Christopher Wray testifica sobre la politización en el FBI

El director del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), Christopher Wray, testificó ayer ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes. El comité interrogó a Wray sobre distintas áreas de parcialidad política dentro de la principal agencia policial de Estados Unidos.

Sistema de justicia dual: Jim Jordan, líder republicano, acusó a la agencia de albergar un “sistema de justicia dual” que persigue a los republicanos mientras hace la vista gorda con los demócratas. Abrió la audiencia citando ejemplos de politización:

• El gobierno federal coaccionó a las grandes empresas tecnológicas para que censuraran las opiniones conservadoras.

• Un equipo SWAT de 25 hombres detuvo a un activista provida por defender a su hijo de 12 años frente a una voluntaria de Planned Parenthood.

• El fbi espió una campaña presidencial.

• El fbi cateó la casa de un ex presidente.

• Y el fbi ha perseguido a denunciantes del delito.

La acusación falsa de colusión entre Trump y Rusia: según el ex director de Inteligencia Nacional John Ratcliffe, Wray ha admitido previamente bajo juramento que el fbi no tenía motivos para solicitar una orden fisa (Ley de Vigilancia de la Inteligencia Extranjera) para espiar la campaña de Trump. La investigación de Robert Mueller, el informe de Michael Horowitz y el informe de John Durham han demostrado que la investigación sobre los vínculos entre Trump y Rusia no sólo se inició sin motivos suficientes, sino que tampoco descubrió nada de la supuesta colusión.

Sin embargo, Wray todavía se niega a reconocer que la acusación de colusión entre Trump y Rusia fue un engaño, diciendo: “No se pone seriamente en duda que los rusos, entre otros adversarios extranjeros, hayan intentado interferir en nuestras elecciones”.

La familia criminal Biden: el representante Matt Gaetz citó el mensaje de WhatsApp en el que Hunter Biden amenazaba a un empresario chino y daba a entender que su padre, Joe Biden, lo respaldaba. Wray no quiso hacer comentarios sobre el mensaje, pero cuando se le preguntó si estaba protegiendo a la familia Biden, dijo: “ Absolutamente no. El fbi (…) no tiene ningún interés en proteger políticamente a nadie”.

Sin embargo, el fbi tenía en su poder el portátil de Hunter Biden en el periodo previo a las elecciones de 2020. Según los denunciantes, los responsables del fbi dijeron al personal: “No van a examinar el portátil de Hunter Biden” y se esperaron hasta después de las elecciones para inspeccionarlo.

El Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes tuvo que citar al fbi para que entregara el documento que revelaba que Joe Biden aceptó sobornos de un ciudadano extranjero cuando era vicepresidente. Wray se negó a entregar el documento. No fue hasta que el representante James Comer hizo pública una resolución para declarar a Wray en desacato al Congreso cuando finalmente capituló. El fbi publicó el documento el mismo día en que el presidente Donald Trump fue imputado en una investigación sobre documentos clasificados, una distracción conveniente.

El poder detrás del FBI: estos ejemplos son sólo la punta del témpano de la audiencia de ayer, que duró cinco horas. ¿Quién está organizando toda esta corrupción? Fíjese en lo que escribe el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, en Estados Unidos bajo ataque:

De todas las agencias de inteligencia, la que [Barack] Obama más quería controlar era el fbi. El fbi realiza el trabajo de investigación nacional sobre cualquiera que necesite o posea autorización para acceder a información secreta, por lo que el control sobre el fbi le ponía a cargo de quién puede acceder a qué información. …

La rama de inteligencia tiene pleno control sobre lo que se considera información clasificada. Por eso esta “cuarta rama” tiene control sobre las tres ramas reales y constitucionales: ejecutiva, legislativa y judicial. Cuando otras ramas solicitan información de inteligencia, a menudo las agencias la proporcionan con partes clave redactadas para ocultar lo que realmente sucede. Ellos controlan eso, sin supervisión. Los únicos que ven el panorama completo son Barack Obama y sus principales hombres. ¡Esto les otorga un control sin paralelo!

Más información: solicite un ejemplar gratuito de Estados Unidos bajo ataque.