España arrasada por catastróficas inundaciones repentinas
Al menos 51 personas han muerto a causa de las devastadoras inundaciones repentinas en el sur y el este de España, según informó el miércoles el gobierno local, y se espera que la cifra aumente.
Daños: las lluvias torrenciales han provocado inundaciones repentinas, el cierre de carreteras y vías férreas y la cancelación o desvío de múltiples vuelos en Valencia. Más de 1.000 soldados han sido desplegados para prestar ayuda en las zonas devastadas.
• En la región de Andalucía, se descarriló un tren de alta velocidad con 276 pasajeros; no se registraron heridos. Partes de Andalucía se encuentran ahora bajo el segundo nivel más alto de alerta.
• Algunas zonas han registrado casi 51 centímetros de lluvia en sólo 8 horas, lo que equivale a un año de lluvia. Hay puentes derribados y coches arrastrados por las calles.
• Relatos de primera mano, videos e imágenes detallan la tragedia humana, incluyendo informes de una mujer y su bebé que murieron arrastrados por las inundaciones.
Este es el peor clima que España ha visto en años. Algunos lo han descrito como bíblico.
La causa: las intensas lluvias que provocaron las inundaciones se atribuyen, al parecer, a la gota fría, que se produce cuando el aire frío se desplaza sobre las cálidas aguas mediterráneas, aumentando enormemente la velocidad a la que asciende el aire saturado y dando lugar a la rápida formación de formidables nubes de tormenta.
Los científicos advierten que este clima extremo es cada vez más intenso debido a la crisis climática, pero la Biblia da una razón diferente.
El redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, escribió en la edición de febrero de 2018: “¡La idea de que las emisiones de carbono causan las tormentas es la antítesis de lo que dice Dios! En cierto sentido, los seres humanos son responsables de las catástrofes meteorológicas. No por los combustibles fósiles, sino por el pecado: ¡por quebrantar los mandamientos de Dios!”.
Más información: para saber más sobre la razón por la que Dios permite que se produzcan inundaciones devastadoras como las de España, lea nuestro artículo de tendencias “Aumento de los desastres ‘naturales’ y climáticos”.
