Alemania equipa a China en contra de la voluntad de Estados Unidos

Estados Unidos y China han estado en desacuerdo durante años. China está militarizando y apoderándose poco a poco del mar del Sur de China y amenaza abiertamente con invadir Taiwán. Una investigación de la editorial Axel Springer revela que Alemania ignoró las órdenes de Estados Unidos con respecto a China. La modernización militar de China es en parte posible gracias a la tecnología alemana. Por ejemplo, Welt informa que la tecnología de los motores de los buques de guerra chinos procede del fabricante alemán MTU. “Documentos internos muestran ahora que Berlín deliberadamente no quería prohibir las entregas por completo, aunque Estados Unidos insistió en ello”, señaló Welt el 11 de julio. Durante mucho tiempo, Alemania ha dado poder a los enemigos de Occidente, pero es EE UU el que está atrayendo estas maldiciones sobre sí mismo.

Welt resaltó un incidente en el que diez tripulantes de un avión de reconocimiento australiano Poseidón fueron amenazados por un buque de guerra chino que les apuntaba con un láser militar. “Desde la perspectiva alemana, todo esto parece muy lejano. Pero tanto el enfrentamiento con Australia como otros incidentes similares involucraron a destructores chinos de misiles guiados equipados con motores Tipo 956 fabricados por MTU de Friedrichshafen en el Lago de Constanza”, comentó Welt.

Welt y Politico, también propiedad de Springer, revelaron que durante años, Estados Unidos tuvo poco éxito tratando de convencer al gobierno alemán de que restringiera esos suministros o licencias. El gobierno alemán sólo restringió las exportaciones de motores para submarinos chinos en mayo de 2017. Estos motores, por ejemplo, permitieron a los submarinos chinos Song acercarse sigilosamente a los buques de guerra estadounidenses en el Pacífico. “En caso de guerra, los barcos estadounidenses serían un objetivo potencial para los torpedos de los submarinos chinos”, señaló Welt. Pero los motores diésel marinos más grandes no estaban restringidos, ya que podían utilizarse para operaciones bélicas o civiles.

Sin embargo, Welt señala que el instituto de investigación sipri registra regularmente las entregas de MTU a la marina china en su base de datos pública. Por lo tanto, el propósito de su uso es públicamente conocido y no se discute en absoluto. Incluso se dice que los destructores chinos Luyang III más recientes están equipados con motores alemanes. Esto tiene consecuencias geopolíticas, WELT AM SONNTAG señaló que China afirma su derecho sobre las islas del mar del Sur de China con la ayuda de la tecnología alemana.

“Los alemanes no deberían vender esta tecnología de motores a China”, afirma Brent Sadler, un antiguo oficial de la marina estadounidense quien participó en política externa sobre China en el Pentágono. Esta ha seguido siendo “la posición del gobierno estadounidense” tanto bajo presidentes demócratas como republicanos, dijo en declaraciones citadas por Welt.

Éste es sólo uno de los muchos ejemplos en los que Alemania ha empoderado a los enemigos de EE UU. A pesar de las precauciones de EE UU, Alemania ha establecido profundos lazos económicos con Rusia que permitieron la guerra de este país contra Ucrania. Alemania también ha suministrado a Turquía tanques que utilizó en Siria para oponerse a los objetivos de EE UU y ha ignorado las directrices de EE UU respecto a Irán, el principal patrocinador mundial del terrorismo. En 2019, por ejemplo, el gobierno alemán anunció su abstención de participar en una misión militar dirigida por EE UU para disuadir a Irán de poner en peligro las rutas marítimas internacionales en el Estrecho de Ormuz.

Estados Unidos ha intentado aportar estabilidad al mundo tras el intento de Alemania de obtener el dominio mundial en la Segunda Guerra Mundial. Pero muy sutilmente Alemania ha socavado estos esfuerzos. El hecho de que las acciones de Alemania pongan ahora en peligro la seguridad mundial es sorprendente si se tiene en cuenta que EE UU sigue viendo a Alemania como su aliado. Esto no sólo señala la debilidad de EE UU sino también la profecía bíblica.

El redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, explica que la razón por la que EE UU no consigue asegurar la paz mundial “es porque Dios ha quebrantado el orgullo de nuestro poder: ¡nuestra voluntad para ganar! (...) Estados Unidos tiene que darse cuenta de que está bajo la maldición de Dios y tiene que arrepentirse de sus pecados”.

Esto es una referencia a Levítico 26:19 donde Dios está diciendo “quebrantaré la soberbia de vuestro orgullo” como maldición por la desobediencia. Como se explica en Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía, este capítulo se dirige principalmente a los pueblos de habla inglesa de hoy. Para entender esta asombrosa verdad y aprender cómo Dios traerá la paz a esta Tierra, solicite un ejemplar gratuito de Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía por Herbert W. Armstrong.