LA TROMPETA
El Yo Soy
Transcripción de La Llave de David
Judas Iscariote traicionó a Jesucristo. Salió con muchos de los sacerdotes y vinieron con sus lámparas y antorchas Y armas para atrapar a Jesucristo, y todo conducía a Su crucifixión. Y Cristo tenía algo que decirles en ese momento que les hizo retroceder y caer al suelo. ¡Un acontecimiento extraño! Dos pequeñas palabras que les dijo y que los impactó así, que los sorprendió así. ¿Y qué pudo causar tal reacción? Bueno, creo que éste es uno de los eventos más extraños de la Biblia, y sin embargo, también termina hablando del potencial más asombroso que el hombre acaso podría imaginar tener.
Así que demos un vistazo a esto en Juan 18, versos 1 a 5, el evangelio de Juan. El verso 1 dice: “Habiendo dicho Jesús estas cosas, salió con sus discípulos al otro lado del torrente de Cedrón, donde había un huerto, en el cual entró con sus discípulos. (2) Y también Judas, el que le entregaba, conocía aquel lugar, porque muchas veces Jesús se había reunido allí con sus discípulos. (3) Judas, pues, tomando una compañía de soldados, y alguaciles de los principales sacerdotes y”, etcétera, “fue allí con linternas y antorchas, y con armas”.
Verso 4: “Pero Jesús, sabiendo todas las cosas que le habían de sobrevenir, se adelantó y les dijo: ¿A quién buscáis?”. ¿A quién buscáis?
Y luego en el verso 5: “Le respondieron: A Jesús nazareno. Jesús les dijo: Yo soy él”, dice en la versión King James. “Y estaba también con ellos Judas, el que le entregaba”. Pero si ven la cursiva ahí (la palabra “él” está en cursiva), significa que los traductores la añadieron. Debería decir: “Jesús les dijo: Yo soy”, y entonces los traductores añadieron la palabra “él” porque ellos mismos están confundidos sobre lo que aquello realmente significa. ¡Él es el Yo soy!
Los verdaderos santos de Dios y por supuesto, los judíos de la época, sabían de qué se trataba todo esto, y saben lo que la Biblia dice, y lo asombroso que es este yo soy; en lo que hace y lo que muestra a la humanidad.
Verso 6, leamos eso: “Cuando les dijo: Yo soy él”, de nuevo, tenemos que quitar el “él”, está en cursiva y no debería estar ahí, así que leamos como debería leerse: “Cuando les dijo: Yo soy, retrocedieron, y cayeron a tierra”. Bueno, ¿qué está pasando aquí? ¿Qué ha sucedido aquí? ¿Por qué estas dos palabras son tan impactantes para los judíos y otros que estaban con ellos? Algunos de ellos quizás no lo entendieron; la mayoría sí. Comprendieron de qué se trataba. Entonces, ¿quién es el yo soy? ¿Quién es ÉL?
Veamos Éxodo 3 y verso 14: “Y respondió Dios a Moisés: yo soy el que soy. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: yo soy me envió a vosotros”. Oh, bien, ¡Moisés fue enviado por yo soy! Ahora, ¿qué significa todo eso?
Ese nombre en realidad en el hebreo significa “Yo seré lo que Yo quiera ser”, o “Yo existo eternamente”. Este es el yo soy. Él es lo que quiere ser. La palabra raíz dice, Él hará lo que Él quiere hacer. Por supuesto, dentro de la Ley. Él tiene esa clase de poder, y los judíos en muchas formas adoran el Antiguo Testamento, y a veces ciertamente se quedaron cortos en hacer lo que dice. Pero ellos sabían exactamente de lo que Jesucristo estaba hablando, y sabían que el yo soy era el Dios del Antiguo Testamento. Y Él estaba diciendo, Jesucristo les estaba diciendo justo antes de ser crucificado, ¡yo soy! y eso realmente les hizo pensar y los asustó y atemorizó a un grado increíble.
Sigamos con el verso 15, leeremos eso: “Además dijo Dios a Moisés: Así dirás a los hijos de Israel: [el Eterno], el Dios de vuestros padres, el Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacob, me ha enviado a vosotros. Este es mi nombre para siempre; con él se me recordará por todos los siglos”. ¡Este es mi nombre! Cristo está diciendo, ¡para siempre! ¡Y es un memorial para toda la humanidad!
Y Moisés fue enviado al faraón cuando Israel estaba en cautiverio; eran esclavos, y entonces Dios iba a liberarlos de la esclavitud. Pueden ver eso en los versos 12 a 19; habla de, “… os sacaré de la aflicción de Egipto a la tierra del cananeo”. Y verso 19: “Mas yo sé que el rey de Egipto no os dejará ir”, no los dejará ir, pero Dios por supuesto los plagó una y otra vez hasta que los egipcios, todos ellos, estaban tan ansiosos de deshacerse de ellos que les dieron toda clase de joyas, oro, y vestimenta y toda esa ropa, y se fueron en muy buena condición y muy bien auspiciados por los egipcios, en cuanto a cómo se veían y la comida que tenían, etcétera.
Pero aquí hay algo asombroso. ¡Dios está liberando a una nación, y Él va a hacer que esta nación (Él hará un pacto con esta nación) sea un ejemplo para todo el mundo y mostrarle cómo tener libertad! ¡Ellos no saben! “El camino de la libertad no lo conocen”, dice Isaías. No saben cómo tener paz y libertad. Pero Dios dice: Ahora, tengo una nación aquí. No son un pueblo favorecido, son elegidos para ser un ejemplo para el mundo. Pero fallaron terriblemente. Fallaron.
Y ahora Dios ha cambiado las cosas y hoy tiene un Israel espiritual, o sea, una Iglesia verdadera que se compone de todas las razas, y son llamados Israel. Ellos son el Israel elegido hoy, y repito, incluye todas las razas, y ellos saben lo que es la verdadera libertad. ¡Esto está más allá de la comprensión humana! Y Dios les dará eso, y aunque estén en prisión, seguirán siendo libres. ¡Y tienen que ver y entender de qué se trata este yo soy! Quiero decir, este es el entendimiento supremo del Dios del Antiguo Testamento, y luego por supuesto, ese mismo Dios se convirtió en Jesucristo. Y a los judíos no les gustó nada eso. No les gustó lo que Él dijo de sí mismo.
Fíjense en Juan 8 y verso 24: “Por eso os dije que moriréis en vuestros pecados; porque si no creéis que yo soy él”, quitemos el “él” de nuevo, vean, no debería estar ahí. “Si no creéis que yo soy, en vuestros pecados moriréis”. Bueno, esas son palabras fuertes. En algún momento, tal vez la mayoría de la gente pasando las resurrecciones llegarán a conocerle y creerle, o si no morirán en sus pecados para siempre. Eso es lo que Él está diciendo; es una advertencia porque Él dice: “si no creen que yo soy”; pero Él sí quiere que usted crea en el yo soy, como Jesucristo dijo. ¿Hay algo que pueda ser más serio que esto? ¿Pueden pensar en algo que sea más serio, si lo miran espiritualmente?
Fíjense en el verso 28: “Les dijo, pues, Jesús: Cuando hayáis levantado al Hijo del Hombre, entonces conoceréis que yo soy él”, quitemos el “él”, “entonces conoceréis que yo soy”. Vean, ellos ya deberían haber sabido esto, “y que nada hago por mí mismo, sino que según me enseñó el Padre, así hablo”. Él está haciendo exactamente lo que Su Padre le dijo que hiciera y eso causó que ellos tomaran piedras y se las lanzaran y trataran de matarlo. Incluso eso, lo que da realmente el cuadro completo de la Familia de Dios y cómo Dios está construyendo Su propia Familia a través de la humanidad, ¡a través de los seres humanos! Es algo que incluso es difícil de entender, pero con el Espíritu Santo de Dios ciertamente sí se puede.
¿Ven? ¡Este es el yo soy, el gran yo soy, y Él y Su Padre son uno! Ambos son perfectos y están juntos y el yo soy es totalmente sumiso al Padre. Este gran Dios es totalmente sumiso a Su Padre. Y Él dice: “Dios es mayor que yo”. “Mi Padre es mayor que yo”.
Así que aquí se ve la pasión que Dios quiere que tengamos por el yo soy, y vean, repito, y dar ejemplo a los demás. Bueno, ¿qué es lo que tenemos que enseñar a los demás? ¡Bueno, ciertamente hay que tener mucha humildad, al estar haciendo exactamente lo que Dios dice que hagamos, y lo que el yo soy dice que hagamos! ¡Y Él siempre obedece a Su Padre! Pueden ver eso en I Pedro 2 verso 21. Dice: Pues miren, deben seguir Mi ejemplo. Cristo es el yo soy, el Dios del Antiguo Testamento. Y Él y el Padre están creando gente humilde y enseñable, que son bebés o como niños pequeños y son enseñables. ¡Y Dios puede guiarlos y puede mostrarles lo que significa cuando habla del yo soy!
Muchos lo tomaban a la ligera, ¡muchos hoy lo toman a la ligera! ¡Pero Dios dice que es muy serio y Él dice muchas veces en la Biblia que debemos temblar ante Su Palabra! ¿Temblamos ante la Palabra de Dios? Oh, ¡cuánta paz, gozo y felicidad traerá a su vida! ¿Pero quién se imaginaría eso? Simplemente mirándolo y razonando, carnalmente. Pero la mente es “engañosa más que todas las cosas, y perversa”. Uno no puede confiar en su propia mente, ¡pero siempre se puede confiar en el yo soy! Eso es Jeremías 17 verso 9, donde dice aquello.
Pero aquí ahora en el verso 29, leeremos esto. Pueden ver que este yo soy sí tiene autoridad, y luego en el verso 29: “Porque el que me envió, conmigo está; no me ha dejado solo el Padre, porque yo hago siempre lo que le agrada”. ¡Vaya! Él hace siempre las cosas no sólo lo que el Padre dice, sino que quiere hacer todo lo que pueda para agradarlo. ¡Qué gran actitud hacia Dios, de Aquel que era el Verbo con Dios antes de que siquiera hubiera ángeles u hombres creados.
Bien, abajo en el verso 42 habla de que Él estaba allí porque Dios lo envió, y note cómo condenó a esta gente. Verso 44: “Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira”. ¡Esto sí que es condenatorio!
Pero noten lo que siguen diciendo de esto un poco más adelante; lo digo de los que realmente están tratando de matar a Jesucristo. Versos 57 a 59, con razón, ven, los judíos se enojaran con Él. Dice: “Entonces le dijeron los judíos: Aún no tienes cincuenta años, ¿y has visto a Abraham? (58) Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy”. ¡Él es el Dios del Antiguo Testamento y creó a Abraham! Por instrucción del Padre. (59) “Tomaron entonces piedras para arrojárselas; pero Jesús se escondió y salió del templo; y atravesando por en medio de ellos, se fue”. Querían matarlo, sólo por decir que Él era el yo soy y querían matarlo por ello. ¡él era, de hecho, Dios en la carne! ¡Era el yo soy en la carne como un ser humano! ¡Es increíble lo poco que la gente sabe sobre el yo soy!
Y Dios quiere darnos libertad, como lo hizo con todo Israel. ¡Paz y libertad, gozo y felicidad! ¡Y la humanidad sigue luchando contra ello! ¡Eso es asombroso!
¿Por qué Juan habla tanto del yo soy una y otra, y otra y otra vez? ¡Pues para que sepamos quién era el Dios del Antiguo Testamento! ¡Y luego vino como Cristo! ¡Y ahora si entendemos a Cristo, sabemos lo que está haciendo hoy! Mi folleto sobre Hebreos les explicará todo eso, lo que Cristo está haciendo ahora mismo para Su Padre. Un entendimiento maravilloso. Así que Dios va a dar a cada hombre que ha vivido una oportunidad de ser salvo.
Bueno, pueden leer en Juan 13 verso 8 dice que Si no te lavare los pies... (este es el tiempo de la Pascua y Él está instituyendo la ceremonia del lavamiento de los pies), y dice: “Si no te lavare, no tendrás parte conmigo”. Pedro se había resistido a eso.
Y luego, en los versos 12 y 13, dice: “… ¿Sabéis lo que os he hecho? (13) Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís bien, porque [Yo] soy”. Eso es lo que significa, el yo soy ahí mismo. ¿Pero cuántas personas lo saben?
Fíjense en el verso 19, nos lo aclara aún más, y dice: “Desde ahora os lo digo antes que suceda, para que cuando suceda, creáis que yo soy”. En otras palabras, cuando Me hayan crucificado, y todo se cumpla, ¡les digo esto para que crean que yo soy! creerán que yo soy, o el Dios del Antiguo Testamento. Es critico que entendamos eso. Él es el Dios del Antiguo Testamento, y del Nuevo Testamento, y esa verdad tenemos que entenderla.
Ven, todo esto es antes de la crucifixión, pero Él dice, pues bien, después que sea crucificado, deberían poder entender esto, y cuando les digo sobre el yo soy, ¡deberían escudriñar en la Biblia y ver lo que dice sobre esto! Porque es absolutamente esencial que usted lo entienda, si es que va a nacer en la Familia de Dios; y para eso estamos aquí en la Tierra, ¡para ser miembros de la Familia de Dios para siempre!
Ahora, luego Él continuó diciendo: “Ustedes son dioses”. Déjenme decirles por qué Él dijo eso. Juan 10 verso 33, esto es lo que dice. Los judíos habían dicho que Él había cometido blasfemia, y entonces dice: “… porque tú, siendo hombre, te haces Dios”. Y ellos dijeron que eso era blasfemia y querían matarlo por eso, aunque los Diez Mandamientos obviamente ordenan no matar, pero eso no los disuadió.
Ahora miren el verso 34. ¿Qué tiene esto que ver ustedes? Fíjense en la inspiradora respuesta de Cristo: “Jesús les respondió: ¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije, dioses sois?” ¡Vaya!
Esto está en el folleto que ustedes necesitan entender, también. “¿Por qué están tan disgustados”, dice, “cuando les digo que yo soy el Hijo de Dios?”, “Repásenlo y vean lo que está ahí en su propia Biblia, ¡que ustedes son Dioses!”. Que tienen el potencial de ser un Dios, un hijo de Dios. ¡muchos hijos van a ser llamados a la gloria!
Noten el Salmo 82, verso 5, “… Tiemblan todos los cimientos de la tierra”. “Tiemblan todos los cimientos de la tierra” significa que todos los fundamentos de la Tierra (la religión, la política, la educación, la ciencia) tienen fundamentos, ¡que están fuera de curso en este mundo! Por eso se ven todos estos horribles problemas. Dios quiere cambiar todo eso para nosotros, pero Él no se nos va a imponer todavía, pero está a punto de regresar, muy pronto.
Vean que nuestra naturaleza humana malvada debe ser cambiada fundamentalmente.
El verso 6 dice: “Yo dije: Vosotros sois dioses, Y todos vosotros hijos del Altísimo”. ¡Ustedes fueron creados para ser hijos de Dios y nacer en la Familia de Dios para siempre! ¡Y si salen de este mundo antes de que Él venga por segunda vez, entonces Él va a permitirles compartir el trono de David con Él por toda la eternidad y ser la propia Esposa de Jesucristo! ¡Él está hablando de eso aquí!
¡Ustedes son dioses! ¡Esa es la misma palabra griega usada más de 1,300 veces en el Nuevo Testamento para referirse a Dios Mismo! Déjenme leerles eso de nuevo. “Vosotros sois dioses”; ¡esa misma palabra griega se usa más de 1,300 veces en el Nuevo Testamento para referirse a Dios mismo! ¿Es eso inspirador? ¡Se trata de su potencial! ¡nuestro potencial! ¡Esa es la verdad más inspiradora que hay en la Biblia! Y el yo soy quiere enseñarles eso.
Él dijo: ok, yo digo, sí, yo soy el Hijo de Dios. yo soy, yo soy. ¡Así es! ¡yo soy! Pero dije que incluso ustedes son dioses. Ustedes tienen ese potencial. Ustedes ya se parecen a Dios; eso es lo que dice Génesis 1 verso 26. Ven, no fueron hechos según el género animal, fueron hechos según el género de Dios. Nos parecemos a Él ahora, pronto vamos a tener Su carácter o la imagen de Dios; eso es lo que dice en Génesis 1 verso 26.
Pero piensen en todo esto. ¿No está escrito en su ley que ustedes son dioses? Por qué dice que en Hebreos 1, versos 13 y 14, dice esto y sólo lo resumiré, los ángeles no fueron creados para ser hijos de Dios. Nunca fueron creados para ser hijos de Dios. Los ángeles fracasaron cuando Dios trató de darles el gobierno sobre todo el universo, y entonces decidió que tenía que reproducirse a Sí mismo en los hombres. Eso es lo que está haciendo hoy, ¡creando a los hombres en seres divinos! Piensen en el maravilloso futuro que todos tenemos. Piensen en su propio potencial y el yo soy trata de recalcar eso para que lo entendamos y estemos emocionados de ser parte de la obra del yo soy.