El corte de un cable submarino de Internet hace temer un sabotaje ruso
Un importante cable submarino de Internet que une Finlandia con Alemania fue cortado el lunes, levantando sospechas de sabotaje ruso.
Se está investigando la causa de los daños, pero el proveedor estatal finlandés de servicios de datos Cinia dijo que probablemente se debían a actividad humana.
“Este tipo de rupturas sin impacto externo no se dan en estas aguas”, dijo el director general de Cinia, Ari-Jussi Knaapila.
El incidente se produce después de que Finlandia se uniera a la OTAN el año pasado, lo que enfureció a Moscú y dejó a Finlandia temerosa de represalias.
Historial de sabotaje: Rusia y sus socios tienen un historial de atentados contra la infraestructura submarina de sus enemigos.
• En 2021, Rusia estuvo probablemente detrás de la misteriosa desaparición de kilómetros de cables frente a la costa de Noruega.
• En 2023, barcos chinos inutilizaron “accidentalmente” los dos únicos cables submarinos que conectan las islas Matsu de Taiwán a Internet.
• En 2023, investigadores finlandeses afirmaron que un barco con bandera rusa y un buque chino probablemente causaron daños a un cable de telecomunicaciones en el mar Báltico que conecta Suecia y Estonia.
El talón de Aquiles de Estados Unidos: una red de más de 400 cables submarinos transmite el 99% de los datos internacionales. Los daños en incluso algunos de estos cables pueden causar graves interrupciones en el uso de Internet. Rusia y China comprenden lo dependientes que son las naciones occidentales de esta tecnología y parece que cada vez la tienen más en el punto de mira.
La Trompeta lleva casi 30 años advirtiendo de la vulnerabilidad tecnológica de EE UU. En nuestro número de enero de 1995, el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, escribió:
EE UU es la mayor superpotencia que el mundo ha conocido. Pero tenemos un punto muy vulnerable en nuestro ejército: nuestro propio talón de Aquiles. La explotación de este punto vulnerable puede desencadenar la mayor conmoción de la historia de la guerra. (…) La dependencia informática es el talón de Aquiles del mundo occidental, y dentro de unos años esta debilidad podría ponerse a prueba al máximo.
Casi tres décadas después, la debilidad de EE UU en materia de ciberseguridad está quedando expuesta como nunca antes.