Dinamarca abole día festivo para aumentar el presupuesto de Defensa
Tras la invasión rusa de Ucrania, los miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte están tratando urgentemente de aumentar sus presupuestos militares. Dinamarca tomó una medida drástica para facilitar las nuevas necesidades presupuestarias y anunció el 28 de febrero la cancelación de un día festivo: el Gran Día de Oración. El gobierno espera que al añadir un día laborable al calendario se recauden ingresos fiscales que permitan financiar la defensa del país.
-
La decisión despertó la preocupación de los sindicatos, que temían que ésta pudiera establecer precedentes. Aunque en los últimos años los daneses han soñado con semanas laborales más cortas, la realidad puede ser la contraria en el futuro, no sólo en Dinamarca sino en toda Europa.
Una decisión irónica: la tradicional fiesta cristiana del Gran Día de la Oración se remonta a 1686. Aunque originalmente el día hacía un llamado a la autoreflexión e incluso al ayuno, su significado se ha diluido desde entonces. Recientemente, el día recuperó su significado como llamado a la paz, pero el gobierno danés parece confiar en sus militares.
Cuando se incluyó en el Libro de Estatutos en 1686 debía ser un día de oración, ayuno y penitencia. Hoy en día la mayoría de los daneses asocian el Gran Día de la Oración con bollos de trigo calientes (en danés: varme hveder). En los últimos años los inmigrantes han revivido el Gran Día de la Oración (o Día Nacional de la Oración) como un día de oración por la nación y por la paz en el mundo.
—Iglesia Evangélica Luterana en Dinamarca
La profecía dice: la Biblia revela que de la Europa moderna surgirá una formidable superpotencia militar. Daniel 2 revela que las naciones israelitas modernas se unirán a esta alianza militar o serán consumidas por ella. Como se explica en “La nueva tierra de Israel” en el libro de Herbert W. Armstrong Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía, Dinamarca desciende de la antigua tribu israelita de Dan (Dinamarca significa “marca de Dan”).
El antiguo Israel rechazó a Dios y siguió el paganismo. Muchos israelitas modernos han aceptado un cristianismo falso que acepta el nombre de Cristo pero que también incorpora muchas prácticas paganas. Últimamente, estas naciones se han sumido cada vez más en el materialismo. La Biblia revela que Dios castigará a los descendientes modernos de Israel por su pecado de quebrantar el primer y gran mandamiento. Este castigo conducirá a la oración, al ayuno y al verdadero arrepentimiento.