DEPARTAMENTO DE POLICÍA POLACO / HANDOUT/AGENCIA ANADOLU VÍA GETTY IMAGES
Ataque de misil en Europa cambia la guerra
El 15 de noviembre, dos misiles impactaron sobre una granja en Polonia, cerca de su frontera con Ucrania, matando a dos personas. Los informes iniciales sugirieron que eran misiles rusos que fueron lanzados de forma simultánea mientras Rusia lanzaba una ráfaga de misiles hacia Ucrania. Sin embargo, una vez que se asentó el polvo, las autoridades dijeron que eran misiles ucranianos de defensa aérea que fueron disparados accidentalmente hacia Polonia mientras intentaban interceptar misiles rusos.
Jens Stoltenberg, secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, dijo que las pruebas apuntan a que se trata de misiles de defensa aérea ucranianos, y luego añadió: “Pero permítanme ser claro: esto no es culpa de Ucrania. Rusia tiene la responsabilidad principal al continuar su guerra ilegal en contra de Ucrania”.
La noticia alarmó a muchos porque un ataque a Polonia, que es miembro de la otan, puede poner en marcha el artículo 5 de los estatutos de la alianza, la cláusula de defensa mutua. Al ser Rusia el responsable principal, esto podría poner a Estados Unidos y a otros aliados de la otan dotados de armas nucleares en conflicto directo con una Rusia que también dispone de armas nucleares.
En las redes sociales, la “Tercera Guerra Mundial” comenzó a ser una tendencia, dado a que millones de usuarios expresaron su preocupación por esta posibilidad.
¿Están exagerando estos individuos? ¿O podría este acontecimiento llevar rápidamente a Estados Unidos a una guerra nuclear con Rusia? En la Trompeta, examinamos tales preguntas basándonos en una fuente de inteligencia distinta a la de otras publicaciones. Las observamos a la luz de la profecía bíblica.
Aproximadamente un tercio de la Biblia es profecía, pronósticos sobre lo que depara el futuro. Y un porcentaje considerable de esas profecías incluye detalles sobre una tercera guerra mundial: qué la provocará, quiénes serán los principales beligerantes, qué tipo de armas se usarán y dónde tendrán lugar las batallas principales, entre otros aspectos. Las profecías también aclaran cómo terminará esa última guerra mundial.
Armas de destrucción masiva
Después de que los seguidores de Jesucristo le preguntaran cuáles serían las señales del “fin del siglo” (Mateo 24:3), Él dio una respuesta con muchos detalles. Antes de su regreso, el engaño religioso arrastraría a muchos, las “guerras y rumores de guerras” serían comunes, y la humanidad sufriría “hambres, pestes y terremotos” (versículos 4-7). Dijo que éstas serían las primeras señales, pero que no significarían que el fin de la era fuera inminente.
Entonces Cristo describió un suceso que señalaría el inminente fin de la era: “Pues habrá más angustia que en cualquier otro momento desde el principio del mundo. Y jamás habrá una angustia tan grande. De hecho, a menos que se acorte ese tiempo de calamidad, ni una sola persona sobrevivirá…” (versículos 21-22; Nueva Traducción Viviente [ntv]).
Cuando Cristo dijo esto, un conflicto mundial que pudiera amenazar con la extinción de todas las personas aún no era tecnológicamente factible. Pero alrededor de 1955, la humanidad alcanzó un punto histórico preocupante: la proliferación de armas nucleares hizo posible una guerra capaz de aniquilar toda la vida humana. Hoy en día, los países del mundo se siguen amenazando apuntándose con armas nucleares. Esto demuestra que algunas profecías bíblicas centrales sobre la Tercera Guerra Mundial sólo podrían ser posibles en la era nuclear moderna. Demuestra que el “tiempo de calamidad” previsto en los versículos 21-22 se refiere a lo que ahora llamamos Tercera Guerra Mundial.
Las principales potencias de la Tercera Guerra Mundial y la chispa
Daniel 11 da detalles sobre quiénes serán los principales protagonistas de esta guerra global que destruirá la civilización.
El versículo 40 dice que una entidad llamada “el rey del sur” “contenderá” con una potencia llamada “el rey del norte”. El redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, ha identificado al rey del sur como el islam radical, liderado por Irán. Y el rey del norte será un bloque europeo unido, encabezado por Alemania y dirigido por el Vaticano.
Daniel 11 muestra que después de que el rey del sur se enfrente al rey del norte, este último arrasará con Irán y sus aliados.
Este conflicto estremecerá al mundo.
Lucas 21 registra más detalles sobre la respuesta de Cristo a los discípulos. En los versículos 20-22, Jesús describe un acontecimiento que tendrá lugar justo antes del estallido de esa guerra mundial final que amenaza a toda la humanidad: “Pero cuando viereis a Jerusalén rodeada de ejércitos, sabed entonces que su destrucción ha llegado (…) Porque estos son días de retribución, para que se cumplan todas las cosas que están escritas”. Mateo 24:15 llama a este acontecimiento “la abominación desoladora” que verán “en el lugar santo”.
La contienda profetizada que inicia Irán contra Europa, de la que se habla en Daniel 11:40, está estrechamente ligada a este momento cuando los ejércitos rodearán a Jerusalén. El Sr. Flurry explicó la conexión entre ambos acontecimientos en su artículo “The Whirlwind Prophecy” [La profecía del torbellino].
Estudie la profecía de Daniel más profundamente, y verá a Jerusalén justo en medio de ella. (…) ¿Será porque esa contienda del rey del sur contra el rey del norte ocurre dentro de Jerusalén? ¿Tiene algo que ver con que el islamismo radical ataque o controla un sitio que le pertenece a los católicos?
Algunos de los sitios más sagrados para los católicos se encuentran en Jerusalén, por lo que no es difícil imaginar que ocurra algo así, ni tampoco la reacción furiosa de los europeos.
Cualesquiera que sean los detalles finales de cómo “contenderá”, las Escrituras muestran que estará vinculado a los ejércitos que rodean a Jerusalén y que se intensificará hasta llegar a una guerra mundial nuclear.
Así que la profecía bíblica es clara. No será Varsovia, ni Kiev, ni Moscú, ni ninguna otra ciudad la que los ejércitos nacionales rodeen en los días previos a la tercera guerra mundial. Será Jerusalén.
Rusia, la OTAN, el Armagedón y más allá
Esto no significa que debamos ser indiferentes ante la violencia entre Rusia y Ucrania, o la posibilidad de una mayor participación de la otan. Las tensiones entre naciones con armas nucleares están aumentando. Y nada en la profecía bíblica dice que la guerra rusa no se intensificará, posiblemente involucrando armas nucleares, y posiblemente involucrando a otras naciones.
Si se produce tal intensificación, contribuiría a las “guerras y rumores de guerras” que Cristo advirtió que serían comunes antes del estallido de la Tercera Guerra Mundial. Pero la profecía señala que no será la chispa que encienda esa guerra final.
La profecía muestra que una potencia llamada “los reyes del oriente” estará liderada por Rusia y desempeñará un papel importante en la Tercera Guerra Mundial. Pero este bloque asiático participará principalmente más tarde en el conflicto, no al principio.
Todos estos pasajes muestran que, aunque la actual intensificación de las tensiones entre Rusia y la otan no provocará una guerra mundial, debemos verla con seriedad. Debería hacer que contempláramos las profecías bíblicas sobre una guerra mundial nuclear, para ver que se acercan a su cumplimiento.
Esa guerra incomprensiblemente destructiva se aproxima. Pero las profecías bíblicas no concluyen con una guerra nuclear que borrará a la humanidad de la Tierra.
En Mateo 24:21-22, justo después de que Cristo dice que la guerra al final de este siglo será tan catastrófica que pudiera erradicar toda la vida humana, añade una declaración clave: “Pero se acortará…” (ntv).
La Tercera Guerra Mundial será interrumpida por el regreso de Cristo. En su folleto El Armagedón nuclear está ‘a las puertas’, el Sr. Flurry habla de esta interrupción:
La buena noticia es que Dios acortará el periodo de tiempo y nos preservará la vida. Pero si Él no interviniera, nadie quedaría vivo en este planeta. Él permitirá que esto siga un largo camino para que así las personas aprendan que no se pueden gobernar a sí mismos. Los hombres no saben el camino de la paz. Dios si lo sabe; y si usted guarda Su ley de amor, esto le traerá gran gozo y paz a su vida.
En Apocalipsis 19:11-16 se describe la escena cuando Cristo regresa para asumir su cargo como Rey de reyes, gobernando sobre Rusia, Ucrania, Polonia, Estados Unidos y el mundo entero, y trayendo paz a todos. Sobre el tema de esta era pacifica, Isaías 2:4 dice: “No alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra”.
Para entender las crecientes tensiones mundiales dentro del contexto profético, y para conocer la esperanza que está al corazón de todo esto, pida su ejemplar gratuito de El Armagedón nuclear está ‘a las puertas’.