras (Amós 4:7). Estados Unidos está sufriendo hoy mientras el maíz se marchita y las carreteras son arrasadas.
Más información: lea “Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía”.