El presidente alemán advierte contra un liderazgo de ‘mano dura’

El presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, ha advertido contra el creciente deseo de formas de gobierno autocráticas. “El anhelo de mano dura y de aislamiento nacionalista, la susceptibilidad al resentimiento y a la intolerancia, todo ello tiene que ver también con una profunda inseguridad que se apodera de muchas personas en estos tiempos turbulentos”, dijo el 19 de mayo en la ceremonia de celebración del 50º aniversario de la zeit-Stiftung Ebelin und Gerd Bucerius.

Él dijo que el cambio climático, las pandemias, la guerra en Ucrania y otros disturbios están provocando ansiedad entre muchas personas. “Pero este sentimiento no debe llevar a nadie a la conclusión errónea de que las democracias liberales son débiles e incapaces de hacer frente a sus tensiones internas o a las grandes tareas del siglo xxi”, dijo Steinmeier.

Curiosamente, muchos en Alemania han criticado al canciller del partido de Steinmeier, Olaf Scholz, por su falta de liderazgo. En una encuesta realizada en abril, dos tercios de los alemanes calificaron el liderazgo de Scholz como débil; desde entonces, cada vez son más los que se sienten decepcionados. Scholz no sólo no ha cumplido lo que prometió a Ucrania, sino que tampoco ha logrado la prometida revolución en el propio gasto militar de Alemania. Bajo su liderazgo, Alemania se ha convertido en una especie de hazmerreír.

La debilidad del liderazgo hace que la gente quiera un gobierno más autocrático. Aunque Steinmeier tiene razón al advertir sobre esta tendencia, tampoco aporta una solución. La gente siente una amenaza contra su futuro y cada día aumenta su preocupación.

“Los europeos se enfrentan a grandes crisis, como la inestabilidad económica, el terrorismo y la inmigración ilegal, y las crecientes amenazas de Asia. En tiempos de crisis, la gente se preocupa menos por las normas democráticas. Necesitan un liderazgo fuerte”, escribió Gerald Flurry, redactor jefe de la Trompeta, en nuestro número de noviembre-diciembre de 2021, justo antes de que Rusia invadiera Ucrania. Pero como explica el Sr. Flurry en “Europa está a punto de ser secuestrada”, el liderazgo que obtendrá Alemania no sólo será fuerte sino también abrumadoramente destructivo. La historia nos muestra que los gobiernos fuertes casi siempre resultan ser destructivos. Pero la Biblia da una advertencia específica a la Alemania actual, que tiene una historia de ese liderazgo destructivo.

Daniel 8:23-25 dice: “Y al fin del reinado de estos, cuando los transgresores lleguen al colmo, se levantará un rey altivo de rostro y entendido en enigmas. Y su poder se fortalecerá, mas no con fuerza propia; y causará grandes ruinas, y prosperará, y hará arbitrariamente, y destruirá a los fuertes y al pueblo de los santos. Con su sagacidad hará prosperar el engaño en su mano; y en su corazón se engrandecerá, y sin aviso destruirá a muchos; y se levantará contra el Príncipe de los príncipes, pero será quebrantado, aunque no por mano humana”.

Esto está claramente en la profecía del tiempo del fin que conduce directamente al regreso de Jesucristo quien traerá un fuerte gobierno justo. Los acontecimientos actuales están preparados para llevar al cumplimiento de esta profecía. Para entender las profecías bíblicas sobre este tema en su contexto adecuado lea “Europa está a punto de ser secuestrada” y pida un ejemplar gratuito de Un líder alemán fuerte es inminente .

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