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¿Frenó el poder diplomático alemán la guerra de Oriente Medio?
Durante la visita del presidente turco Recep Tayyip Erdoğan a Alemania el 17 de noviembre, el canciller alemán Olaf Scholz afirmó que Turquía y Alemania comparten el temor de una “conflagración” más amplia en Oriente Medio. Erdoğan dijo: “Si podemos establecer un cese al fuego humanitario junto con Alemania, tendremos la oportunidad de salvar a la región de este anillo de fuego”. En casi todas las reuniones entre Alemania y Turquía o los países árabes se ha utilizado un lenguaje similar.
La reciente “pausa humanitaria” puede haber sido un arreglo entre Alemania, Israel y los países de Oriente Medio.
Alemania ha estado negociando un acuerdo con los países de Oriente Medio para garantizar que el conflicto no se agrave; hay indicios de que han tenido éxito. En un reciente programa de La Llave de David, el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, planteó exactamente este argumento, diciendo:
El principal subsidiario terrorista que tiene Irán es Hezbolá en Líbano. Ahora, el general Hasson Nasrallah dijo recientemente que si Israel atacaba Gaza, habría un ataque total por parte de Hezbolá, sobre todo Israel. El 3 de noviembre iba a pronunciar un discurso y todo el mundo esperaba que hablara de la guerra que iba a declarar a Israel, pero no mencionó ese tema. Él no lo dijo específicamente en absoluto. Y la pregunta y el desconcierto de muchos es: ¿Por qué no? ¿Por qué no siguió adelante y dijo lo que había dicho antes?
El Sr. Flurry propuso que Alemania ha trabajado con las naciones árabes para evitar una escalada de la guerra. Existen pruebas al respecto.
Tras el ataque de Hamás a Israel, Scholz dijo el 12 de octubre: “Hezbolá no debe intervenir en los combates”. Se trata de un objetivo ambicioso, pero el canciller alemán, el ministro de Defensa y el ministro de Asuntos Exteriores han estado ocupados en Oriente Medio para garantizar precisamente eso. “En la guerra terrorista de Hamás contra Israel, el gobierno alemán es uno de los negociadores más importantes detrás del escenario”, concluía Bild el 20 de octubre.
El rey Abdullah ii de Jordania declaró tras una reunión el 17 de octubre con Scholz en Berlín: “Toda la región está al borde de caer en el abismo al que nos empuja este nuevo ciclo de muerte y destrucción. La amenaza de que esta guerra se expanda es real”.
Después de esa reunión, Scholz dijo: “Advierto expresamente a Hezbolá y a Irán que no intervengan en el conflicto”.
A la vuelta de su viaje a Oriente Medio el 19 de octubre, dijo:
También aproveché el viaje y mis conversaciones —con el rey de Jordania, los presidentes egipcio y turco y el emir de Qatar, entre otros— para abogar para que este conflicto no siga escalando regionalmente. Todos estamos de acuerdo en que tal conflagración sería devastadora para toda la región.
Tras reunirse con dirigentes árabes en Egipto el 21 de octubre, la ministra alemana de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock, dijo: “Todos sabemos que nuestros puntos de vista sobre el conflicto difieren. Sin embargo, a todos nos une el hecho de que hay que evitar una conflagración”.
No hay que subestimar el poder negociador de Alemania.
A diferencia de la mayoría de los países árabes, Alemania también mantiene buenas relaciones con Israel. Scholz señaló: “Alemania es muy apreciada en Israel. Nos vemos como un país que se siente muy responsable de que la seguridad de Israel siga estando garantizada. Eso se entiende en Israel. Y sí, Alemania también es muy respetada por muchos otros gobiernos de aquí. Si ese es el caso, entonces deberíamos tomar ventaja de ello”.
El 12 de noviembre, Scholz dijo que los llamados a un cese al fuego inmediato en Oriente Medio equivalen a pedir “que Israel permita a Hamás recuperarse y obtener nuevos misiles”. En su lugar, sugirió “pausas humanitarias”, que Israel y sus vecinos árabes aceptaron.
La creciente influencia de Alemania en Oriente Medio es algo que la Trompeta ha esperado durante mucho tiempo. En su folleto El rey del sur, el Sr. Flurry explica que Alemania liderará una alianza que incluirá a Turquía y a varias naciones árabes moderadas, tal y como se profetiza en el Salmo 83. En el capítulo 4, “Otra alianza más misteriosa” [de la edición de 2023; disponible en inglés], escribe:
La profecía que estudiaremos enumera varias naciones islámicas que se unirán con “el rey del norte”, ¡la Europa dirigida por Alemania! Esta alianza nunca ha ocurrido en la historia. Todos los comentarios bíblicos dirán eso. Pero estas naciones se están uniendo ahora…
Si observa a Alemania de cerca, podrá ver que ya se está posicionando para su ataque “torbellino” contra Irán. Y algunos de estos preparativos están sentando las bases para esta futura alianza con los Estados árabes.
Sin embargo, esta profecía revela una verdad crucial: esta alianza no tiene como objetivo principal y último contrarrestar a Irán…
Al presentarse como una barrera frente a Irán y sus aliados terroristas, Alemania está haciendo que varias otras naciones se manifiesten a su favor. Pero si observa estos acontecimientos de cerca, verá que estas naciones odian a una nación más de lo que odian a Irán. Esto por sí solo le dice que la alianza de Alemania con estas naciones debe ser observada a la luz de la profecía bíblica. Estudie “Otra alianza más misteriosa” para comprenderlo.