El trascendente significado del matrimonio

Mire atrás al primer matrimonio de Carlos. El New York Times escribió el 2 de julio de 1981 lo siguiente: “Lady Diana Spencer ha decidido que no prometerá en su boda, dentro de cuatro semanas, obedecer al príncipe Carlos. La reina Isabel ii, la princesa Margarita, la princesa Ana y una larga lista de novias reales antes que ellas han incluido la palabra ‘obedecer’ en sus votos matrimoniales, como prescribe el Libro de Oración Común Anglicano que data de 1662. Pero Lady Diana ha optado por seguir el nuevo ritual de la Iglesia de Inglaterra, y en la ceremonia en la catedral de San Pablo sólo prometerá ‘amarlo, consolarlo, honrarlo y cuidarlo en la salud y la enfermedad”.

Un clérigo respondió: “El matrimonio es el tipo de relación en la que debe haber dos compañeros iguales, y si va a haber uno que domine, no se resolverá con este juramento. Creo que esto es mucho más cristiano”.

¿Conoce este hombre la Biblia? ¿Tiene alguna idea de lo que significa la institución del matrimonio ordenada por Dios?

Efesios 5 tiene quizás el pasaje más importante de la Biblia sobre el matrimonio. Comienza en el versículo 21: “Someteos unos a otros en el temor de Dios”. La gente parece pensar que si una mujer debe obedecer a su marido, éste será un tirano y la someterá a terribles abusos. Eso ocurre en los matrimonios no bíblicos, pero no es lo que manda la Biblia en absoluto. Dice que los esposos y las esposas deben someterse el uno al otro.

Ahora lea los versículos 22-24: “Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor. Porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia; la cual es su cuerpo, y él es su salvador. Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo”. Sí, el hombre es la cabeza, eso dice la Biblia. ¿Es eso cristiano? ¡Eso es lo único que es cristiano! Pero pocas personas hoy en día aceptan esto.

Jesucristo dijo que debemos vivir de toda palabra que sale de la boca de Dios (Mateo 4:4), pero es raro que la gente viva de acuerdo con esa escritura.

Pablo continúa: “Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la Iglesia, y se entregó a sí mismo por ella (…) Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus propios cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama” (Efesios 5:25, 28). ¡Eso no es un tirano! Esta es la forma en que Dios dice que un hombre debe tratar a su esposa: ¡como a su propio cuerpo! “Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne” (versículo 31).

Ahora, fíjese en lo que dice Pablo a continuación: “Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y la iglesia. Por lo demás, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo; y la mujer respete a su marido” (versículos 32-33).

¡Este pasaje habla principalmente del matrimonio de Jesucristo con Su Iglesia! El matrimonio es mucho más que un acuerdo legal o una tradición. Los cristianos verdaderos que son llamados antes de la Segunda Venida de Cristo se casarán con Él en la más grande de todas las bodas reales ¡y compartirán Su trono y le ayudarán a gobernar el mundo!

Debemos entender que el matrimonio es una relación en el plano de Dios. Eso es lo que Dios nos dice en Sus escrituras inspiradas sobre el matrimonio, que muestran una realidad espiritual espectacular, y debe funcionar según la ley y la visión de Dios. Nunca funcionará de otra manera.

¿Funcionó el matrimonio del príncipe Carlos y Diana? Me temo que no. Y el mundo entero fue testigo de ello. ¿Por qué no funcionó? Estos versículos proporcionan la respuesta. Otras escrituras dicen lo mismo (p. ej., Tito 2:5; 1 Pedro 3:1-6; Colosenses 3:18).

Carlos y Diana desecharon el mandato de Dios de que la esposa esté sujeta a su marido. Cuando el príncipe William se casó con Kate Middleton, siguieron ese ejemplo. También lo hicieron Harry y Meghan Markle. A menudo hay muchos problemas serios en matrimonios así.

Herbert W. Armstrong visitó al príncipe Carlos en dos ocasiones. Cuando Carlos se casó con Diana, el Sr. Armstrong dijo lo siguiente al respecto: “En esa ceremonia de boda no hubo nada de que la esposa tenía que obedecer al esposo. ¡Todo eso fue omitido! Oh, iba a ser 50-50. Bueno, observemos y veamos si dura o no. Cuando se tiene 50-50, la esposa lleva los pantalones y es la que manda. (…) Isaías 3:12 dice que la esposa terminará estando por encima del esposo, y entonces los hijos abusarán de la esposa, porque no la obedecen. Y resulta una familia que simplemente se desmorona en muchos casos”.

¿Por qué no escuchamos a Dios? ¡Dios nos está diciendo cómo unir a nuestras familias y cumplir su propósito en el plano divino! ¡Qué maravillosa y hermosa bendición! ¿Qué puede ser más importante? Ese matrimonio tipifica el matrimonio de la Iglesia con Cristo. Y la familia es también una relación en el plano divino. Dios quiere que usted haga todo lo posible por ayudar a sus hijos y vuelva el corazón de los padres hacia los hijos, y el de los hijos hacia sus padres (Malaquías 4:6). Cuando seguimos la fórmula de Dios, esto produce hijos piadosos. ¡Esa familia representa a la Familia Dios y a todos aquellos que nacerán en esa Familia cuando elijan obedecer a Dios y vivir a Su manera! ¡Qué verdad tan maravillosa!