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El proyecto de unificación de Europa en curso
Durante los últimos dos milenios, Europa ha dominado la historia mundial. Se han encontrado monedas romanas en lugares como Gran Bretaña, por todo el norte de África y hasta tan lejos como China. Es por una buena razón que los estudiantes de historia mundial de este periodo de tiempo se enfoquen en Europa.
¿Pero es el dominio de Europa simplemente parte del pasado? En un mundo de grandes superpotencias como EE UU, Rusia y China, ¿será que Europa ya está obsoleta, con todos sus países mucho más pequeños y menos poblados?
Mirando a Europa hoy, es difícil imaginar la aparición de otro Carlomagno, Napoleón o Hitler. Para muchos observadores, la idea de que Europa participe en otro conflicto global destructivo, para no hablar de iniciar uno, parece imposible y atroz.
Mucha gente considera el pasado histórico de Europa solamente valioso como un atractivo para los turistas, como sus mazmorras y castillos, sus armas antiguas y sus renombrados campos de batalla, su célebre pasado medieval lleno de intrigas reales y políticas. Los días de conquista e imperio de Europa se han terminado.
1.500 años de historia europea deberían advertirnos contra la subestimación del poder destructivo de las naciones de Europa.
Uno puede entender esta percepción. Después de todo, el mundo no ha sido amenazado por un ejército europeo desde la Segunda Guerra Mundial. Europa es multicultural y sofisticada, y líder mundial en la defensa de los derechos humanos y el activismo ambiental. Además de eso, Europa está luchando para evitar la ruina económica y financiera, así como los disturbios y las revueltas sociales. La Unión Europea es una colección ineficiente e incómoda de Estados acosados por conflictos de intereses, atascados por la burocracia y aparentemente incapaces de convertirse alguna vez en un temible líder mundial, y mucho menos en una superpotencia imperial letal.
Pero 1.500 años de historia europea deberían advertirnos contra la subestimación del poder destructivo de las naciones de Europa.
No debemos simplemente mirar a Europa en su estado actual, sino que debe ser estudiada en su contexto histórico. Y debemos considerar el potencial de Europa. La UE alberga a más de 500 millones de personas [antes del Brexit], casi el 10% de la población mundial. Su economía es dos veces más grande que la de China y mucho más grande que la de EE UU. Una quinta parte de toda la actividad económica mundial ocurre en la UE. Las naciones europeas tienen 1,5 millones de personas en sus fuerzas armadas. Y Europa está liderada por uno de los países más fuertes, saludables y populares del mundo: Alemania.
Europa tiene un gran potencial para convertirse en una potencia financiera, política y militar dominante.
Europa también tiene una larga historia de imperialismo y dominación global. Imagine si todos estos elementos de poder se unieran en una entidad geopolítica dinámica y cohesiva.
¿Qué pasaría si ya se estuviera formando un imperio así tan impresionante?
La Trompeta pronostica que Europa se unirá y que se convertirá en un dínamo global temible. La unidad que alcanzará Europa no será perfecta, no ocurrirá de forma fácil ni pacífica, y ciertamente no perdurará. Pero Europa se convertirá en una superpotencia unida, y en una potencia global importante e intimidante. El surgimiento de esta nueva Europa tendrá consecuencias extremas y dramáticas para todos nosotros.
¿Qué sustenta este pronóstico? Mire nuestra historia y la de nuestra revista madre, La Pura Verdad, bajo la dirección del editor y autor Herbert W. Armstrong. Usted verá que está respaldada por las seguras profecías de la Biblia.
Previsiones
Inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, cuando Alemania aún era un poco más que escombros humeantes, el Sr. Armstrong estaba previendo que esta nación se levantaría de nuevo para dirigir una unión de naciones en el territorio del antiguo Imperio Romano. Se podría decir que ésta era la profecía que identificó el trabajo de Herbert W. Armstrong por más de 50 años.
Considere el estado fracturado en el que se encontraba Europa en ese momento, cuán débil era la Alemania de la posguerra y cuán improbable era que Alemania emergiera como la nación líder en el Continente.
Luego considere cómo se ve Europa hoy.
El Sr. Armstrong sabía que la Comunidad Económica Europea de la década de 1950, era la etapa inicial de la resurrección final del Sacro Impe rio Romano. Su revista, La Pura Verdad, escribió esto en septiembre de 1967, hace medio siglo:
[S]i 300 millones de europeos estuvieran unidos y pudieran hablar con una sola voz, superarían a cualquier poder en el mundo actual... [Hay] una cosa con la que usted puede contar. De hecho, es tan cierta que puede contar con eso: el clamor de una unión política en Europa se hará más fuerte y dentro de poco veremos que el Mercado Común se convertirá en unos Estados Unidos de Europa.
Herbert Armstrong sabía que habría una unión política. Eso ya sucedió. Él pronosticó que Alemania Oriental y Occidental eventualmente se unificarían. Esto se cumplió pocos años después de su muerte, cuando cayó el Muro de Berlín, el 9 de noviembre de 1989. El Sr. Armstrong predijo que un día Europa se uniría en una moneda común. Esto se hizo realidad el 1 de enero de 2002, con la introducción del euro. Dijo que un resurgido poder alemán dominaría una unión de naciones europeas. Pocos discutirían que esto describe con precisión la situación actual en el Continente.
En 1984, el Sr. Armstrong advirtió que una crisis bancaria masiva “podría provocar repentinamente que las naciones europeas se unieran como una nueva potencia mundial más grande que la Unión Soviética o Estados Unidos” (carta a los colaboradores, 22 de julio de 1984). Hemos sido testigos de tal crisis. La crisis bancaria que comenzó en Estados Unidos en 2008 y se extendió rápidamente para infligir un daño terrible en Europa, ha iniciado importantes cambios políticos y financieros en Europa. Está forzando, aunque de forma acelerada, con mucha tensión y debate, una mayor integración y federalización de las economías y finanzas de Europa. La agitación financiera global está forjando, y continuará forjando a Europa, en una superpotencia financiera.
El Sr. Armstrong también advirtió que una Rusia empoderada estimularía a Europa a unirse. En su carta a los colaboradores del 23 de enero de 1980, él advirtió que el miedo a Rusia “será la chispa que unirá a los jefes de las naciones de Europa con el Vaticano para formar unas ‘Naciones Unidas de Europa’”. Esto también está sucediendo. El comportamiento beligerante del presidente ruso Vladimir Putin alarma a Europa. El surgimiento de Rusia como una superpotencia agresiva, está forjando a Europa en una superpotencia política y militar, poderosa y eficiente.
Ahora la crisis migratoria y el terror islámico se suman a la presión ya en sí tremenda. Europa tiene mucha historia, a menudo la de una nación luchando contra otra. Se necesitará mucha más presión para fundir a Europa en ese poder unificado. Pero esa presión está aumentando.
Estas crisis han provocado que muchas voces prominentes exijan cambios radicales. Muchos están pidiendo que la Unión Europea, actualmente con 28 naciones, 19 de las cuales comprenden la zona euro, se reduzca a un núcleo de aproximadamente 10 naciones. Algunos incluso usan la misma designación que el Sr. Armstrong usó hace 50 años: ¡unos Estados Unidos de Europa!
Alemania en el corazón
¿No es sorprendente que las declaraciones en las noticias actuales sean tan similares a las que hizo el Sr. Armstrong hace décadas?
En 1952, el Sr. Armstrong escribió: “Estados Unidos está ahora decidido, a no dejar que nada se interponga en el camino de construir una Alemania independiente y rearmada. Ésta será el corazón y núcleo de la Europa unida que revivirá al Imperio Romano” (La Pura Verdad, junio de 1952).
Alemania es hoy el líder indiscutible y sin restricciones de Europa, política, financiera y militarmente. La crisis financiera que comenzó en 2008 ha empoderado a Berlín, que, en comparación con el resto de Europa y el mundo, goza de una sólida salud financiera y económica. Alemania ha tenido que rescatar a varios Estados europeos de la bancarrota, un proceso que ha fortalecido políticamente a Berlín y ha creado una relación clara de ‘amo y sirviente’ entre Alemania y gran parte del resto de Europa.
El ascenso de Alemania es tan obvio que muchos periodistas y políticos convencionales y respetados ya hablan hoy abiertamente sobre el Cuarto Reich de Alemania.
El ascenso de Alemania es tan obvio que muchos periodistas y políticos convencionales y respetados ya hablan hoy abiertamente sobre el Cuarto Reich de Alemania. En su edición del 21 de marzo de 2015, Der Spiegel de Alemania, una respetada revista con una circulación de más de 1 millón, comparó explícitamente a la Alemania moderna con el Sacro Imperio Romano. Habló de cómo el término reich se refiere simplemente a “un dominio, con un poder central que ejerce control sobre muchos pueblos diferentes. Según esta definición, ¿sería un error hablar de un Reich Alemán en el ámbito económico? (…) Un imperio está en acción, por lo menos en el ámbito económico. La eurozona está claramente gobernada por Alemania, aunque Berlín no es incuestionable. Sin embargo, tiene una voz significativa en el destino de millones de personas de otros países”.
Spiegel está lejos de ser la única voz que defiende esta opinión. Considere sólo algunas observaciones de los últimos años.
- Simon Heffer, Daily Mail, 17 de agosto de 2011: “Donde Hitler falló por medios militares para conquistar Europa, los alemanes modernos están teniendo éxito a través de la disciplina comercial y financiera. Bienvenido al Cuarto Reich”. 29 de marzo de 2013: “La historia muestra que es, siempre, sólo una cuestión de tiempo antes de que Alemania termine dominando a Europa. Después de años rehusando imponerse, el tiempo de Alemania ha llegado otra vez. El Cuarto Reich ya está aquí sin siquiera disparar un tiro: y es mejor que el resto de Europa y el mundo se vayan acostumbren a eso”.
- Stephen Green, Telegraph, 23 de junio de 2015: “Alemania se encuentra en el centro geográfico y económico y, por lo tanto, cada vez más, también en el centro político de la nueva Europa. Ya no todos los caminos conducen a París, sino a Berlín”.
- Nigel Farage, ex líder del Partido de la Independencia del Reino Unido, en el Parlamento Europeo, noviembre de 2011: “Estamos viviendo ahora en una Europa dominada por los alemanes, algo que el proyecto europeo se suponía que iba a detener, y algo por lo cual quienes nos precedieron pagaron un alto precio en sangre para evitarlo”.
- Peter Oborne, Daily Telegraph, 21 de julio de 2011: “Alemania ha llegado muy cerca de cumplir el sueño de Bismarck, el de un imperio económico que se extienda desde Europa Central hasta el Mediterráneo oriental”. 5 de marzo de 2015: “Esto marca un punto de inflexión vital en el mundo de la posguerra. Alemania ha sido durante mucho tiempo el poder económico dominante en la Unión Europea. Con la Sra. Merkel a cargo, está convirtiendo ahora ese poder económico en poder diplomático”.
- Martin Wolf, Financial Times, 8 de mayo de 2012: “Esto no es una unión monetaria. Es mucho más parecido a un imperio”.
- Nicholas Kulish, New York Times, 10 de septiembre de 2010: “En mayor o menor medida, Alemania está flexionando sus músculos y reafirmando un orgullo nacional reprimido durante mucho tiempo. Docenas de entrevistas realizadas recientemente en todo el país a trabajadores y hombres de negocios, políticos y amas de casa, artistas e intelectuales, se encontró a un país más a gusto consigo mismo y con sus símbolos, como su bandera y su himno nacional, un pueblo aún consciente de la historia de su país, pero menos dispuestos a dejar que eso dicte sus acciones”.
Está fuera de discusión: la UE es ahora una potencia mundial dominada por Alemania y liderada por Alemania.
La Alemania moderna es, por un amplio margen, la economía líder de la UE. Es el centro de tránsito para el transporte marítimo y terrestre de la Unión Europea. Alemania también está preparada para controlar la encrucijada energética entre Europa y Rusia. Frankfurt es el hogar del banco más poderoso del mundo, el Banco Central Europeo. Y el antiguo Alto Mando Alemán, el que los Aliados de la Segunda Guerra Mundial juraron que permanecería desmantelado para siempre, se ha reunido una vez más con nuevo ropaje y un nuevo nombre: el Comando del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas. Éste el cerebro detrás del desarrollo de una poderosa fuerza de defensa europea con armas nucleares.
¡Cuán preciso fue el pronóstico del Sr. Armstrong de que Alemania sería el “corazón y núcleo de la Europa unida”!
Esas palabras proféticas fueron comparadas, con una precisión asombrosa, a una declaración de 2009 hecha por Philip Murphy, embajador de EE UU en Alemania. “Alemania es la pieza central de la Unión Europea”, dijo en Berlín el 1 de diciembre de ese año.
La historia de Europa nos dice que esperemos que una potencia europea desempeñe un papel importante en el mundo. El dominio económico y geográfico de Alemania en el Continente nos dice que ésta será el líder de Europa. Pero ¿por qué esperar un conglomerado de 10 naciones?
Este pronóstico está respaldado no sólo por más de 1.500 años de historia europea, sino por la profecía bíblica.
La fuente de los pronósticos
Ante la mención de profecía, muchas personas se desconectan inmediatamente. Pero antes de hacerlo, tenga en cuenta que todas esas previsiones que ya se han cumplido, se basaron en profecías que mucha gente descartaría inmediatamente.
¡Europa hoy es una prueba viva de la relevancia y la veracidad de la profecía bíblica!
Mire esta declaración que el Sr. Armstrong hizo en 1962: “La profecía muestra que 10 reyes (...) surgirán en Europa y darán su poder a Alemania”. Se debe a la profecía bíblica que el Sr. Armstrong sabía que una unión de 10 naciones surgiría de Europa en estos últimos días.
Apocalipsis 17 describe con vívido detalle esta séptima y última resurrección del Sacro Imperio Romano. “Habrá una resurrección de ese antiguo Imperio Romano. No mucha gente lo cree, porque las personas han ido más allá de creer realmente que la Biblia dice lo que quiere decir”, dijo el Sr. Armstrong hace más de 50 años. “Usted va a tener que vivir y verlo, y va a tener que saber que era Dios quien estaba hablando cuando dijo que esto iba a suceder”.
El emperador Justiniano reconoció la supremacía del Papa en el año 554 d. C. Así, cuando llegamos a estas resurrecciones profetizadas en Apocalipsis 17, hay una “mujer” ramera montada sobre esta “bestia” romana resucitada. Este es un símbolo profético de la gran iglesia falsa que influye y gobierna poderosamente sobre el imperio político. Es una unión impía de iglesia y Estado.
“Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos” (Apocalipsis 17:3). Estas siete cabezas y 10 cuernos son los términos bíblicos utilizados para describir al Sacro Imperio Romano en sus siete etapas específicas, culminando en la unión final de 10 naciones (o grupos de naciones) al final de esta era.
¡Aquí la Biblia está hablando claramente de una gran bestia política levantándose en Europa, que será dirigida por una gran bestia religiosa europea, en una alianza impía que se propone conquistar al mundo!
Estas siete resurrecciones sucesivas del Sacro Imperio Romano tendrían lapsos intermedios, representados por las cimas y los valles de los montes en Apocalipsis 17. Como H. G. Wells escribió en The Outline of History [El contorno de la historia]: “El Imperio Romano se tambalea, se extiende, sale del escenario, y reaparece, y (...) es la iglesia de Roma, la que interpreta el papel del mago y mantiene vivo el cadáver”.
Los 10 cuernos mencionados en Apocalipsis 17 son parte de la séptima cabeza. Estos 10 cuernos son 10 jefes de Estado en Europa que unirán a 10 naciones, o grupos de naciones, como parte de la resurrección final del Sacro Imperio Romano.
Muchas otras profecías se alinean con éstas en Apocalipsis. Daniel 2 describe simbólicamente a cuatro imperios de dominio mundial, trazables a través de la historia, siendo el cuarto el Imperio Romano, “fuerte como hierro” (versículo 40). La profecía muestra que justo al final, este imperio tendrá 10 partes, representadas por los 10 dedos de los pies de esta imagen. Daniel 7 retrata los mismos cuatro imperios, pero con diferentes símbolos; enfatizando las repetidas resurrecciones del Imperio Romano. (Estas profecías se explican en nuestro folleto gratuito, Daniel: ¡Al fin descifrado!) Profecías adicionales que proporcionan aún más detalles se pueden encontrar en Isaías 10, Habacuc 1 y muchos otros pasajes.
Observe lo que un escritor popular en Gran Bretaña, conocido por el seudónimo Arzobispo Cranmer, escribió en 2011: “La Unión Europea es esencialmente la re-creación del antiguo imperio de Carlomagno: desde el momento en que fue firmado el Tratado de París en 1951, la Comunidad Europea del Carbón y el Acero unió los destinos económicos y políticos de Francia y Alemania”. Este comentarista reconoció recientemente este hecho. ¿Pero quién, además de Herbert W. Armstrong, estaba escribiendo sobre esto hace más de medio siglo?
El Sr. Armstrong estaba en la escena durante la sexta resurrección del Sacro Imperio Romano, y profetizó sobre la séptima y última resurrección. ¡Ya estamos presenciando esa resurrección final hoy!
La Biblia profetiza que esta resurrección final continuará por un corto tiempo, sólo 2 años y medio. Todas las profecías que se han hecho realidad, y las que se están haciendo realidad ahora, dejan muy claro lo que sucederá al final de ese corto período. Aunque el reinado final de este imperio impío será brutal y sangriento, terminará después de un corto tiempo y dará paso al evento más emocionante y lleno de esperanza en la historia de la humanidad: la Segunda Venida de Jesucristo. ▪
EL IMPERIO IMPARABLE DE EUROPA
Europa no sólo ha aguantado décadas de altibajos, sino que también ha sufrido la muerte, y luego ha resucitado siete veces durante miles de años. La Biblia pronosticó esto en detalle, y la historia europea muestra que eso sucedió. Algunas de las descripciones bíblicas de esta historia son tan detalladas y precisas que los críticos insisten en que deben haber sido escritas después de ocurridos los acontecimientos y no antes.
Sin embargo, estas profecías bíblicas revelaron eventos que sucedieron mucho después de que la Biblia fue terminada. De hecho, esta historia europea contenida en la Biblia todavía se está desarrollando. Descubra qué partes de la Biblia describen la historia de Europa y si su esfuerzo de unificación actual tendrá éxito una vez más. Solicite su copia gratuita del folleto, Alemania y el Sacro Imperio Romano.