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Hezbolá tiene los días contados

GETTY IMAGES

Hezbolá tiene los días contados

¿Qué pasará con el Líbano ahora?

Se han quitado los guantes. Después de lidiar casi un año con los constantes bombardeos de Hezbolá en el norte, lo que obligó a 60.000 israelíes a evacuar al sur como refugiados, y después de meses de amenazar con entrar en el Líbano y acabar con Hezbolá de una vez por todas, Israel finalmente actuó… y actuó rápido. En poco tiempo, Israel anuló la mayor parte de la amenaza que representaba lo que algunos analistas consideran el ejército no soberano más fuertemente armado del mundo. Hezbolá, el subsidiario favorito de Irán, no tardó en dar marcha atrás en aras de su propia supervivencia.

En las próximas semanas y meses, Israel puede dar al Líbano su mayor giro geopolítico en décadas y expulsarlo de una vez por todas del país.

Decapitando a Hezbolá

El secretario general de Hezbolá, Hasán Nasralá, anticipó la guerra con Israel. Para evitar que los mensajes internos fueran interceptados por los israelíes, ordenó a los miembros de Hezbolá que abandonaran los teléfonos inteligentes y utilizaran alternativas de menor tecnología, como localizadores, que son más difíciles de interceptar. Pero Israel se adelantó a Nasralá e infiltró de algún modo la línea de suministro de esos dispositivos: agentes israelíes pusieron una sustancia explosiva en las baterías de estos buscapersonas. Algunos informes sugieren que para lograrlo, pudo haber tomado años de planificación e incluso el uso de muchas empresas de fachada.

El 17 de septiembre, miles de esos localizadores explotaron, hiriendo a más de 2.700 personas y matando al menos a 12. Y al día siguiente, la explosión de walkie-talkies causó al menos 450 heridos y 27 muertos.




Esto hizo que Hezbolá entrara en pánico. Si algo aparentemente tan insignificante como un cargamento de localizadores puede ser infiltrado por el Mossad de Israel y ser usado como arma, ¿qué más ha usado el Mossad para implantar sus explosivos? Si los miembros de Hezbolá no pueden utilizar ni siquiera estas tecnologías, ¿cómo pueden comunicarse?

El 20 de septiembre, los líderes de la Fuerza Radwan (unidad de operaciones especiales de Hezbolá), sostuvieron una reunión en Beirut, a la que asistió Ibrahim Aqil, jefe de la fuerza. Israel aprovechó la oportunidad de dar un paso más adelante. Tras descubrir el lugar y la hora de la reunión, aviones de combate israelíes bombardearon el edificio matando a Aqil y a otros nueve líderes de la Fuerza Radwan.

El 25 de septiembre, Israel lanzó ataques preventivos contra lugares de almacenamiento de cohetes y misiles (algunos de los cuales se encontraban en viviendas civiles), así como contra sitios de lanzamiento. Las Fuerzas de Defensa de Israel (fdi) declararon haber destruido más de 2.000 objetivos, incluidos casi 70 centros de inteligencia. Se calcula que los ataques han destruido casi la mitad del arsenal de Hezbolá, compuesto por unos 150.000 proyectiles.

Nasralá juró represalias. Pero no viviría para verlo.

El 27 de septiembre, cuando muchos altos líderes de Hezbolá ya se habían marchado, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pronunció un discurso ante las Naciones Unidas en Nueva York.

“Tengo un mensaje para los tiranos de Teherán”, dijo Netanyahu en su discurso. “Si nos atacan, los atacaremos. No hay lugar en Irán que el largo brazo de Israel no pueda alcanzar. Y esa verdad se extiende a todo Oriente Medio”.

Resultó que el discurso de Netanyahu en Nueva York era una cortina de humo para dar a Nasralá una falsa sensación de seguridad. Al parecer, el líder de Hezbolá estaba viendo el discurso por televisión en el búnker del cuartel general de Hezbolá cuando los aviones de guerra israelíes lanzaron bombas contra el búnker. La amenaza de Netanyahu pudo haber sido lo último que vio Hasán Nasralá.

El 30 de septiembre, los soldados israelíes entraron al Líbano en incursiones a pequeña escala para recabar información para la ofensiva principal. Al día siguiente, las fdi iniciaron la Operación Flechas del Norte y comenzaron la invasión terrestre. Describieron la operación como “incursiones limitadas, localizadas y selectivas” a lo largo de la región fronteriza. El objetivo inmediato: neutralizar objetivos que supongan “una amenaza inmediata” para el norte de Israel.

Israel ha dado a entender que la Operación Flechas del Norte se enfoca en destruir la infraestructura de Hezbolá que amenaza directa e inmediatamente el norte de Israel. Pero Israel ha eliminado casi toda la estructura de mando de Hezbolá, incluido Nasralá. Y ha desbaratado las redes de comunicaciones de Hezbolá hasta el punto de que el grupo terrorista teme utilizar tecnología rudimentaria. ¿Qué puede impedir que las fdi marchen a Beirut y desarraiguen a Hezbolá para siempre?

Irán se mantiene al margen

El gran obstáculo es Irán, el patrocinador de Hezbolá. Pero Irán parece estar dando largas al asunto. El líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, ha dicho que será Hezbolá, y no Irán, quien se vengue.

Según funcionarios iraníes que hablaron con el New York Times, “el ayatolá Jamenei había quedado profundamente conmocionado por la muerte de su amigo y estaba de luto, pero ha adoptado una postura tranquila y pragmática”. Su anuncio de que Hezbolá tomaría represalias en lugar del propio Irán “fue una señal sorprendente, según algunos analistas, de que el ayatolá Jamenei podría no tener forma de responder eficazmente por el momento a la embestida de Israel contra sus aliados. Enfrentándose a la elección entre una guerra total con Israel o mantenerse al margen en aras de la autopreservación, parece estar optando por lo segundo”.

El ex vicepresidente iraní Mohammad Ali Abtahi declaró a los medios iraníes: “Ha sido un golpe increíblemente duro y, siendo realistas, no tenemos un camino claro para recuperarnos de esta pérdida. No entraremos en guerra, eso está descartado. Pero Irán tampoco dará marcha atrás en el apoyo a los grupos militantes de la región, ni en la disminución de las tensiones con Occidente. Se puede continuar con todas estas cosas al mismo tiempo”.

Inmediatamente después del asesinato de Nasralá (que siguió al asesinato del líder de Hamás, Ismail Haniyeh, en julio) Jamenei se escondió en un refugio. Al parecer, el régimen iraní sabe que su líder supremo podría ser el próximo objetivo, y no confían en poder protegerlo sin tomar medidas drásticas.

Irán lanzó casi 200 misiles balísticos contra Israel el 1 de octubre para vengar a Nasralá y Hezbolá. Pero fueron menos que los más de 300 proyectiles que envió a Israel en abril para vengar el asesinato de un general iraní. Nasralá era una figura mucho más importante que el general, por lo que la cantidad de misiles utilizados en el ataque del 1 de octubre y sabiendo que los sistemas de defensa antimisiles israelíes interceptarían muchos de ellos, sugiere falta de entusiasmo por parte de Irán.

Queda mucho por ver, pero lo que se deduce es que, al menos al momento de escribir estas líneas, los iraníes quieren básicamente no participar en esta lucha.

Hezbolá no tiene líder. Sus comunicaciones están destruidas. Irán ha anunciado que no se unirá directamente a la lucha. Israel está preparado para adentrarse en el Líbano y terminar el trabajo.

Hezbolá se enfrenta a la tormenta perfecta que podría causar su perdición.

Se profetiza un cambio regional

Oriente Medio es una región infamemente volátil. Cuando usted lea esto, la situación en el terreno podría ser muy diferente. Sin embargo, hay tendencias generales a las que la Trompeta pone atención. La profecía bíblica informa las expectativas del equipo de la Trompeta.

El Salmo 83 es una profecía de un grupo de naciones de Oriente Medio que hacen una alianza con Alemania y la Unión Europea. El versículo 7 menciona Gebal y Tiro, ciudades que todavía existen hoy en el Líbano. Por ello es que esperamos que el Líbano se alíe con Europa. Daniel 11:40 describe una Europa liderada por Alemania, bajo el nombre profético de “el rey del norte”, yendo a la guerra contra Irán y sus aliados (“el rey del sur”). Tenemos artículos en nuestro sitio web que explican ambas profecías en detalle (laTrompeta.es/1/vjkx0 y laTrompeta.es/1/khznk).

Daniel 11:41 dice que esta lucha será por la “tierra gloriosa” (la tierra de Israel actual). Irán no renunciará a su objetivo de aniquilar a Israel. Los versículos 42 y 43 revelan detalles interesantes, dando una lista de los aliados de Irán contra Europa, incluyendo a Egipto, Libia y Etiopía.

Todas estas naciones están al sur y al oeste de Israel. No es ahí donde Irán está enfocando su atención en estos momentos. Libia y Etiopía son desastres disfuncionales, y Egipto tiene un tratado de paz con Israel. Hasta ahora, el principal punto de ataque de Irán contra Israel ha sido el norte, a través del Líbano, así como a través de Siria. (El Salmo 83:6 también menciona a Siria, bajo el nombre de su antigua población, los agarenos, como aliada de Alemania).

Pero para cuando el Salmo 83 y Daniel 11 comiencen a cumplirse, Irán apenas tendrá presencia en el norte y habrá cambiado su enfoque hacia el sur de Israel. Algo hará que Irán cambie de estrategia.

Siria y el Líbano son parte del bloque iraní en este momento. Pero la profecía bíblica dice que se aliarán con Alemania contra Irán. “Perder a Siria será devastador para Irán”, escribió el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, en la edición de agosto. “Podría muy bien ser parte de la razón para que Irán arremeta violentamente contra Europa. Aún no conocemos todos los detalles, pero debemos seguir de cerca esta profecía bíblica clave” (laTrompeta.es/1/fqy4h). También escribió en la edición de octubre de 2020: “El Salmo 83 (…) predice que Hezbolá perdería gran parte de su poder, que Irán perdería su control sobre el Líbano, y que esta nación, en cambio, se alinearía con Arabia Saudí y otros Estados árabes moderados, junto con la Europa liderada por Alemania” (laTrompeta.es/1/wg45v).

Daniel 11:41 especifica que el rey del norte “entrará a la tierra gloriosa”. “Ellos ‘entrarán’ en la tierra gloriosa, o la Tierra Santa”, escribe el Sr. Flurry en su libro El rey del sur. “El hebreo indica que esta es una entrada pacífica, no forzada. Los judíos parecen invitarlos como pacificadores. (…) Después que la guerra explote en Oriente Medio, probablemente habrá un poderoso clamor por un pacificador en Jerusalén”.

A estas alturas, Alemania será la potencia que respalde al Líbano y Siria. La implicación es que Israel ya no ve al Líbano y Siria como amenazas. ¿Podría deberse a que Israel participará en la instalación de los nuevos gobiernos de esos países? ¿O porque cree que un aliado europeo tiene la situación bajo control?

Al juntar estas profecías, esperamos que el Líbano deje el dominio de Irán. Lo más probable es que Hezbolá, el perro faldero de Teherán, se vea obligado a abandonar el poder. Hezbolá nunca ha sido tan vulnerable como ahora.

Ya sean los israelíes, los europeos, la oposición libanesa u otros los que hagan los primeros disparos, una cosa está clara: los días del control iraní sobre Líbano están contados.

EL REY DEL SUR

El profeta Daniel escribió acerca de una futura confrontación entre el rey de norte y el rey del sur. ¡Estamos ahora en el tiempo donde estos dos importantes poderes están rápidamente levantándose! El rey del sur está provocando problemas incluso hoy. ¡Es crítico que usted sepa la identidad de este poder profetizado!