Ataque con cohetes de Hezbolá mata a niños israelíes que jugaban fútbol
Doce niños israelíes murieron y docenas más resultaron heridos en un campo de fútbol después de que Hezbolá disparara el sábado 27 de julio un cohete contra una comunidad drusa en los Altos del Golán. Se trata del mayor número de víctimas civiles israelíes desde el 7 de octubre de 2023.
"Estaban jugando al fútbol, oyeron las sirenas, y corrieron al refugio (...) les puede tomar como 15 segundos [llegar al refugio]. Pero no pudieron llegar al refugio porque el cohete impactó en el sitio entre el terreno y el refugio", dijo Mourhaf Abu Saleh, que presenció el ataque.
The moment a rocket launched from Southern Lebanon by Hezbollah towards the Town of Majdal Shams in the Golan Heights of Northeastern Israel, struck a Soccer Field where a Children’s Match was being held. pic.twitter.com/5Xxwdks79k
— Tampa Free Press (@tampafreepress) July 27, 2024
Negación: Hezbolá negó ser responsable del ataque a pesar de que el cohete, un Falaq-1 de fabricación iraní, fue disparado desde una zona situada al norte del pueblo de Chebaa, en el sur del Líbano. Es posible que nieguen su responsabilidad porque los drusos son un pueblo de habla árabe que formó parte de Siria hasta 1967.
"Hezbolá pagará un precio muy alto, del tipo que hasta ahora no ha pagado", dijo el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, al líder de la comunidad drusa en una llamada telefónica, según un comunicado de su oficina.
Hezbolá estaba en alerta máxima tras el ataque, ya que preveía una respuesta de Israel. Los vuelos hacia y desde el aeropuerto libanés de Beirut fueron cancelados por precaución.
Respuesta: El gabinete de seguridad israelí autorizó el domingo a su primer ministro a decidir "la manera y el momento" de la respuesta de Israel. Ese mismo día, varios objetivos en el sur de Líbano fueron impactados, con un ataque aéreo adicional el lunes que mató a dos personas e hirió a tres. Dos funcionarios israelíes dijeron que esperaban que los combates continuaran durante varios días.
Aunque a Israel no le interesa expandir el conflicto en Oriente Medio, el ministro de Asuntos Exteriores, Israel Katz, declaró: "Nos acercamos al momento en el que nos enfrentamos a una guerra total".
Observe: a medida que las condiciones se vuelven cada vez más volátiles en Oriente Medio, la Trompeta espera que Europa se involucre más.