Elon Musk contra el Gobierno alemán
Tras el colapso del gobierno alemán dirigido por el canciller Olaf Scholz el 6 de noviembre, el director ejecutivo de X, Elon Musk, publicó en alemán “Olaf ist ein Narr”, que significa “Olaf es un tonto”. Después de que el ministro de Economía, Robert Habeck, criticara la falta de censura en X, Musk escribió: “Habeck ist ein Narr”.
El 20 de diciembre, Musk dio un paso más al respaldar a la oposición política, la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD, por sus siglas en alemán).
¿Injerencia electoral? Tras ser criticado por interferir en las elecciones a favor de un partido de extrema derecha, Musk denunció la hipocresía de Alemania, citando la cobertura mediática alemana de Donald Trump. También compartió una publicación en la que afirmaba que la AfD no es de extrema derecha, citando la educación de la líder del partido, Alice Weidel, y el hecho de que está en una unión del mismo sexo con una mujer de Sri Lanka. También señaló que Europa, sin la intervención de Estados Unidos, estaría toda hablando alemán o ruso, aludiendo a posibles resultados alternativos de la Segunda Guerra Mundial.
Contra la corriente dominante: después de que un inmigrante saudí embistiera un coche contra un mercado navideño el viernes, Musk compartió detalles incómodos sobre el fracaso de las autoridades de seguridad alemanas, como ignorar las advertencias del gobierno saudí.
Una herramienta poderosa: si bien es cierto que en X se permite una gran cantidad de desinformación, la plataforma también permite la difusión de la verdad sin censura, como explicó el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, en “La guerra de la UE contra la libertad de expresión”.
Sin embargo, la guerra de Musk contra Alemania está destinada a tener un desenlace de lo más inquietante.
Debemos prestar mucha atención a las tendencias autoritarias de los líderes europeos actuales. Si uno no piensa como ellos, tachan sus opiniones de desinformación ¡y sin más le destruyen! A medida que adquieren más control y poder, la guerra por la libertad de expresión está destinada a volverse violenta.
—Gerald Flurry
Lo que sigue: la AfD no podrá salvar a Alemania; tiene demasiados problemas propios. En cambio, la profecía bíblica revela que una Alemania polarizada está a punto de cambiar drásticamente hacia algo peor con la llegada de un líder fuerte que echará por tierra la verdad.
Para saber más, lea “Tras la victoria de Trump, vigile a Alemania”.