
Informe: Cinco señales de que China está acelerando sus planes para invadir Taiwán
Ahora hay cinco indicios evidentes de que China se prepara para conquistar Taiwán, escribió el Telegraph el 22 de enero.
Las cinco señales son:
1. Guerra en la zona gris: China ha intensificado la guerra en la zona gris en el estrecho de Taiwán a un nivel notable. Esto se ejemplifica mejor en las casi constantes incursiones de aviones de guerra en la zona de identificación de defensa aérea de Taiwán: más de 3.000 el año pasado. Estas tienen como objetivo agotar a la fuerza aérea de Taiwán sin escalar a un combate abierto. Estas maniobras son costosas y extremadamente gravosas para el ejército mucho más pequeño de Taiwán.
2. Tácticas coercitivas: los simulacros militares a gran escala de China cerca de Taiwán, con poca fanfarria, tienen como objetivo normalizar su presencia militar allí y señalar a Taiwán y al mundo que China tiene la capacidad de atacar en cualquier momento.
3. Retrasos en la integración de armas de Taiwán: los retrasos en la integración de los sistemas de armas de Taiwán con los de su principal socio de seguridad, Estados Unidos, dejan una ventana abierta para un ataque chino. Los chinos saben que deben atacar pronto antes de que tales mejoras hagan que cualquier conflicto sea más difícil y costoso para Pekín.
4. Campañas de propaganda: los esfuerzos de desinformación de China aumentaron el año pasado, con casi 2,2 millones de artículos enviados a los consumidores taiwaneses en plataformas como Facebook, TikTok y X. El mensaje incesante es que el sistema de China es superior, resistir a China es inútil, y no se puede contar con EE UU para ayudar a Taiwán.
5. Diplomacia hacia Trump: algunos analistas sugieren que el Secretario General Chino, Xi Jinping, podría intentar explotar la mentalidad transaccional del presidente de EE UU, Donald Trump, y sus dudas sobre las alianzas estadounidenses para alcanzar un acuerdo en el que Trump le dé a Xi permiso para tomar Taiwán.
En conjunto, estos factores destacan la creciente tensión en el estrecho de Taiwán, mostrando que la región podría pronto convertirse en el próximo gran punto de tensión mundial.
La Trompeta dijo: en 1998, después de que Bill Clinton se convirtiera en el primer presidente estadounidense en ceder a la presión china y emitir una declaración oponiéndose a la independencia de Taiwán, el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, dijo que eso significaba que los días de libertad de Taiwán estaban contados. Él escribió:
Los líderes chinos presionaron al presidente y a EE UU para hablar ante el mundo entero en contra de nuestros amigos amantes de la libertad. (…)
El pueblo de Taiwán teme por su futuro. Se sienten traicionados. (…)
Una vez más, EE UU ha mostrado su voluntad quebrantada al mundo entero. (…)
¿Cómo puede alguien no ver que Taiwán está destinado a convertirse en parte de China continental? Estos [24 millones] de personas van a ser forzadas a adoptar el molde chino; y va a ocurrir por una razón: por culpa de un EE UU lamentablemente débil de voluntad.
¿Realmente significa tan poco la libertad para nosotros?
La opinión del Sr. Flurry sobre la débil voluntad de EE UU, y cómo influirá en la dinámica China-Taiwán, está basada en la profecía bíblica. Levítico 26 registra a Dios advirtiendo a los descendientes de Israel —principalmente a los modernos EE UU y Gran Bretaña— que si se negaran a volverse a Él, entonces Él quebrantaría la soberbia de su orgullo (versículo 19).