El efecto Trump en Oriente Medio

Donald Trump hizo campaña con la promesa de poner fin a los conflictos abiertos en el mundo y hacer frente a los adversarios de Estados Unidos. El pueblo estadounidense lo eligió de forma convincente y su presencia se sintió inmediatamente en Oriente Medio, meses antes de asumir el cargo.

Israel Mientras hacía campaña en julio, Trump se reunió con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu. “Lo animé a terminar esta [guerra] de una vez”, dijo Trump a los medios después de su reunión. “Hay que terminar con esto rápido. Hay que lograr la victoria, consigue tu victoria y hay que terminar esto de una vez. Esto tiene que parar; la matanza tiene que parar”.

Los comentarios de Trump sugieren que está dando luz verde a Netanyahu para que termine de destruir la organización terrorista Hamás de una vez por todas. Hacer esto en un plazo corto ha sido el objetivo de Netanyahu desde el principio. Aparentemente, a Trump le parece bien que tome las medidas drásticas necesarias para derrotar a Hamás más rápidamente.

El 11 de noviembre, el ministro israelí de Finanzas, Bezalel Smotrich, anunció que la elección de Trump significa que Israel puede proceder a la anexión de Cisjordania. El 12 de noviembre, Trump nombró como embajador de EE UU en Israel a Mike Huckabee, quien ha dicho que Israel “ya es dueño” de esa tierra y tiene un “título de propiedad” para controlarla.

HAMÁS El apoyo total de Trump a Netanyahu no significa que Hamás vaya a dar marcha atrás. En el momento de escribir este artículo, no se ha acordado ningún cese al fuego e Israel aún tiene que erradicar los últimos vestigios de poder del grupo en Gaza.

Puede que Trump tenga que tomar cartas en el asunto. En su discurso en la Convención Nacional Republicana en julio, dijo: “Queremos a nuestros rehenes de vuelta. Y más vale que estén de vuelta antes de que yo asuma el cargo, o pagarán un precio muy alto”.

Esto indica que Trump podría intervenir directamente en Gaza para luchar contra Hamás y liberar a los rehenes o, al menos, degradar las finanzas y las oficinas de Hamás en el extranjero. De cualquier modo, EE UU seguramente presionará a Hamás mucho más que bajo el mandato de Joe Biden.

Irán Durante su primer mandato, el presidente Trump se retiró unilateralmente del acuerdo nuclear que Barack Obama utilizó para empoderar al régimen radical de Irán. Aplicó una política de sanciones de “máxima presión” y ordenó el asesinato de Qassem Suleimani, el cerebro terrorista más infame de Irán. Todo indica que Trump continuará con la misma política exterior. Brian Hook, miembro del equipo de transición de Trump, sugirió a cnn que se reiniciaría la campaña de máxima presión. Parece que Trump tiene en mente poner al terrorismo islámico radical en su sitio, e Irán lo sabe.

Lo que dice la Biblia

Cuando Trump trabajó junto con Netanyahu, tanto EE UU como Israel experimentaron un resurgimiento geopolítico. En su primer mandato, Trump carecía de experiencia y luchaba por defenderse de los ataques políticos internos. Hoy, Trump conoce el juego mucho mejor. Él sabe quiénes son sus amigos y sus enemigos, y sabe más sobre el poder que puede ejercer.

El primer mandato de Trump fue una época dorada para las relaciones entre Israel y EE UU. Esta vez, al menos a corto plazo, la Trompeta anticipa una relación aún más fuerte.

Nuestra expectativa se basa en un pasaje de 2 Reyes 14. Los versículos 26-27 hablan de un tiempo en el que el antiguo Israel sufrió una “amarga aflicción”, hasta el punto en que un enemigo casi “borró el nombre de Israel de debajo del cielo”. Como explica el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, en su libro gratuito Estados Unidos bajo ataque, este pasaje es una profecía para el EE UU moderno. Es un pronóstico de graves problemas para la nación y luego Dios la salva de una manera específica: “por mano de Jeroboam”. El Sr. Flurry ha identificado el cumplimiento moderno de este hombre como Donald Trump.

Pero la profecía no se refiere sólo a EE UU. El versículo 28 dice que este Jeroboam “restituyó al dominio de Israel a Damasco y Hamat, que habían pertenecido a Judá”. “La indicación es que Jeroboam recuperó algo para ayudar a Judá, la nación judía”, escribió el Sr. Flurry en 2022. “Este versículo vincula la política de EÉ UU y de Judá” (…).

“Desde la toma de posesión de Joe Biden, predije que tendríamos más ataques terroristas palestinos debido al cambio de liderazgo. Eso es exactamente lo que comenzó a suceder. ¡Cualquiera debería ser capaz de reconocer el por qué! (…) Parece que el Sr. Trump puede tener que recuperar algo de la libertad de Judá” (la Trompeta, septiembre de 2022).

Trump aún no ha tomado posesión, pero el mundo ya siente el rumor de un resurgimiento inminente del Estado de Israel. Esto será temporal. Pero después de que Su pueblo aprenda algunas lecciones, Dios los salvará permanentemente. Israel entrará entonces en una verdadera edad de oro.