Intimidación

Una de las principales causas que ha llevado a Estados Unidos, Gran Bretaña y Canadá a volverse en contra Israel es la migración masiva.

“Del río al mar” se ha convertido en un estribillo común en todo el mundo. Es una llamada al genocidio judío, eliminando a todos los judíos desde el río Jordán hasta el mar Mediterráneo. El 21 de febrero, el eslogan se proyectó en el monumento más famoso de Gran Bretaña: la Torre Elizabeth, donde se encuentra Big Ben. La policía ignoró la ley que prohíbe proyectar mensajes en cualquier edificio del Parlamento sin permiso previo. Los activistas corearon eslóganes a favor de Hamás afuera del Parlamento esa tarde y toda la noche.

Adentro, los miembros del Parlamento debatían si pedir un alto el fuego en Gaza. La moción acusaba a Israel de “castigo colectivo al pueblo palestino”. Pero en una ruptura total con los precedentes, esa moción nunca se presentó ante el Parlamento. En su lugar, sólo se presentaron versiones enmendadas de la moción.

La idea de que Israel está llevando a cabo un castigo colectivo en Gaza es una mentira peligrosa, y una que el Partido Laborista, que se está recuperando de una merecida reputación de antisemitismo, no quería respaldar. Pero tampoco quiso votar en contra del cese al fuego. El líder laborista Sir Keir Starmer visitó el despacho del presidente de la Cámara para implorarle que rompiera las reglas, temiendo por la seguridad de sus diputados. El presidente de la Cámara, Lindsay Hoyle, cedió y sólo presentó una versión enmendada que los laboristas pudieron respaldar. Las normas parlamentarias se dejaron de lado por miedo a una turba enfurecida.

El 15 de octubre de 2021, el diputado conservador Sir David Amess fue asesinado por un musulmán radical, en parte porque apoyaba a Israel. “Tampoco quiero otro ataque en esta casa”, dijo Hoyle. “Yo estaba en la silla ese día. He visto, he presenciado… no compartiré los detalles, pero los detalles de las cosas que me han contado son absolutamente aterradores”.

Se ha advertido a los diputados que no lleven puestos sus cordones de identificación fuera del Parlamento para que no sean blanco de ataques. El director de la protesta de esa noche instó a los manifestantes a “aumentar la presión” sobre los diputados y dijo que quería que “el Parlamento tuviera que cerrar sus puertas”.

No sólo la violencia y la intimidación han impulsado el pro-Hamás. También los números. Gran Bretaña celebró elecciones locales el 2 de mayo. Normalmente las campañas se centran en la recogida de basuras o en la calidad del servicio local de autobuses. Esta vez “Palestina libre” se convirtió en un eslogan habitual de campaña. Más de 40 de los 2.600 concejales fueron elegidos con una plataforma propalestina. Uno gritó: “Alzaremos la voz de Palestina. Allahu Akbar!”.

Este tipo de intimidación también ha contribuido a empujar a Canadá hacia el campo antiisraelí. En febrero, la ministra de educación postsecundaria de la Columbia Británica, Selina Robinson, se vio obligada a abandonar su cargo después de que manifestantes propalestinos interrumpieran un retiro del Nuevo Partido Demócrata. Su delito: ser judía y hacer comentarios de apoyo a Israel.

Al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, le gusta hacer viajes a las mezquitas. Sin embargo, el Consejo Nacional de Musulmanes Canadienses dijo a los diputados canadienses que no serían bienvenidos a ninguna reunión musulmana este Ramadán a menos que condenaran públicamente a las Fuerzas de Defensa de Israel por “crímenes de guerra”, pidieran un cese al fuego inmediato y reanudaran la financiación del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Palestinos (unwra, por sus siglas en inglés). Más de 300 mezquitas y otras instituciones musulmanas firmaron la carta. Poco después, se reanudó la financiación de la unwra.

Las opiniones islámicas sobre Israel también se dejan sentir en EE UU. Michigan tiene la mayor concentración de musulmanes del país. Aquí, 100.000 eligieron “no comprometidos” [es decir, sin alineación con un candidato] en las primarias demócratas. En la única ciudad de mayoría árabe de EE UU (Dearborn, Michigan) los “no comprometidos” ganaron con una mayoría aplastante. Una encuesta a pie de urna reveló que el 90% de los musulmanes en las primarias votaron “no comprometido”. Joe Biden no ha sido amigo de Israel, pero los votantes musulmanes exigen que vaya mucho más lejos.

En Deuteronomio 28, Dios describe las bendiciones que recibirán las naciones de Israel si le obedecen, y las maldiciones que sufrirán si no lo hacen. Esta profecía es para nosotros… y no estamos obedeciendo a Dios. El versículo 43 advierte: “El extranjero que estará en medio de ti se elevará sobre ti muy alto, y tú descenderás muy abajo”. Gran Bretaña y Canadá están viviendo esta maldición. Los “extranjeros” han anulado las normas parlamentarias y marcan el rumbo de estos países.