Efectos secundarios de las vacunas, ¿el fin de un tabú?

Una prestigiosa revista alemana publicó el 12 de junio un artículo titulado “Síntomas inexplicables tras la vacunación contra el coronavirus; y todo el mundo se esconde”. Durante casi dos años gente de todo el mundo ha mostrado una gran preocupación por la seguridad de la vacuna. Millones se sintieron obligados a tomarla presionados por el gobierno, los medios de comunicación y las instituciones médicas. “Querían protegerse a sí mismos y a los demás, ahora algunos vacunados parecen sufrir síntomas difusos”, comentó Spiegel Online.  “Los afectados se sienten abandonados por los políticos. Entre algunos médicos, el tema parece ser tabú”.

La supresión de este tema habla de la corrupción del sistema.

Aquí se encuentra usted después de haber seguido todas las recomendaciones del gobierno, de haberse encerrado, de haber recibido el pinchazo ¿y luego? Se siente abandonado porque lo que ha pasado no encaja con la narrativa principal. “Es un gran tema tabú en la profesión médica, aunque muchos observan los efectos secundarios. Los colegas veteranos no quieren tener nada que ver con el tema, es demasiado controversial para ellos”, Bernhard Schieffer Director de la Clínica de Cardiología de Marburgo, sede de uno de los dos únicos hospitales universitarios de Alemania que aceptan casos sospechosos de síntomas inexplicables relacionados con la vacuna.

Spiegel Online da una razón de por qué tan pocos hablan del tema: “Casi ningún médico quiere seguir el juego de los opositores a la vacunación”. Schieffer añade otra razón diciendo: “Todo lo que tiene que ver con la vacunación está emocionalmente caldeado. Los informes negativos sobre la vacunación contra el coronavirus, después de todo, no están exentos de problemas legales”.

Un médico de familia que se puso en contacto con Spiegel lo calificó de tema tabú. Admitió que a menudo no hay tiempo suficiente para informar de los posibles efectos secundarios y que es difícil demostrar que los casos que se producen son consecuencia directa de la vacuna. Schieffer señaló: “Se trata sobre todo de gente joven que se ve sacada de su vida cotidiana; vemos una mayoría de mujeres. No sabemos si sus síntomas se deben realmente a la vacunación”.

Por supuesto, la correlación no siempre implica causalidad, pero en este caso la repentina aparición de casos inexplicables apunta al mismo culpable. Spiegel Online comentó: “Sin embargo, la profesión médica se encuentra en una incómoda situación mixta: tienen que poner en práctica la campaña de vacunación promovida por el gobierno alemán y convencer al mayor número posible de sus pacientes de que se vacunen. Al mismo tiempo, normalmente sólo ven a aquellos que posteriormente desarrollan dolencias semanas o meses después de la vacunación; apenas es posible establecer una conexión tan tarde”.

Poco después de que se publicara el artículo, el ministro de Sanidad alemana, Karl Lauterbach, abordó por primera vez la cuestión diciendo que el tema es relevante y debe investigarse más. Pero enseguida añadió que los beneficios de la vacunación superan a los riesgos. Sin embargo, en el estudio de Spiegel Online, el individuo teme ahora más a la vacuna que a la enfermedad.

Las acciones irresponsables de los gobiernos de todo el mundo han provocado un sufrimiento indecible.

La gente ha sido censurada, ridiculizada y sometida a burlas. Se creó un ambiente que hizo imposible cualquier estudio imparcial. A los ciudadanos les quitaron sus derechos y el gobierno exigió una confianza absoluta sin ofrecer ninguna ayuda cuando las cosas iban mal. En Salmos 82:5 leemos: “No saben, no entienden, andan en tinieblas; tiemblan todos los cimientos de la tierra”.

Todo nuestro mundo ha sido engañado (Apocalipsis 12:9) y esto incluye la ciencia y el campo de la medicina del mundo. Comenzando con el rechazo de Adán y Eva al modo de vida de Dios, la humanidad ha puesto su confianza en los dioses falsos y en la ciencia falsa. Solicite un ejemplar gratuito de La pura verdad acerca de la sanidad divina por Herbert W. Armstrong, para entender cómo el mundo científico se desvió del camino y cuál es la solución de Dios. Entender la verdad contenida en este breve folleto es más relevante hoy que nunca.

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