El siglo perdido (2023)

Transcripción de La Llave de David

En los primeros días de la Iglesia de Dios (alrededor del año 70 d. C.) hubo un profeta falso que perseguía a la Iglesia de Dios, y en ese tiempo él estuvo muy cerca de incluso destruir la Iglesia de Dios. Eso ocurrió alrededor de los años 70 al 170 d. C.

Esto es lo que Herbert Armstrong escribió al respecto. Haré una cita corta aquí: “Siguió ‘el siglo perdido’ en la historia de la verdadera Iglesia de Dios. Hubo una conspiración bien organizada para borrar todo registro de la historia de la Iglesia durante ese período. Cien años después la historia revela un cristianismo totalmente distinto, de la Iglesia que Cristo fundó”. Y así, la religión de los misterios babilónicos había cambiado esas cosas, y durante unos dieciocho siglos y medio no se predicó el Evangelio en todo el mundo, hasta este tiempo del fin. Eso es lo que dice la Biblia, y este “siglo perdido”, como el Sr. Armstrong lo llamó, él comenzó su estudio de ello con una escuela teológica alemana que hablaba de un siglo oscuro y de lo que se trataba era de dos evangelios diferentes. Uno era sobre el Evangelio que Cristo mismo enseñó y el otro era sobre, bueno, ellos sólo querían usar el nombre de Cristo, y ese por supuesto es el que ganó y trajo verdaderas maldiciones a la Iglesia de Dios y al mundo.

Pero el Sr. Armstrong simplemente electrizó a la Iglesia de Dios cuando nos habló, y yo era miembro en ese tiempo, y habló de ese “siglo perdido” que fue totalmente borrado de la historia secular. Eso es simplemente asombroso cuando se piensa en ello. ¿Cómo pudo suceder eso, toda la historia borrada sobre este siglo perdido?

Partes de ella está en varios libros, pero sobre todo y en particular, está en las epístolas de Juan donde él registró esa historia. Como ven, Dios se aseguró que esa historia estuviera allí, pero la puso en la Biblia porque fue borrada de la historia secular.

Así que quiero hacer sólo un repaso de las epístolas de Juan y mostrarles por qué la propia Iglesia de Dios tuvo mucho que ver con eso, debido a sus pecados y debido a su rebelión contra Dios. Y Satanás atacó y causó todo tipo de problemas. “La historia secular no registró nada; Dios lo hizo. Se aseguró que fuera registrado en varios libros bíblicos diferentes, pero en particular, en las epístolas de Juan”. Eso es lo que dijo Herbert Armstrong, y ciertamente así fue como ocurrió.

Busqué en los archivos de mis sermones, porque estaba tratando de averiguar acerca de esta historia que habíamos enseñado en nuestra propia Iglesia, y me empecé a desconcertar porque no pude encontrar casi nada acerca de esta historia, en la Iglesia. Y tenemos que recordar que en el primer siglo y en este último siglo, hay una “sinagoga de Satanás”; bueno, las dos últimas eras de la Iglesia de Dios en este tiempo del fin.

Sobre los años 70 al 170 d. C. mencioné algo que obtuve, por supuesto, del Sr. Armstrong, y dice: “La historia de la Iglesia en el mundo simplemente desapareció porque la gran iglesia falsa destruyó todos los registros en el mundo. Un lugar donde Juan lo registra es en sus tres epístolas”.

Tengo otra cita aquí. También lo afirmó el Dr. Ernest Martin donde dijo: “El período comprendido entre los años 70 al 170 d. C. se conoce como el siglo perdido, en lo que respecta a la historia del Nuevo Testamento. Dios ha preservado la historia central en las páginas de la Biblia”.

Por supuesto el Sr. Armstrong hizo esa declaración y el Dr. Martin no le dio crédito, pero en lo que respecta a la Iglesia, eso vino del Sr. Armstrong.

Pero aquí ven, en el primer siglo y en el último siglo, hubo una sinagoga de Satanás, y las iglesias de Dios estaban siendo destrozadas. Entonces y ahora hay una dualidad aquí. Lo que sucedió antiguamente es sólo un tipo de lo que está sucediendo en este tiempo final.

“Antes de terminar el primer siglo, la persecución había reducido a la verdadera Iglesia. Muchos miembros se habían ido de la verdadera Iglesia antes de los años 90 d. C.”. Entonces hubo esta gran iglesia falsa que vino a la escena y estaba causando todo tipo de problemas. Pero aquí otra vez, vean, si la Iglesia de Dios decae o comienza a alejarse de Dios o tiene pecados en sus vidas, Satanás puede atacar porque Dios no protege a la Iglesia. No hay suficiente fe para que ellos reciban la protección de Dios. Eso sucedió en el primer siglo, y está sucediendo en este último siglo, también.

Ahora voy a darles un breve repaso de las epístolas de Juan, y mostrarles cómo fue registrada esa historia que no fue registrada en la historia secular.

El Sr. Armstrong estableció el marco de tiempo en los años 80 a 90. Dijo que todos los libros de Juan, su Evangelio, sus epístolas y el libro del Apocalipsis, fueron escritos entre el 85 y el 90 d. C. “Algunos estaban borrando la historia de la Iglesia de Dios, y Juan estaba trabajando febrilmente para preservar esa historia, sobre todo en sus epístolas”. ¿Qué estaba pasando aquí? ¿Qué estaba pasando en la Iglesia de Dios?

Miremos 1ª de Juan 1 versos 8 y 9. “Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos… [verso 9] Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad”. Así que Dios dice que en nuestras oraciones debemos estar continuamente arrepintiéndonos de nuestros pecados, y dejar que Dios nos limpie. Ahora, si no lo hacemos, encontraremos todo tipo de problemas.

Este era un tiempo muy peligroso en la Iglesia de Dios. Pedro ya había sido martirizado, otros habían sido martirizados. Y Jesucristo, cuando estaba en la Tierra, hablaba mucho con el Apóstol Juan. Ellos eran muy cercanos porque Él estaba preparando a Juan para una larga historia en Su Obra después de que los otros fueran martirizados. Dios lo preparó para eso, o Cristo lo hizo cuando estuvo en la Tierra.

Pero también era profecía para la última era. Todo es dual, ese primer siglo es sólo un tipo de lo que sucedió en este tiempo final. Pero ese siglo terrible perdido, esos cien años sucedieron en el primer siglo entrando al segundo siglo, así que debemos estar conscientes de esa dualidad.

Entonces voy a ir a algunas escrituras aquí en las epístolas de Juan, y verán cómo había una Iglesia falsa reemplazando a la verdadera Iglesia, y Satanás estaba trabajando dentro de la Iglesia y fuera de la Iglesia y causando enormes daños a la Iglesia de Dios. Y podrán ver por qué la propia Iglesia de Dios tuvo una gran parte en causar ese siglo perdido en la historia secular. Esto se estaba volviendo el fin de la era apostólica y la Iglesia estaba empezando a alejarse de Dios, y estábamos a punto de entrar en la segunda era de la Iglesia de Dios después de la Era de Éfeso. ¡Pero fue una gran apostasía! Por eso Juan le hablaba a la gente sobre sus pecados.

Noten 1ª de Juan 2:1. “Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo”. Bueno, ¿qué es este “abogado”? Bueno, Jesucristo es nuestro abogado cuando pecamos, si tan sólo vemos esos pecados y nos arrepentimos de ellos. Él está allí para ayudarnos y ayudar al Padre a entender más claramente lo que es estar en la Tierra y lidiar con los tirones de la carne. Necesitamos darnos cuenta siempre que Jesucristo es nuestro abogado cuando pecamos. Necesitamos entenderlo.

Verso 5: “Pero el que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él”. Así que nosotros perfeccionamos el amor de Dios.

Ahora noten 1ª de Juan 2:18. Veremos dónde se desarrolla la dualidad en este tiempo final. El verso 18 en la Versión Estándar Revisada, dice: “Hijos, es la última hora; y como habéis oído que el anticristo”, ese anticristo es un hombre, “viene, así ahora han venido muchos anticristos; por lo cual sabemos que es la última hora”. Así que ese anticristo es un hombre. ¿Quién es este hoy? y ¿quién era antiguamente? Bueno, lo veremos mientras avanzamos aquí. Este anticristo es singular, “el anticristo”, así que hay un hombre dentro de la Iglesia que está luchando contra la Iglesia hoy, y realmente la ha destruido, casi toda excepto tal vez un 5%, en este tiempo final. Lo mismo sucedió antiguamente. ¡Lo mismo! La Iglesia fue casi destruida antiguamente, o en el siglo de Juan. La “última hora” no se menciona, realmente, en ningún otro lugar de la Biblia.

Déjenme leerles esto; comenzaremos en 1ª de Juan 2:16. “Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo”. Así que todos los pecados encajan en estas tres categorías de las que Juan está hablando, y ellos andaban en todas ellas. En todas ellas, y noten lo que estaba sucediendo dentro de la Iglesia. Esto es lo peor que puede pasar.

Lo mismo está sucediendo en este tiempo final. Todo esto en las epístolas de Juan es profecía para este tiempo final, y nuestro libro sobre La última hora se los demostrará.

Verso 18: “Hijitos, ya es el último tiempo; y según vosotros oísteis que el anticristo viene, así ahora han surgido muchos anticristos; por esto conocemos que es el último tiempo”. La verdadera Iglesia de Dios comenzó en el año 31 d. C. Y luego aquí en el año 70 d. C. estaba en muy serios problemas.

Así que nosotros hoy en este tiempo final, incluso tenemos un tiempo más peligroso en muchos aspectos, y verán si examinan esto de cerca que lo que sucedió en ese primer siglo es sólo un tipo de lo que viene en este tiempo final, con muchos problemas si no entendemos y nos sometemos al mensaje de advertencia de Dios. ¡Es muy urgente!

Así que había una persecución violenta, ¿y de dónde venía? Bueno, había un Diótrefes allí y él estaba dentro de la Iglesia, y demos un vistazo a lo que hizo. “La palabra griega para la ‘última hora’ es usada sólo en las epístolas de Juan, y el tema del ‘anticristo’ también se discute sólo en las epístolas de Juan. No se discute en ninguna otra parte de la Biblia”. Veamos, necesitamos ver, de nuevo, lo que Juan les estaba diciendo, y cómo estaba tratando de ayudar a la Iglesia de Dios a enderezar todo en sus vidas espiritualmente. De esta “ultima hora” y del “anticristo” sólo se habla en las epístolas de Juan.

Y si han visto gente luchando contra Cristo, bueno, ese es el anticristo y hay uno dentro de la Iglesia en el tiempo de Juan y en nuestro tiempo hoy, y él ya ha venido y se ha ido, realmente, en muchas formas, pero no se ha ido para siempre.

Pero esto es lo que dice en 3ª de Juan 9. “Escribí a la iglesia; pero Diótrefes, que ama tener la preeminencia entre ellos, no nos recibe”. Esto fue dentro de la Iglesia de Dios. (10) “Por esta causa, si yo fuere, recordaré las obras que hace parloteando con palabras malignas contra nosotros; y no contento con estas cosas, no recibe a los hermanos, y a los que quieren recibirlos se lo prohíbe, y los expulsa de la iglesia”. Es decir, aquí está Satanás atacando la propia Iglesia de Dios, y tenía un hombre en la Iglesia. Y si ellos obedecían a Dios (lo que Cristo dijo y enseñó), los echaban de la Iglesia. Y por supuesto, ya no eran la verdadera Iglesia de Dios. Pero eso es echar a los verdaderos miembros de la Iglesia de Dios. Con razón Dios no los ayudaba, y con razón Dios permitió que la historia secular borrara cien años de historia, sobre la Iglesia de Dios. Pero Dios tiene esa historia aquí registrada en las epístolas de Juan. Obviamente necesitábamos saber eso. Pero este fue un tiempo muy terrible.

Vean lo que tenemos en este tiempo final. Anticristo era una de las palabras más aterradoras en la Biblia; esta es una cita de Joseph Tkach [hijo]: “Sentimos que es nuestro deber cristiano mantener el libro, El misterio de los siglos, fuera de imprenta porque creemos que los errores doctrinales del Sr. Armstrong es mejor dejarlos fuera de circulación”. ¡exactamente así piensa Satanás!

Dios restauró todas las cosas a través de un hombre en este tiempo del fin (Mateo 17, versos 10 y 11), y aquí hay un hombre que viene y dice que hay que detener eso, y está echando la verdad por tierra (Daniel 8, versos 9 al 12).

Eso es lo que, de muchas maneras, estaba (y aún está) pasando en la Iglesia de Dios. Así que cuando surge el anticristo, pues, obviamente se trata de guerra, espiritualmente.

Satanás está haciendo un gran daño a la Iglesia de Dios, especialmente si está dentro, y nunca debería estar allí, pero así fue con Juan, y así es hoy.

Y por supuesto están los “muy escogidos”, el 5% que es un remanente que levantó las ruinas del tipo de Elías que restauró todas las cosas en este tiempo final. Todas las cosas. El Evangelio fue borrado por dieciocho y medio siglos, en cuanto a llevarlo al mundo. Pero la Iglesia estuvo viva todo ese tiempo, como Dios prometió que lo estaría, en este tiempo final.

En 1ª de Juan 2:26 Juan les dijo cómo resolver sus problemas: “Sobre los que os engañan” esto hay que hacer: [1ª de Juan 3:1] “Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él. (2) Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él” ¿Qué significa eso? ¡Pues que vamos a ser como Dios! ¡Vamos a parecernos a Él! Y estaremos compartiendo el trono de David con Él si somos leales a Dios.

Vea el verso 3: “Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como él es puro”. Pueden leer lo mismo en el Salmo 17 verso 15. Volviendo a Cristo, vamos a parecernos a Él porque somos hijos de Dios, y vamos a gobernar la Tierra y el universo ¡con Jesucristo en el trono de David! ¡Qué visión tan magnifica!

Pero Juan dice que si uno no tiene esa visión en su mente, no se purificará, no estará motivado a vencer sus pecados. ¡Se debe tener esa visión! Qué verdad tan increíble la que Juan habla aquí, tratando de salvar a aquellas personas que se estaban volviendo a Satanás el diablo.

Y en el verso 4 dice que “el pecado es infracción de la ley”. Y por supuesto hay que definir la ley o no sabremos qué es el pecado. Eso nos dice qué es el pecado. Y Dios dice que si cometemos pecado, estamos rindiéndonos a Satanás el diablo.

El verso 12 de este mismo capítulo dice: “No como Caín, que era del maligno y mató a su hermano. ¿Y por qué causa le mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas”. Bueno, ¿qué les parece? ¿Ven? ¡Eso no le gustó! ¡A Caín no le gustó eso! Él era injusto, y vio a su hermano siendo justo y eso le enojó. No le gustó, ¡así que lo mató!

Y Juan está hablando de eso. Dijo que la Iglesia tiene ese espíritu. Aun con sólo odiar a un hermano, estamos cometiendo asesinato, espiritualmente.

Vean, él está diciendo cómo construir el amor de Dios aquí. (16) “En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos”. Eso es lo que Juan estaba tratando que hicieran.

Este era ese espíritu del anticristo (en 1ª de Juan 4 verso 3). El espíritu del anticristo estaba en la Iglesia de Dios y afuera, pero Satanás estaba dentro de la Iglesia, y al mismo tiempo estaba destruyendo toda la historia secular sobre la Iglesia de Dios. ¿Cómo puede borrarlo todo? Debe tener mucho poder, pero esto es lo que estaba pasando dentro de la Iglesia. ¿Lo ven? Y él dijo que tenemos que tener a Dios morando en nosotros, y está hablando de como debemos guardar los mandamientos de Dios, y asegurar que no desobedecemos el modo de vida de Dios.

Pero uno podría continuar más pero sólo les diré esto: 1ª de Juan 5 verso 7 y la mitad del 8, ni siquiera fue puesto en la Biblia hasta el año 1600; aquí ellos estaban tratando de enseñar una doctrina que no es bíblica.

¡Este es Satanás atacando la mera Palabra de Dios! Así de fuerte es él y el pueblo de Dios no tenía suficiente poder para detenerlo. Esto es algo terrible cuando se piensa en ello, en lo que está sucediendo a la religión de Dios.