El presidente Trump anuncia nuevos aranceles
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expuso sus propuestas arancelarias el 27 de enero en el retiro republicano de la Cámara de Representantes en su complejo de golf de Doral, en Florida.
• El Sr. Trump anunció un arancel del 10% sobre los productos chinos porque ese país está enviando fentanilo a México y Canadá, que acaba en EE UU.
• Este arancel del 10% entrará probablemente en vigor el 1 de febrero, el mismo día en que está previsto que comiencen los aranceles del 25% sobre México y Canadá.
El presidente también anunció que se impondrían aranceles al aluminio, los chips informáticos, el cobre, los equipos de defensa, los productos farmacéuticos, el acero y los semiconductores.
Déficit comercial: la diferencia entre lo que EE UU importa y lo que exporta alcanzó un nuevo récord en 2022 a medida que las mercancías extranjeras inundaban el país.
El déficit comercial global en 2022 ascendió a 972.000 millones de dólares, de los que más de un tercio procedía del comercio con China. El déficit ha mejorado algo desde entonces, pero EE UUsigue importando aproximadamente 74.000 millones de dólares más de lo que exporta cada mes.
El presidente Trump está tomando medidas para reducir la dependencia de EE UU de sus tres mayores socios comerciales (Canadá, México y China) y para garantizar que la industria de defensa estadounidense sea autosuficiente.
Guerra comercial: EE UU se ha vuelto demasiado dependiente de las naciones extranjeras para los bienes esenciales, y necesita desesperadamente revitalizar su industria manufacturera antes de que sea demasiado tarde.
Las profecías del tiempo del fin en Deuteronomio 28, Isaías 23 y Ezequiel 5 describen los efectos devastadores que el asedio económico tendrá sobre EE UU en el tiempo del fin.
Sin embargo, la principal razón por la que esta guerra comercial será tan devastadora es que EE UU se ha vuelto adicto a los productos extranjeros. La nación funcionaba bien sin la China comunista en la década de 1950, pero desde entonces ha abrazado una agenda globalista que ha arrancado el corazón industrial del país.
Si EE UU no vuelve a Dios y a los valores que hacen grandes a las naciones, aprenderá por las malas que la China comunista es un socio mucho menos digno de confianza que el gran Dios.
Más información: lea “Superpotencia bajo asedio” en el libro de Gerald Flurry, redactor jefe de la Trompeta, Ezequiel: El profeta del tiempo final.
